Under the same roof 2 ©

Epilogo

-Alai, tenemos que irnos - Grite desde la punta de la escalera rogando de que me escuchara. Hacia un buen rato que sentía la música que provenía de su habitación.

-Ya voy, papa - Le sentí gritar. Camine hasta el living para colocarme el buzo. Para cuando me di vuelta ella estaba parada detrás de mi - ¿Le avisaste a la tía que estamos yendo?

-Si, ya lo sabe - Asintió con la cabeza - Nos esta esperando con mates y facturas por lo que me dijo - Sonrió. La sonrisa de su mama - Y también nos espera el tío, a la noche piensa hacer un asado así que llévate algo de abrigo por si te agarra frió.

-Ya lo tengo en el bolso - Anuncio - Soy mas rápida que tu, me parece - Me molesto.

-Me eh dado cuenta de ello, hija - Le sonreí - Vamos, que se nos hace tarde.

-Papa - Me gire antes de abrir la puerta - ¿Podemos pasar antes a visitar a mama?

-Claro que si, hija - Moví lentamente la cabeza asintiendo - Vamos a comprarle sus flores preferidas.

-Sergio - Escuche desde mis espaldas. Me gire, era Alai que me miraba divertida - Tenemos que ir caminando, la florería esta a media cuadra - Sonrió. Yo ya estaba a punto de subirme al auto.

-Tenes razón - Le saque la lengua - Solo estoy dormido.

-Si, claro...dormido - Canturreo - Pa...¿Vos crees que si no hubiese ocurrido ese accidente ahora mama estaría con nosotros?

-Mama nunca nos hubiese dejado - Murmure - Pero nadie sabe cuando un loco de puede cruzar en tu camino para sacarte la vida chocandote con el auto, hija - Le acaricie el pelo - Mama estaría orgulloso de vos.

-Y yo lo estoy de vos - Nos sonreímos los dos -Te amo, pa.

-Yo a vos, hija.

**

-¡Santino deja de correr con la botella esa que te vas a lastimar! - Grito en cuanto lo vio pasar por la puerta de la cocina.

-Déjalo, gorda - Le dije cuando la escuche regañarlo - Ya lo sabe, solo lo hace para molestarte.

-Molestarme o no igual se lo voy a decir, se puede lastimar y ya me veo saliendo disparada al hospital - Hablo escandalizada. Fue en cuestión de segundos que Santino volvió a pasar pero antes que volviera a desaparecer ella lo intercepto sacandole la botella - ¿Cuantas veces te dije que no se corre de esta manera?

-Papa me lo dijo, dijo que si lo hacia vos te enojarías - La vi girarse para mirarme. Le sonreí - Dice que le encanta verte enojada y que por eso lo haga.

-¡Rodriguez! - Me apunto con un dedo - ¿Sos o te haces?

-No te enojes amor - La tome de la mano tironeándola hacia mi - Solo fue una bromita. Es como dijo Santi, me encanta verte toda enojadita.

-Sos un tarado - Murmuro entre dientes.

-Tu tarado, Dipasquale - La bese un poquito antes de sentir un carraspeo detrás nuestro. Los dos miramos en la misma dirección encontrando a nuestros hijos viéndonos - Loco, no me dejan besar a mi mujer en paz. Son una plaga - Bromee haciendo una cara de enojo.

-Papa, eso si que es asqueroso - Dijo la mas grande, Aylen.

-Y vos sos una celosa - Bianca la celaba. Sabe que Aylen me ve como su novio aunque tenga sus flamantes catorce años.