Cap. 07

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 Primer ataque, no es una herida, peor aun una mente corrompida

Capitulo Siete.

Alisha

-"Me temo que no es tan simple querida Alisha"- Dijo Glenn a mis espaldas. Cuando me volví a verlo, me encontré con la espalda de Chris, quien se interponía entre Glenn y yo.

-"Prometiste no hacerle daño"- Gruñó Chris. En este momento estaba tan enojada con Chris que si no estuviera defendiéndome lo haría volar por la ventana.

-"Esa promesa solo era válida si ella cooperaba"- Respondió Glenn y en un latido empujo a Chris a un lado, haciéndolo volar por la habitación.

En ese momento estalló mi temperamento. Con un movimiento de mi mano evite que Chris estrellara contra la biblioteca de la pared, y con mi otra mano me aseguré a tener a Glenn contra la otra pared.

-"TU. NO. LASTIMARAS. A. CHRIS."- Rugí mientras imaginaban como mi poder abrazaba su cuello más y más fuerte.

Si, se que acababa de decir que quería lanzar a Chris por la ventana pero eso no significaba que iba a dejar a otra persona hacerlo. No sabía si los vampiros respiraban o algo pero la cara de Glenn se torno azul.

Liberé mi poder y el cayó al suelo pesadamente tomando bocanadas de aire. Mmm, interesante. Al parecer si respiraban.

-"¡Tu pequeña bastarda!"- Se levantó abalanzándose sobre mí.

Pero antes de que pudiera, otra vez encaraba la espalda de Chris. Aunque no fue él quien detuvo a Glenn de atacarme. Para mi total asombro fue Tamara, la chica con look de estrella porno que no quitaba los ojos de Chris y me miraba como si quisiera separar la cabeza de mis hombros.

Ella lo contuvo sosteniéndolo de ambos brazos desde atrás.

-"Márchense ahora, hablaré con ustedes después"- Dijo ella señalando la puerta con un movimiento de su cabeza.

Chris a diferencia de mí, no dudo ni un instante. Tomó mi mano y escapamos de ese lugar.

Antes de que alcanzáramos el auto, sentí un pinchazo en la parte posterior de mi cuello.

Chris prácticamente me arrojo en el asiento del auto y aceleró a toda velocidad. Cuando estuvimos unos cuantos kilómetros lejos de la casa de Glenn, Chris suspiró.

-"Eso estuvo cerca"- Dijo el estirando su mano para alcanzar la mía.

Aparte mi mano antes de que pudiera tocarla. Ahora que nuestras vidas no corrían peligro podía concentrarme en lo furiosa que estaba con él. Me había ocultado cosas importantes. Cosas que afectaban mi presente y futuro. Cosas de las que nadie me había preparado.

Chris regresó su mano al volante y nos cubrió un silencio incómodo.

Entonces empecé a oír este montón de ruido en mi cabeza. No eran los pensamientos normales que siempre escuchaba. Eran muchos más. Demasiados. Estaban gritando en mi cabeza y sentía iba a explotar.

Tomé mi cabeza con las dos manos. Dolía. Dolía mucho.

-"¿Qué está mal, Alisha?"- Preguntó Chris tratando de mirarme a mi y a la carretera.

-"Son demasiados ¡Demasiados!"- No podía oír mi propia voz con el ruido en mi cabeza.

-"¿Demasiados qué? ¿Qué pasa?"- Era difícil saber cuál era la voz de Chris. Mierda mi cabeza iba a estallar, el dolor se volvía más intenso. Sentía como si mi cerebro estuviera creciendo más que mi cráneo. Ni siquiera podía mantener los ojos abiertos -"¡Alisha! ¿¡Qué pasa!? ¿¡Por qué gritas!?"- ¿Estaba gritando? No sabía nada excepto del doloroso ruido en mi cabeza.

La Normalidad es RelativaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora