Mi Dulce Admiradora(Vernon&Tu)

Chapter #44

Maratón 1/2
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-Gracias -dijo tratando de sonar amable y tierno pero simplemente no le salio -_____ sobre la pregun...

-Voy a llamar a mis padres -dije interrumpiéndolo.

No era necesario decírselo directamente, Mingyu me dijo que tenía que demostrarle con acciones que le daba otra oportunidad. Así que ignoraría cuando quisiera preguntar para obtener mi respuesta sobre ese tema.
Salí de la habitación, saqué el móvil de mi bolso y tecleé el número de mi madre en el celular.

*llamada telefónica*

-¿Madre?

-¿Hija? ¿Donde estas? Te he mandado un montón de mensajes desde hace varias horas -dijo preocupada.

-Estoy en casa de Yang, me quedaré un rato, regresaré tarde, no te preocupes por mí.

Si le decía que estaba en casa de un chico, mi madre se volvería loca. Era mejor decirle que estaba en casa de Yang, así las cosas no serían complicadas. Corte la llamada y después le avisé a mi amiga que me cubriera. Aunque al principio lo dudo, aceptó.

-He regresado -dije de pie junto al marco de la puerta mirando a Vernon recostado en la cama.

Se veía demasiado guapo con el cabello despeinado. Viéndolo así de enfermo, sentí la necesidad de cuidarlo hasta que estuviera bien, de hacerlo sentir mejor, aunque fuera un poco incómodo para los dos.
Me acerqué a su lado y le mire con una media sonrisa, él me miraba curioso sobre lo que iba a decir.

-¿Que pasa?

-Tengo una idea para no aburrirnos, prometo que no va a ser cansado.

Vernon ladeó la cabeza.

-Veamos una película -dije moviendo las manos emocionada.

-Claro -sonrio.

Si me mostraba distante, esto no podría funcionar, tenía que sólo dejarme llevar. Mis mejillas dolían de tanto haber mantenido esa sonrisa enorme por animarlo.

-¿Como cual te gustaría ver? -dijo Vernon mirándome fijamente a los ojos.

-Cualquiera está bien.

Parecía estar disimulando que se sentía mal, era tan diferente, parecía que ahora no quería usar como pretexto su enfermedad, sólo estaba tratando de hacer que yo me sintiera cómoda.
Le sonreí y me dirigí a encender la televisión y el DVD, para después conectar los cables en su lugar.

-Las películas están en ese estante, ahora busco una -dijo levantándose de la cama pero reaccione antes que él y lo detuve.

-Yo la buscó.

-De verdad puedo hacerlo.

-Vernon... No seas necio, recuestate -dije cabizbaja, respire profundo y le mire lo más que pude directamente a los ojos.

Accedió ya que no le quedaba de otra. Hasta que lo vi recostado, opte por ir a buscar una película de la estantería. Se veía disgustado por mi decisión pero no podía dejar que se esforzará, tenía que descansar.

-¿_____? -dijo llamando mi atención.

-¿eh?

-Sobre la pregunta de...

-¡La encontré! -dije de nuevo interrumpiéndolo, si preguntaba me quedaría como una roca ante él.

-Si, pero...

-De acuerdo... Pongamos la película.

Diablos, había tomado la primera que vi, todo por interrumpir a Vernon, era una película romántica, claro que me sabía la historia. Un chico rebelde y popular se enamora de la chica estudiosa del salón de clases. De todas las que había, ¿Tenia que ser esa? ¿Acaso es el destino? ¿Que había hecho para merecer esto? Suspire profundo cuando vi el nombre de la película en el televisor anunciando que estaba por empezar.

Me di la vuelta. Vernon me señaló con la mano dando palmadas a un lado de él, dando a entender que quería que me sentara a su lado sobre la cama. Trague saliva al pensar que volveríamos a estar tan juntos.
Pero esto seguiría pasando, tenía que acostumbrarme.

Habían pasado 30 minutos, la película estaba entretenida y hasta ahora Vernon se encontraba muy cómodo mirándola, todo lo contrario a mí.
Todo empeoro cuando sentí el brazo de Vernon rodearme y luego una de sus manos sobre mi pierna. Mi respiración se aceleró y sentí una gota de sudor que comenzaba a caer desde mi frente. Trague saliva y traté de apartarlo, pero sólo conseguí que la situación empeorará. Vernon se encontraba ahora encima mío. Literal, estábamos muy juntos.
Vernon estaba consciente, claro que lo estaba, lo supe cuando me percaté de que había usado un poco de fuerza para caer sobre mi, además se encontraba sonriendo.

-Vernon, ¿Pu...edes hacerte a un lado?

-Uhmm -soltó haciéndose al que no escucho.

Como pude hice que cayera a un lado. Había usado la poca fuerza que tenía para quitarlo de encima mío, gracias a dios. Si seguía encima mío, no hubiera podido soportarlo y terminaría mal. En una situación en la cual ninguno de los dos aguantaría la tentación y el deseo de estar en una situación más intima. Sacudí la cabeza al recordar mi primera vez, aquella vez, cuando perdí mi virginidad con el chico que se encuentra en estos momentos a mi lado.

Me levante, quedando sentada y suspire bajo, estaba apunto de irme a buscar un vaso de agua, cuando siento sus manos en mi cintura, que después hacen que quede sobre de él. Me miraba con lujuria, no era tan boba, como para no darme cuenta de lo que quería. Pero, ¿acaso estaba loco? Estaba enfermo y ni siquiera sabía mi respuesta, ¿había ya notado el motivo de tanta preocupación por él?

-_____, ¿Por que estás evadiendo mi pregunta?

-¿De... De que... Hablas?

-Te he querido preguntar desde hace rato si decidiste darme otra oportunidad o no, pero la has estado evadiendo. Necesito saber tu respuesta -sus manos seguían sobre mi cintura y mi cuerpo muy pegado al suyo.

Un escalofrío recorrió todo mi cuerpo cuando me percaté que la situación se ponía cada vez más intensa. Estábamos demasiado juntos, lo cual me hizo sentir un pequeño cosquilleo, en estos momentos odiaba ser tan sensible al tacto.

-La ver...dad... -mire hacia otro lado, pasó por mi mente tratar de irme pero Vernon tomó con más fuerza de mi cintura, parecía no querer soltarme.

-Sólo tienes que decir, si o no.

Había tratado de controlarme mucho, de evitarlo, pero era el momento de decirlo. Tome fuerza y respire profundo antes de decirlo.

-Si... Si te doy otra oportunidad -sin previo aviso los labios de Vernon se posaron sobre los míos, y sus manos subieron hasta mi espalda.