XLV. Calabozo.

19.6K 1.6K 120
                                    


Vlad besó mi mejilla al momento que Stefany dejó de abrazarme.

- Ahora vuelvo, cielo. - Susurró en mi oído. - Iré a hablar con Francesca y Alek de acuerdo a Delphine.

- Está bien, - Besé cortamente sus labios. -, recuerda que yo quiero participar, así que no me excluyas y menos ahora...

- Bien, - Sonrió un poco. -, entendido, pequeña.

Fue extraño escuchar las formas cariñosas de como se dirigía a mí, sólo mantuve una pequeña sonrisa sin decir nada.

Abracé a mi hermano después de que Stefany se alejó y me confesó que aunque al principio no le hacía gracia el nuevo entorno, lo involucrada que estaba en este "mundo sobrenatural" y que fuera una futura reina vampiro; entendía y estaba para apoyarme, amarme y destrozar a Vlad si me dañaba.

Selena no se acercó (gracias al cielo), Francesca sólo estaba sonriendo mostrando sus pulgares arriba antes de irse por el pasillo detrás de Alek y Vlad. Y por último, Gwen me abrazó con mayor entusiasmo que su hermana.

- Ahora tendrás la oportunidad de conocer a Vlad perfectamente, - Murmuró Gwen guiñándo el ojo. -, y sin ser hechicera; estoy segura que todo irá bien.

Escuché una pequeña risita de Selena, me contuve a no poner mis ojos en blanco.

¿Ella como mi cuñada? ¡Ugh!

Mi estado de ánimo ha sufrido de un cambio repentino.

Yo nunca he sido celosa de acuerdo a mi hermano y sus novias, pero estaba demasiado molesta con él por estar con Selena. Siento que algo me dice que ella no era totalmente de fiar.

- Buena suerte, Katie. - Susurró Selena pasando a mi lado, la cínica se detuvo y abrazó a mi hermano mirando de reojo a Stefany para después darle un beso corto a mi hermano.

Dejé de ver a la pareja "feliz" para enfocar mi vista en mis padres, quiénes estaban demasiado juntos, sin pelear y con una pequeña sonrisa en sus labios.

Ellos no se soportaban, normalmente no paraban de discutir, y pensé que la única manera de verlos juntos sin discutir sería en la boda de mi hermano y mía... aquí estaban, juntos y sin ánimos de asesinarse, o que yo supiera.

- ¿Hay algo que quieran decirme? - Pregunté alzando una ceja.

Ambos se vieron un segundo para después mirarme a mí sin contestar aún mi pregunta; sonreí un poco y me crucé de brazos.

- Puede que...

- ¡Estamos intentándolo de nuevo! - Esa fue mi madre interrumpiendo a mi padre sonando emocionada y entrelazando sus brazos haciendo que mi papá sonriera aún más.

- Y no saben que tan feliz me hace escuchar eso, - Admití abrazándolos. -, de verdad... no saben cuanto.

- Puedo imaginarlo. - Murmuró mi padre al deshacer el abrazo.

- Katie. - Stefany interrumpió con una expresión seria. - Disculpa por interrumpir, pero... necesitamos encargarnos de algunas cosas. Ahora.

Miré un segundo a mis padres y seguí a Stefany sin decir nada, ésta vez caminamos por todo el pasillo y hasta llegar a las escaleras dobles, subimos en la más cercana y entramos a una habitación que tenía doble puerta; se veía todo oscuro hasta que prendió la luz y la enorme habitación estuvo totalmente visible para ver cada detalle de ella; sin embargo fui sacada de mis pensamientos por la voz de Stefany.

- Necesito que te cambies lo más rápido posible. - Murmuró dándome las prendas negras en mis brazos y saliendo de la habitación cerrando ambas puertas.

La Mujer de Drácula #1Donde viven las historias. Descúbrelo ahora