Chapter #34

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Maratón 2/3

Narra TN

Me levanté de la cama y lo primero que hice fue lavarme la cara para quitarme la cara de zombie que traía. Ayer me había quedado terminando un trabajo importante para mi calificación de historia y había estudiado demasiado lo que diría. Me duche, puse mi uniforme, zapatillas y me hice una coleta alta para después tomar de mi mochila y bajar a desayunar.
Baje de las escaleras con mucha flojera mientras boztezaba, al llegar a la cocina me encontré con mis padres ya desayunando.
Mi padre me miró en cuanto escucho mis pasos dentro de la cocina y me sonrió a diferencia de mi madre que estaba indiferente conmigo.

-Buenos días cariño, ¿Como vas en el colegio?

-Buenos días... Voy bien, dejan demasiada tarea pero es normal que se sobrepasen con nosotros en tarea, lo que pasa que tuve que estudiar demasiado.

-¿Normal? -dijo mi padre con asombro - Dejar mucha tarea es excederse.

-No te preocupes para mí es mucha pero en realidad no lo es -sonrei de lado y me senté en una silla al lado de mi padre.

-Amor, ¿No le dirás algo a tu hija? -dijo mi padre observando a mi madre que seguía sería.

-Espero que te vaya bien hoy.

Me miro y me mostró una sonrisa forzada, mi padre estuvo apunto de decirle algo pero fue interrumpido por el sonido de su celular.

-Es mi jefe -dijo avisando y le contesto mientras salia directo a la sala de estar.

Desayune tan rápido como pude ya que Mingyu vendría por mí esta mañana. Al terminar mi padre paso a despedirse de nosotras y después se fue. Escuche como sonó el claxon del auto de Mingyu minutos después y mire a mi madre con los labios apretados, ella se quedo mirándome sin ninguna expresión en su rostro.

-No quiero que sigamos peleadas... entiende que lo único que quiero es ser feliz y no lastimar nadie.

Note como bajo la mirada al igual que la cabeza, después de todo ahora si parecía estar mal por lo que había pasado y como se había comportado. Necesitaba que me perdonará aunque no hubiera hecho algo malo. Además, ¿Por qué ella estaba molesta conmigo y mi padre no? Era ilógico que sólo a ella le importará que me casará con un hombre rico, si mi padre también se veía interesado.

-Tu padre me ha hecho recapacitar sobre el tema.

-¿Mi padre no también estaba de acuerdo?

-Sólo me seguía, pero al saber que no ha funcionado tu relación con Mingyu, él lo ha aceptado, no como yo al principio, pero me ha hecho reflexionar y tiene razón, debo dejarte elegir y ser feliz aunque me cueste -dijo cabizbaja -te amo hija sólo quiero lo mejor para ti, espero que me perdones por lo que te he hecho pasar -dijo entre lágrimas y me dio un fuerte abrazo.

-Te amo mamá y te perdono, detesto estar molesta contigo.

Estaba apunto de llorar a mares pero el sonido del auto de Mingyu me hizo reaccionar y le di un beso en la mejilla a mi madre para después salir e irme al colegio con Mingyu.

Como todos los días que llegaba al colegio con Mingyu, los alumnos se quedaron mirándome sólo que menos que antes.
Esta vez ya no iba de su mano, sólo caminabamos juntos, platicando.
Mientras íbamos en el auto camino al colegio le había contado del porque tarde tanto en salir de mi casa hoy por la mañana. Mingyu se había quedado con muchas preguntas por hacer.

-¿Tu padre, de verdad lo acepto como si nada?

-Eso parece.

-Y, ¿Ha quedado todo bien? Porque no me gusta verte mal por eso, recuerda que quiero verte feliz.

-Si ha quedado todo bien -dije rodeando los ojos y sonriendo.

-Te ves hermosa sonriendo -dijo y me dio un abrazo mientras seguíamos caminando pero como era más alto que yo termino dejándome sin ver nada entre sus brazos.

-Min...Mingyu... No veo nada, me voy a tropezar -dije entre risas y él me ignoró.

-Más vale que te tropieces con una piedra especial -dijo y yo dejé de reírme tratando de entender lo que había dicho pero no sabía de que piedra especial hablaba.

Sentí como iba dejándome ver la luz, miraba hacia el suelo cuando empiezo a subir la mirada y me encuentro con un chico de pie, el rubio terco, guapo y coqueto que no me ha quitado esa mirada de galán de telenovela que hace que te derritas.

-Buenos días _____.

Desvío mi mirada y la dirijo hacia Mingyu de mala gana, ¿esta era su piedra especial? Porque si Vernon lo era entonces seguramente estaba hechizado o algo así, se supone que ellos dos están peleados, no podía llevarme junto a Vernon así de la nada, tratar de que el rubio y yo estemos juntos.

-¿Que está pasando? -dije sin quitarle la vista de encima a Mingyu.

-Ya te dije, quiero verte feliz.

-¿Para verme feliz me traes con él?

-Espera, esto no estaba planeado, justo lo vi cuando te abrace.

-Sigo aquí -escuche decir a Vernon pero no lo mire, no quería hacerlo porque hoy se veía más guapo que otros días y yo no podría soportarlo.

-Los dejaré solos para que hablen, por favor no te molestes conmigo, yo se que tu felicidad es él -dijo con las manos juntas a la altura de su pecho suplicando y yo asentí.

Mingyu desapareció de mi vista, sin responder aquella duda que tenía. Me quedé esperando, quería que Mingyu se arrepintiera y volviera pero no pareció hacerlo.
Una mano sosteniendo una hoja de papel apareció en frente mía, la hoja doblada en cuatro, tenía mi nombre escrito con plumones de diferentes colores y detalles alrededor de color rosa con verde. Me quedé mirando de aquella hoja de papel perpleja hasta que escuche su voz ronca detrás de mí oído dejándome sentir su respiración en mi cuello.

-Supongo que ahora tengo que ser el admirador de mi dulce admiradora -sentí como un cosquilleo recorrió todo mi cuerpo y mis ojos se cristalizaron.

Mi Dulce Admiradora(Vernon&Tu)Kde žijí příběhy. Začni objevovat