Capitulo 14

4.3K 475 37
                                    

—Vamos Ana, cuéntame, ¿qué pasó? —exige por enésima vez desde su posición mirándome con una inmensa expectación. Bufo.

—Kate, ya te he contado todo con pelos y señales, ¿que esperas? —chillo exasperada, pero me ignora olímpicamente.

—¿Y es él indicado? Ya sabes, para...

—Kate, ni siquiera sé que somos y para tu información ya no soy virgen...

—¿¡QUÉ TÚ QUE!? ¿¡CUÁNDO!? —su rostro se descompone de golpe.

—Hace un año...

—¿¡NO ME LO DIJSTE!? ¿¡QUE MIERDA STEELE!? ¡DEBES ESTAR BROMEANDO! —brama entre indignada y furiosa. No soy capaz de contener más la risa y rompo a reír a carcajadas en su cara haciéndole enrojecerse​ aun más—. ¿De qué te ríes? —frunce el ceño ahora desconcertada.

—No puedo creer que te la hayas creido —chillo limpiando mis lágrimas.

—Y yo no puedo creer que me la haya tragado y tú lo hubieras dicho con tanta seguridad conociendo tu personalidad de pollito. —Frunce los labios incredula. Abro los ojos como platos.

—¿¡Yo!? ¿¡personalidad de pollito!? —pregunto "indignada".

—Si, tú.

—Está bien, no te lo niego —para estamos con cosas. Si hasta para saludar tartamudeo, no quiero ni recordar lo roja que me ponía cuando Kate salía con sus clases de sexualidad o tocaba el tema. Agsh, a veces es tan molesta... y transparente.

—¿Y bien? Christian... —Intenta retomar el tema. Pongo los ojos en blanco, no sé que más quiere que le cuente si lo sabe todo, o relativamente todo.

Kate es un sabueso, huele la información omitida, pero ojalá oliera cuando cocina y la comida se quema.

—Ay silencio, momento de inspiración —la callo lanzandole el cojín en la cara que es un: Vete de aquí, Ana quiere paz.

—¿Inspiración para que ridícula? —Le ignoro y pongo un cojín sobre mi cara mientras una sonrisita se me escapa de los labios.

—Adiós —Me despido de él con un beso en la mejilla aún ruborizada e incrédula. Christian Grey me beso hoy y le gustó.

Wow...

—Aguarda —Me toma del brazo antes que sea capaz de moverme y entrar al departamento—. No me a gustado esa despedida. —Alzó una ceja sonriendo.

—¿A no? —Niega con una sonrisa traviesa y malditamente sexy—. ¿Y como quieres que me despida de ti? —Muerdo mi labio inferior intentando reprimir mi sonrisa, la muy maldita ha estafo tatuada en mi cara toda la noche a tal punto de partirla en dos.

—Umm... —En un rápido movimiento acorta la distancia que nos separa tomándome de la cadera y pegándole a él, dejando sólo unos escasos centímetros de distancia entre nuestros labios. Mi respiración rápidamente se irregulariza volviéndose errática—. Así... —arrojando mi mejilla conecta nuestros labios y ambos comienzan una danza lenta y dulce, quitándole el aliento el uno al otro.

Mi corazón rápidamente comienza a martillar fuertemente mi pecho y un ligero cosquilleo se forma en mi vientre.

Ay me desmayó...

Pensándolo bien mejor no...

—A mi igual... me está gustando esta gustando esta forma de despedirme de ti —digo entre bocanadas de aire cuando finalmente nos separamos unos escasos centimetros.

Bueno, puede que más de una sonrisita...

Susurros de Amor... y del corazón Where stories live. Discover now