El alma perdida

El secreto revelado:

Lord Voldemort se encontraba en la pequeña habitación del segundo piso mirando una foto, con sentimientos encontrados, cuando advirtió que se acercaba alguien a la mansión donde descansaba. Rápidamente guardó su nuevo tesoro en el bolsillo interno de su túnica y se paró del cómodo sillón en donde había estado sentado. Nagini que estaba a sus pies siseó molesta, se deslizó por el piso y salió de la habitación. Ya en la escalera advirtió al hombre oscuro que había un intruso en la puerta principal. En ese mismo momento se escuchó el ruido de la madera al ser golpeada.

Bajó las escaleras tratando de no hacer ruido y miró por una rendija de una cortina que tapaba la ventana. Al principio había pensado que podría ser Snape, algo que le había agradado, últimamente esperaba sus visitas con ansias. Pero no era Snape sino otro de sus mortífagos, Dolohov. Su presencia le sorprendió bastante. Agarró su varita y abrió la puerta.

_ ¿Mi señor?_ dijo el hombre al entrar. No había visto a Voldemort ya que este estaba semi oculto detrás de una columna.

_ Dolohov... ¿Qué se te ofrece?_ dijo el hombre oscuro poniéndose a la vista.

_ Le traigo información que debería conocer, mi señor_ dijo el hombre desviando su mirada en señal de respeto... y temor.

_ ¿Información sobre qué?_ dijo sorprendido.

_ Sobre Severus Snape_ dijo Dolohov con valentía.

Voldemort ya totalmente intrigado le hizo una seña a su mortífago para que lo siguiera escaleras arriba. Siempre le gustaba hablar en la pequeña habitación, donde se sentía más seguro de que nadie iba a escucharlo. Además que le había puesto encantamientos protectores para mayor seguridad.

Al llegar allí el hombre oscuro se sentó en su sillón de siempre frente a la chimenea, que para variar estaba apagada ya que no necesitaba más el calor, su cuerpo casi funcionaba normalmente. Luego le señaló a Dolohov una silla a su derecha donde éste se sentó y cerró la puerta con un rápido movimiento de varita.

_ Ya puedes hablar... ¿De qué se trata esa información?_ dijo el hombre oscuro.

_ Snape nos ha mentido a todos..._ comenzó diciendo Dolohov y Voldemort frunció el ceño, la ira comenzaba a invadirlo.

Luego y durante la siguiente hora le contó lo que había descubierto, sus sospechas fundadas y la conclusión a la que había llegado. Voldemort apenas si podía creerlo, se paseaba por la habitación de un lado a otro furioso. En su mano derecha sostenía su varita y de vez en cuando de esta salían algunas chispas doradas. El odio que sentía hacia Snape era indescriptible... le había mentido y había ocultado en su propia casa a Ania... a "su" Ania.

_ Entonces me dices que estás seguro que "ella" estuvo todas esas semanas en casa de Snape_ dijo Voldemort y agregó luego con ira_: ¡Maldita sea!

_ Así es, mi señor, y... hay algo más_ titubeó Dolohov sin saber si seguir o no. La furia de Voldemort era inmensa y no estaba seguro de cómo iba a tomar lo siguiente...

_ ¿Qué cosa?_ dijo el hombre oscuro poniéndose tenso.

_ La mujer mugg... digo... "ella"_ se corrigió Dolohov al ver la expresión de Voldemort. El señor oscuro no iba a permitirle usar ese término.

_ ¿Sí?_ lo animó el otro hombre.

_ Ella está con Snape_ dijo Dolohov con cautela. Voldemort sin embargo no entendió bien.

_ ¡Ya sé que está con Snape! ¡Vive en el castillo, igual que él y muchos más!_ dijo molesto creyendo que su mortífago se burlaba de él.

_ No... no... me refiero a que ellos dos... tienen una relación amorosa_ dijo Dolohov con un tono de voz extraño, como si le estuviera explicando a un niño pequeño.