Rick abrió los ojos lentamente mientras se estiraba en la cama. El sol le daba de lleno en la cara, molestándole, asà que se giró con cuidado quedando frente a Nathan, que seguÃa durmiendo. Nunca le habÃa visto tan relajado, asà que no dudó en aprovechar la oportunidad que se le presentaba para recrearse, la noche anterior todo habÃa ido demasiado rápido y apenas habÃa podido disfrutar de su cuerpo. Apoyó el dedo en su frente y fue bajando por su rostro hasta llegar a sus labios, acariciándolos con suavidad e intentando no despertarle. Poco a poco continuó descendiendo por su cuello, sus hombros hasta llegar a sus pectorales. Entonces sonrió de manera traviesa, la noche anterior Drake habÃa llevado el control y casi no habÃa podido tocarle, tenÃa que aprovechar el momento. Se sentó a horcajadas sobre él, lamiendo sus pezones lentamente, moviendo las caderas en cÃrculos y sin dejar de acariciar toda la piel que tenÃa a su alcance. Nate se removió, empujándose contra él mientras despertaba.
-Buenos dÃas gruñón... -dijo Rick con una sonrisa mientras iba dejando besos por todo su cuello.
-¿Estas aprovechándote de mà mientras duermo? Eso es un delito Anderson, puede que tenga que esposarte...
-Es que ayer casi no pude tocarte, me quedé con las ganas... - hizo un mohÃn mientras seguÃa moviéndose sobre él.
-No te preocupes, que eso podemos arreglarlo... - le agarró de la nuca acercándole a él para besarle con ganas, empujándose contra él, con ganas de repetir lo de la noche anterior.
En ese momento sonó el despertador, interrumpiendo la sesión de besos. Drake gruño al escucharlo, cogiéndolo y lanzándolo contra la pared.
-¡Oye! ¡Me gustaba ese reloj!
-Ya te compraré otro... - murmuró contra sus labios – Ahora quiero seguir con lo que estábamos...
-No no, de eso nada, hay que levantarse, que si no llegamos tarde... -hizo amago de darle un beso, pero se alejó en el último momento, riendo y levantándose de la cama, mientras iba hacia el baño para ducharse. Nathan salió detrás de él, atrapándolo con la espalda contra la pared y pegándose a su cuerpo y preparándole con rapidez.
-Ahora no puedes huir... has despertado a la bestia y tienes que hacerte cargo...-jadeó mientras entraba en él lentamente. SabÃa que no lo habÃa preparado lo suficiente, pero no podÃa aguantar más, lo necesitaba con urgencia.
Anderson gimió profundamente, aunque dolÃa un poco el placer que le proporcionaba era mucho mayor. Levantó las piernas rodeando sus caderas, moviéndose a la par que Drake, acompañando sus movimientos. No entendÃa como habÃa pasado tanto tiempo sin aquello, era lo más placentero que habÃa sentido nunca, Nate castigaba su próstata una y otra vez, sin darle un momento de descanso, enviando latigazos de placer por toda su columna una y otra vez. Ni siquiera podÃa llevar la mano hasta su ereccion para masturbarse, ya que se sujetaba con fuerza a la espalda de Drake para no caerse, mientras este tenÃa una mano en la pared y otra en su espalda para controlar mejor los movimientos.
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SPD New York
ActionDespués de mucho esfuerzo y dedicación el novato Rick Anderson ha conseguido su sueño, entrar en el SPD de Nueva York, aunque nada es como esperaba, ya que al llegar allí se encuentra con el rechazo de sus compañeros, especialmente de Nathan Drake...