20

317 35 13
                                    

Quiero ver sus lágrimas...

Muchas personas deciden darse por vencidos después de un problema al cuál no le encuentran la solución. Otros se ahogan en lágrimas u otros en culpa, pero sabemos que eso no arreglaría nada.

Pero Louis ya se había dado por vencido...

Al apagar su auto, se bajó de este cerrando la puerta con cuidado y en silencio, no tenía ánimos para nada. La noche estaba llena de estrellas, miró hacia su casa y recordó lo vacía que estaría está, sin ninguno de sus hijos... ni su esposo.

– Oh Harry.. – Murmuró en voz baja – Realmente me haces falta maldito rizado.

Caminó hasta por el pasillo de lozas sobre el césped hasta llegar a la puerta, tuvo un sentimiento extraño y abrió con deprisa la puerta, pero sólo encontró la soledad que últimamente lo acompañaba.

Aunque piso algo, una rosa; Louis frunció el ceño y tomó la rosa ya pisada.

– Pobrecita, lo siento mucho.

Pero no sólo era la única, había un camino de ellas; estaban bien esparcidas, daban un camino hacia la cocina.

– Te juro que si estos mocosos me están haciendo una broma juro que sí los abandono en el desierto.

Louis siguió el camino recogiendo las rosas, se estaba enojando sin razón, realmente creía que fueron sus hijos tal vez por dos razones, por una broma o tal vez se quieren disculpar.

Pero, se llevó la sorpresa de su vida...

– ¿Harry?

– Se que perdí la originalidad, pero fue lo que pensé en último momento mientras volvía. – Louis aún estaba confundido – Sé lo que piensas, no es una broma de los chicos... al contrario, ellos realmente quieren que arreglemos las cosas, que lleguemos a un buen acuerdo.

– ¿Hablas del divorcio...? – Mencionó Louis con cuidado.

– No lo sé; ¿desde cuando no teníamos una cita? Creo que es el mejor momento para una ¿no? Puedo cocinar. – Louis sonrió aún confundido – Lo tomaré como un sí.

Harry le sonrió pasando por su lado para comenzar a buscar las cosas...

– Se me antoja pasta.. – Dijo Harry – pero podemos hacer lo que quieras... – Louis seguía callado – Anda, dilo.

– ¿Que le pasó a tu cabello? – Preguntó en una voz casi audible.

– Bueno, estaba en el Caribe y hace demasiada calor...

– Louis lo interrumpió – Dijiste que estarías en América...

– Cambié a último momento, cambiando el tema, hacía demasiado calor y decidí cortármelo.

– Luces más joven...

– ¡Gracias! – Exclamó contento – Era lo que quería escuchar, Matteo me buscó al aeropuerto junto a Leah y ella fue la única que lo notó, pensé que nadie más lo haría.

– Lo hiciste.... ¿porqué querías lucir más joven? – Preguntó con curiosidad.

– ¿Sabes? No sé si contestar correctamente esa pregunta ya que sé que lo tomaras de otra manera dependiendo a como yo conteste.

– Sólo contesta... – Insistió.

– Harry rodó los ojos – Ya te dije, hacía mucho calor, quise hacer algo diferente con mi cabello... y sí, quise algo diferente y joven... ¿algún problema?

It Was Always YouTahanan ng mga kuwento. Tumuklas ngayon