- Capítulo Cinco -

340 20 1
                                    

Ya llevaba una semana aquí en Inglaterra, ya me sentía casi como en casa. No podía negar que extrañaba a mi familia y sobre todo a Tyler, pero intentaba hablar con él cada vez que me lo encontraba en línea en Skype. Era difícil debido a la diferencia de horario, pero siempre lograbamos arreglarnos para al menos hablar por cinco minutos.

Hoy, Tom nos había invitado a un club donde tocaría su banda. Sin duda alguna era un evento bastante importante, se notaba debido a los nervios que Tom tenía.

-        ¿Con cual me vería mejor? – Tom nos preguntó a mí y a Giovanna, su novia, quien por cierto era un amor.

Tom dos camisetas, una colgando de cada mano. Giovanna y yo nos dedicamos una mirada y soltamos una carcajada.

-        Tom, son casi idénticas – lo miré riendo y Giovanna asintió riendo también.

-        Ponte esta amor –Giovanna tomó una de las opciones de vestimenta de Tom – y lo combinas con esos jeans claros que tienes. Así de simple – él observó la tenida que su novia le había sugerido y asintió.

-        Ya vuelvo.

Tom entró al baño, Giovanna y yo nos miramos y volvimos a reír. 

-        Luego es tu turno de ayudarme a mí sobre como iré vestida –le dije casi obligándola.

-        Será mejor, es más entretenido cuando se trata de ropa femenina, la de los hombres es tan aburrida – comentó Giovanna poniendo sus ojos en blanco.

-        Si, es cierto.

Tom salió del baño vestido con lo que Giovanna le había dicho que usara, se veía bastante bien, Giovanna lo abrazó y le dio un corto beso. Se veían tan felices y enamorados, lo que me recordó a Tyler.

– Está bien, ahora es tu turno –Giovanna me sacó de mis pensamientos  e hizo que me levantara de la cama– Amor, ayudaré a Joanna con su ropa, tú por mientras arréglate el pelo y lo demás.

Salimos de la habitación de Tom y entramos a la mía, Giovanna rápidamente se dirigió al armario. Observó mi ropa detenidamente  y luego me mostró un vestido no muy largo color violeta.

-        ¿Qué tal este?

Miré el vestido por un rato y luego asentí, siempre me había gustado ese vestido y hace bastante no lo usaba, debía darle otra oportunidad.

-        Sí, creo que le has dado en el blanco –tomé el vestido y lo observé. Me gustaba, lo veía perfecto para la ocasión – Espérame –salí hasta el baño y me cambié, saliendo a los pocos segundos para ir de vuelta a mi habitación.

-        ¿Tienes ya los zapatos? – preguntó Giovanna acercándose hasta donde yo me encontraba.

-        Estoy entre estos –tomé un par de zapatos violeta claro y otros con un poco de taco plateados. Giovanna los miró por un momento y eligió los plateados, eran más femenino sin duda alguna.

-        Creo que tenemos los mismos gustos Gio – sonreí sentándome sobre la cama y colocándome los zapato.

-        Además de nombres parecidos – rió y asintió al verme lista. – Te quedan muy bien, Joanna.

-        Gracias –le sonreí.

Tom nos avisó que ya era hora de ir, Carrie y Debbie nos estaban  esperando abajo, ambas muy bien vestidas. 

Salimos de la casa y nos subimos al nuevo amor de Tom, su querido BMW azul. El camino al al club se pasó entre risas por parte de las mujeres, ya que Tom se la pasó callado casi todo el viaje, sí, sus nervios estaban a flor de piel y no lo culpaba.

-        Al parecer Dougie y Harry han llegado – dijo Tom tomándole la mano a Giovanna – Danny tarde, como siempre –dijo después de observar los autos a nuestro alrededor.

Tom saludó a varias personas al estar adentro y caminó hacia una pequeña sala. Seguido de él entramos sus queridas acompañantes, creí que la sala estaría llena pero además de nosotros solo habían dos personas más.

-        Hey – saludó Tom al entrar.

Un chico de pelo color castaño miró a Tom y le sonrió mientras movía sus baquetas en el aire, claramente se trataba del baterista.

-        Te atrasaste Tom –dijo el baterista, molestando a Tom. Todos sabíamos lo odioso que era mi primo con los horarios.

-        No, ustedes se adelantaron — rió Tom.

El rubio que estaba junto al baterista sostenía un bajo color azul, estaba con unos audífonos y tocaba, suponía que se encontraba igual de nervioso que mi primo. Dejó de hacer lo que sea que se encontraba haciendo  y se quitó sus inmensos audífonos dejándolos colgados de su cuello.

-        Acepta que llegaste atrasado alguna vez –habló el rubio con una dulce sonrisa.

-        Harry, Dougie, ella es mi prima –me señaló –, de la que les hablé.

-        ¿Joanna? – preguntó el baterista, yo asentí sonriente – Soy Harry – dijo el chico y se levantó del sillón, acercándose para saludarme con un beso en la mejilla. Así que él era el famoso Harry del que Tom tanto me habló, lo clasificó como “el mejor baterista que una banda británica podría tener”.

-        Un gusto –le sonreí – Por fin conozco al famoso Harry.

-        Así que Tom te habló de mí – rió.

-        La verdad, de todos.

-       Maldición, ya me estaba sintiendo más importante que el resto –Harry bromeó y volvió a sentarse donde segundos antes se encontraba,

El chico rubio, que por fin sabía que era Dougie, dejó su bajo sobre el sillón donde estaba sentado y se levantó para saludarme.

-        Dougie, un gusto – tomó mi mano y la sacudió y luego tímidamente besó mi mejilla.

-        Lo supuse –bromeé y le sonreí- Joanna, aunque ya lo sabías, me han dicho que soy bastante famosa por estos lados–comenté girando mis ojos y me encogí de hombros riendo.

-        Algo así, Tom es como tu fan nº1 –rió él también.

-        Que lindo mi primito –sonreí mirando a Tom y el sonrió de vuelta, encogiéndose de hombros.

Un par de minutos pasaron y la puerta volvió a abrirse, esta vez dejando pasar a un chico sonriente de ojos claros y pelo desordenado, y este debía ser el cuarto miembro: Danny. 

Little JoannaKde žijí příběhy. Začni objevovat