Under the same roof 2 ©

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Sergio

Siempre supe que si Florencia se habia cruzado en mi camino habia sido por algo. Pocas eran las veces que creia en las coincidencias, pero esta habia sido una de ellas. Cuando la conoci supo replantearme el mundo, poniendolo de patas para arriba. Toda mi vida desde que tengo uso de razon y que podia pensar por mi mismo fui una persona cerrada, la cual se guardaba cada uno de sus sentimientos, o que simplemente callaba para no hacer disturbios. Cuando la conoci y comence a comprenderla me di cuenta que ella no era como las demas, sino que era distinta. Alguien ideal para una persona como yo.

Creo que jamas me arrepentiria de aquel dia bajo un techo cubriendonos de la lluvia haberle pedido que sea mi novia, que comencemos a caminar los dos de la mano demostrandole al mundo que podiamos contra ellos. Su respuesta inmediata me hizo saber que ella estaba tan o mas enamorada que yo de ella, que se animaba a caminar con quien habia cambiado sus esquemas completamente, a quien habia cambiado para ver el mundo de otra forma. A mi nunca me habian importado tanto los sentimientos de los demas, siempre habia sido yo y nadie mas, pero como veran todo cambio.

Hace casi un año que nos acompañamos juntos, estando en lo que fuera. Claro que no fue un cambio facil, mi familia no la acepto al primer momento por no ser los dos de la misma clase social. Costo que pudieran verla de la misma forma que veian a cualquiera que entrara conmigo, que comprendieran que la queria a ella y no a otra. Recuerdo que fue mi hermana quien primero la acepto cuando Florencia le conto su historia de vida para que sepan que aunque no sea de una clase social alta podia ser feliz, pero que tambien tenia problemas como todos. Luego mis padres lograron aceptarla, habian empezado a incluirla a las cenas familiares. Y se dieron cuenta lo feliz que aquello me hacia.

-¿Como estoy? - Me estaba atando las zapatillas cuando Florencia ingreso a mi habitacion. Llevaba un vestido azul marino con unas zandalias negras. Sonrei plenamente, no estaba equivocado cuando decia que esta mujer me enamoraba dia a dia.

-Hermosa, como siempre - Dejo un beso corto en mis labios para no llenarme de labial. La vi volver a salir para meterse en su cuarto. Cuando termine de atarme las zapatillas y de ponerme la remera me dispuse a ir a buscarla a la suya.