Capítulo 18

1.9K 89 2
                                    

Salí del mostrador directa hacia el baño de los empleados para cambiarme. Me apremié por haber venido hoy un poco más arreglada de lo normal.

-Bueno, ¿qué has decido? –me dijo Jack en cuanto me encontré con él.

-Lo que quieras estará perfecto. –respondí. La verdad es que podía comer casi de todo.

-Pues vamos a McDonald de aquí cerca. Me apetece comer algo grasiento.

-Genial. –nos subimos en su coche y él comenzó a conducir. A los 5 minutos llegamos.

-Ugh, hay una cola enorme. –dije con desagrado. Habíamos olvidado el pequeño detalle de que es hora punta.

-Mejor vayamos a otro sitio.

-Jack, no me importa esperar. –mi tripa no estaba por la labor de ayudar y emitió un sonoro quejido.

-Creo que ella –dijo señalando mi abdomen y riendo –no opina lo mismo.

 -Yo tampoco lo creo. –seguimos en el coche unos minutos más hasta que llegamos a un restaurante no muy conocido por lo que veía. Estaba en pleno centro de Londres pero aun así había alguna que otra mesa libre. El camarero que había allí nos guío hacía una mesa alejada y con un ventanal con vistas a un jardín trasero el cual ahora no podía ser utilizado por el tiempo. La temperatura había comenzado a bajar como es normal en esta época. Noviembre.

-¿Qué te parece? –me preguntó Jack al ver que miraba hacía todas partes.

-Me encanta. –con suerte había traído mi cámara y podría hacer algunas fotos al local aunque tendría que pedir permiso. Confié en la experiencia culinaria de Jack y le dejé pedir por mí.

-Y, dime ¿qué vas a hacer a partir de ahora?

-No lo sé, últimamente solo dejo que los días pasen.

-No parece muy divertido.

-No lo es.

-Zoella y Alfie comenzaron a salir el otro día.

-¿Sí? Me alegro por ellos. Marcus me comentó algo pero he estado algo distraída.

-¿Por qué no me extraña?

-Vale, lo admito. Soy una persona muy distraída.

-Y pequeña.

-Eh, no te pases. Solo soy un poquito más baja que tú.

-Si por un poquito te refieres a media cabeza, si, un poquito.

-Amas a esta enana.

-Puede. – ¿Cómo qué puede? Esperaba que me contestase un rotundo no o un sí pero bromeando. Pero ¿cómo me tomo un puede? Creo que no me podía haber dejado más confundida. Eso significaba que podría tener alguna posibilidad con él, pero ¿le quería? Quiero decir, ¿me gusta como para dar cabe a esa posibilidad? No me ha podido dar tiempo a sentir nada serio con él, quizás una leve atracción física. Bueno, más que una leve, una gran atracción física. He de reconocer que sus padres habían hecho muy buen trabajo con ellos. No puedo desmentirlo. El camarero trajo la comida que Jack había ordenado. Empezamos a comer entre bromas.

-Lucy, ¿ha vuelto a pasar algo de lo que tú ya sabes?

-No, de momento. Estoy esperando a salir de esa casa para que nada pueda atarme a ellos y evitar que no vuelva a pasar. Pero puedo perjudicar a más gente.

Evenings in London | Jack HarriesHikayelerin yaşadığı yer. Şimdi keşfedin