Capítulo 14

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Anderson despertó con la luz del sol dándole de lleno y una resaca brutal que por desgracia no le había hecho olvidar todo lo que había pasado la noche anterior, la escenita de celos. Lo peor es que ni siquiera sabía porque lo había hecho. Abrió los ojos y se giró, Drake ya no estaba allí y su lado de la cama ya estaba frio. Seguro que se arrepentía de lo que tenían, de estar con alguien tan infantil como él. Necesitaba ir al baño, y al volver a la habitación para meterse de nuevo a la cama y revolcarse en su miseria, alguien le agarró por detrás, vendándole los ojos.

-Señor Anderson, queda detenido – susurró Nathan con voz grave mientras le colocaba las manos contra la pared y le ponía las esposas – Tiene derecho a permanecer en silencio, aunque me pone mucho escuchar sus gemidos... todo lo que diga puede ser utilizado en su contra, derecho a un abogado bla, bla, bla... eso ya te lo sabes, así que podemos pasar a lo importante. – dijo mientras besaba su cuello con ganas, pegándose completamente a él.

-Pero señor agente... -respondió Rick con voz sumisa entrando en el juego mientras echaba las caderas para atrás, rozándose con la erección más que evidente de Drake - No puedo ir a la cárcel, allí sería un juguete para todos esos presos rudos y tatuados... ¿No puedo hacer nada para evitarlo?

Nate jadeó al escucharlo, completamente excitado. Jamás pensó que a Anderson pudiese gustarle jugar tanto como a él

-Bueno... Puede que podamos llegar a una solución si hace todo lo que le digo y quedo satisfecho... - comentó con voz ronca mientras le daba la vuelta y le agarraba del pelo con suavidad, inclinando su cabeza hacia atrás y acercándose a su boca pero sin llegar a besarle, jugando con él.

Rick sacó la lengua, lamiendo los labios de su compañero pero éste se apartó, empujándole hacia abajo con firmeza

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Rick sacó la lengua, lamiendo los labios de su compañero pero éste se apartó, empujándole hacia abajo con firmeza.

-A ver qué tal sabes usar esa boquita... - comentó mientras se desabrochaba los pantalones y liberaba su erección, colocándola sobre los labios de Anderson – Chúpamela.

Rick sonrió con maldad mientras le miraba con lujuria y lamía su miembro lentamente, de arriba a abajo, sin metérselo en la boca, tentándolo. Drake gimió profundamente agarrándole con más firmeza del pelo.

-Abre la boca y deja de jugar conmigo, no estás en condiciones de elegir... - ordenó con firmeza mientras se empujaba entre sus labios, follandose su boca con ganas, mientras Anderson seguía su ritmo como podía. Minutos después, cuando estaba a punto de llegar al orgasmo se separó, ganándose un ruido de protesta del más joven.

-Quiero correrme dentro de ti... - levantándole y colocándole de rodillas sobre la cama, separándole las piernas y colocándose entre ellas. Empujó su espalda hasta que quedó con el pecho apoyado en el colchón y las caderas inmovilizadas por las manos de Nathan – Joder, ni te imaginas la de veces que he soñado con tenerte así, dispuesto y sumiso para mi...

Empezó a prepararle con suavidad, conteniéndose para no enterrarse en su cuerpo de una sola vez, que era lo que realmente deseaba.

Rick separó aún más las piernas cuando los dedos entraron en él. Su cuerpo estaba en llamas y un suave grito salió de sus labios mientas Drake lo llevaba a nuevos niveles de placer golpeando su próstata una y otra vez sin piedad. Minutos después Nathan se desnudó por completo, poniéndose un preservativo y después de cubrir su miembro con lubricante se enterró en él, moviéndose con rapidez sin darle tiempo a acostumbrarse.

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