Capítulo XXXIII

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Holaa! Por lo general hago las notas al final del capitulo pero quizás no las lean y Está es muy importante.
Estamos en el tramo final, lo que significa que faltan alrededor de diez y quince capítulos para terminar.
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Sin mas me despido y espero que les guste este capítulo.
Karen B. 💝💫
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Ethan.

Cada día que pasaba sentía a Ainhoa más lejos de mi, entendía su depresión por la muerte de Klaus y el constante pánico que tiene de que nuestro hijo sufra algo como esto.
Después de la noticia que le dio Ilenya, ella esta mucho más cuidadosa con respecto al embarazo. Pero en su estado de ánimo es algo completamente diferente, no sonríe, no tiene la misma efusividad que me enamoró.
Solo cuando estamos juntos íntimamente sale a relucir su verdadera personalidad, pero todo se termina cuando se duerme y acaba el día. Ahora mismo la veo dormir, después de una sesión intensa ella quedó rendida y duerme tan tranquilamente que nadie diría que esta hermosa mujer es la misma que gobierna con frialdad.
También me preocupa el asunto de Ezra. El malnacido ese se abusa de su dolor para acercarse a ella, con la excusa de tener información de Galaphar, aprovecha para estar siempre en el espacio personal de Ainhoa y eso me jode y mucho.
Puse una mano sobre la barriga un tanto hinchada de Ainhoa y pude sentir el calor que desprendía mi hijo.

- No permitiré que nada les suceda.

Otro día en el que veía como ella misma se hacía daño con su actitud. Ella se mostraba fría y severa ante la gente, no se abría con nadie más que conmigo. Ella estaba sentada en un trono nuevo en el salon donde estaban los mejores rastreadores de todo el reino,  como siempre no había respuestas concretas del demonio y Ainhoa empezaba a impacientarse. 

- Lo quiero muerto cuanto antes. - Dijo ella con voz fría y despectiva, los rastreadores se fueron rápidamente del salón para retomar la búsqueda; solo estábamos nosotros solos allí, me acerque a ella despacio para que no se altere; ultimamente tenia que hacer de todo para que ella no pierda la razón. Cuando estuve frente a ella me arrodille para estar a su altura y acaricie su mejilla, ella cerró los ojos disfrutando del tacto.

- Ya lo encontraremos amor.- Le susurre y ella abrió los ojos, en su mirada veía la pura desesperación de encontrar a ese maldito; Si tan solo pudiera ayudarla para aliviar esta carga.

- Han pasado tres meses y no tienen nada aun, tengo miedo que se acerque a nosotros, a nuestro hijo. - Me dijo ella, me miraba con suplica y lamento porque a ella realmente le dolía que ese asesino estuviera suelto. 

- Yo estare aqui para ambos, te cuidare siempre.

- ¿No te iras cuando me vuelva loca y la presión me mate? - Me dijo ella medio en broma, medio en realidad.

- Jamas me ire de tu lado, nunca. - Selle esa promesa con un suave beso en sus labios.

Estaba también preocupado por mi hijo, ese maldito no tuvo reparo en asesinar a su propio sobrino. Pero Ainhoa tiene un cúmulo de dolor que no está dejando que ella sea completamente feliz y eso me preocupa. No quiero ver como ella se pierde lentamente, no quiero que se convierta en una bestia, no quiero que sea como yo.

Nuestro momento fue interrumpido por el idiota de Ezra que entro al salon sin ser anunciado; camino a nosotros con ese aire de prepotencia que lo caracterizaba. Cuando estuvo frente a nosotros nos inspecciono con la mirada y me miró con desagrado. Idiota.

- Reina, tenemos información sobre los rebeldes. - Dijo Ezra dirigiéndose solo a ella.

- No me digas Reina Ezra. - Dijo ella firmemente.

- Lo siento. - Solo dijo eso y la miró fijamente, ella me miro y suspiro.

- Traeme un reporte de ello, te espero mañana en la tarde . - Dijo Ainoha cansada mientras caminaba al balcon del salon, la voz de Ezra la interrumpió en su camino.

- ¿Y tomaremos té Ainhoa? - Pregunto con burla, como me gustaria romperle la cara por idiota.

- Si Ezra, y donde sigas jodiendo lo prepararas como lo hacen los humanos.- Dijo Ainhoa ya cabreada por los ataques de niño estúpido de Ezra, este la miro ofendido unos segundos y luego cambio su cara como si estuviera planeando algo.

- Te preparare el mejor té de tu vida, Reina.

Salió luego de esa frase dejándome un sabor ácido en la boca del estomago y a mi lobo muy inquieto; el me gritaba que no dejará ir a nuestra hembra al encuentro con Ezra y yo creía que detrás de esa sonrisa perversa y esa invitación a una supuesta "merienda" traía algo más.

- No vayas.

- ¿A donde? - Me preguntó ella confusa desde el balcón.

- A ver a Ezra, el planea algo. - Le dije acercándome a ella, negó con la cabeza sin querer entrar en razón.

- ¿Que dices Ethan? , Ezra jamas me haria daño.- Me respondió ella cortando la conversación.




 - ¿Qué hiciste cuando saliste del salon? - Preguntó Malcom.

- Busque plata y ajenjo en polvo. - Contestó Ezra simplemente mirando sus uñas.

- ¿Para que lo necesitabas?  

- Para matar a un lobo pequeño . - Dijo Ezra sin pena alguna.

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