Antes de morir - Joerick - Editando

● EPÍLOGO ●

Narrador omnisciente

Joel: ¡NO! – grito el chico levantando su cabeza de donde la tenía recargada.

Chris: Hey, tranquilo. – dije tocando su espalda. – Te quedaste dormido en clase.

Joel: ¿Qué? – pregunto confundido. - ¿Cuánto tiempo me dormí?

Chris: Cinco minutos, no te preocupes, el profesor no se dio cuenta, te pasare el apunte de la tarea.

Joel: Tuve una pesadilla Christopher. – dijo secando el sudor de su frente.

Chris: Si me dieran un dólar por cada vez que me dices eso, no estaría estudiando aquí.

Joel: Idiota. – bufó, tomo su mochila y ambos salieron del salón.

Caminaron por los pasillos del colegio, Joel seguía confundido ¿Qué había sido aquel sueño? Parecía bastante real.

Chris: Necesito pedirte un favor. – dice el mayor sacándolo de sus pensamientos.

Joel: Lo que quieras. – dice poniendo atención a su amigo.

Chris: ¿Supiste lo de Santiago y Fernando? – pregunto deteniéndose.

Joel: ¿Ellos que? – dijo sin entender.

Chris: Santiago se acostó con la novia de Fernando.

Joel: ¿Qué? – dijo sorprendido, una sorpresa que lo emocionaba, Fernando era un odioso tipo de quinto, al que odiaba. – debió ser genial ver su cara cuando se enteró.

Chris: Lo sé, dicen que se agarraran a golpes a la salida, y yo tengo una prueba, necesito que tú vayas y grabes todo o me cuentes con lujo de detalles lo que pasa.

Joel: Sera un placer mi querido frentón.

Chris: Gracias y deja de llamarme frentón. – dice corriendo hasta lo que sería su salón de examen.

Joel sonrió al ver como el tipo tropezaba con una de las chicas más lindas del colegio ¿Cómo pudo soñar que él estaría enamorado de un hombre?

Fue hasta la sección donde se encontraban los jardines de los cuartos grados. Había una revuelta, Joel supuso que ahí seria la pelea, se acercó y efectivamente, los gritos de Santiago se escuchaban hasta una distancia algo alejada.

Observando como los golpes iniciaban, un chico que cruzaba por el "campo de guerra" había quedado atrapado y había sido empujado por aquellos idiotas. Joel estaba seguro de haberlo visto antes, "¡Mierda!" susurro al ver que al chico se le había caído una libreta verde, casi como un reflejo fue corriendo a levantarla, el dueño de dicha libreta estaba de espaldas, levantándose, al darse la vuelta Joel entrego la libreta, pero...

Joel: ¿Erick? – susurró.

GRACIAS

Quiero agradecer a todas y todos los que me leyeron, ustedes hicieron posible que esta historia llegara a su fin, asi como tambien hicieron posible que surgiera una segunda parte. 

Tardaria dias en agradecerle a todos, por sus comentarios, algunos me hicieron reir mucho y otros... casi hacen que muera de un paro por la risa. 

Dentro de poco me tendran publicando la segunda temporada de esta historia, este Epílogo da inicio a esa segunda parte, espero le hayan entendido.