CAPÍTULO 70

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POV PARK HYUN JIMIN

–¡Vamos para allá!–le señalé.

–C-claro–le agarré la mano y subimos lentamente las escaleras.

Estábamos en un pasillo enorme lleno de vitrinas con vista al mar. Tenían poca iluminación por lo que le daba un toque tenebroso al lugar. No había mucha gente, salvo un señor hablando por teléfono. Cuando esté volteó a vernos, automáticamente miró a Yoongi y se fue corriendo.

–¿Q-qué paso?–pregunté.

–¿Ah? No nada...―asentí y seguimos caminando.

Nos quedamos varios minutos así, en silencio. De vez en cuando sentía que él me miraba y mis mejillas no dejaban de arder porque ahora, eramos los únicos que estaban allí en plena noche.

Nuestras manos empezaron a moverse de un lado al otro, no sabía si él las movía o yo, pero sea lo que sea que fuera realmente me mantenía calmado.

-Qué bonita vista, ¿no?-preguntó y yo asentí.

–E-es muy tranquilo, aquí.

Él soltó mi mano y se apoyó en el barandal de metal que estaba junto a las ventanas mirando al mar. Yo no sabía que hacer así que lo imité.

Estábamos algo cerca. Tanto así que pude ver un brillo en sus ojos que reflejaban tranquilidad. Se veía...hermoso. Sí, me parecía muy hermoso el hecho de que el estuviera cerca sintiendo su respiración. Ahora sí podía verlo a los ojos fijamente.

–Jimin...–me miró.

–¿Sí?

–Ahora, ¿por qué me miras?

–¿Ah?

–Me estás mirando.

–¿Y-yo?

–Y lo sigues haciendo.

–N-no es cierto–miré al mar.

–Qué lindo te pones cuando te sonrojas, Hye–apretó mi mejilla.

–N-no te e-estaba mirando.

–Mentiroso.

–¡Es la verdad!

–Pues no te creo.

Nos quedamos en silencio hasta que vi por el reflejo de la vitrina que él me miraba.

Volteé y el se encontraba sonriéndome apoyado en una de sus manos con su flequillo tapándole los ojos. Agarré su cabello suavemente y se lo puse para atrás.

–¿Qué haces?

–S-sólo lo ordenaba, nada más–me sentí avergonzado y saqué mi mano.

–Jimin–la sostuvo.

–¿Q-qué pasa?

–Tienes una palomita en los dientes.

Abrí los ojos y me separé completamente. Abrí el cierre de la mochila y empecé a buscar un espejo. De repente el volvió a reírse. No sabía qué decir.

–Ay, Dios...¡era broma, wey!

Tiré la mochila al suelo y me sentí más avergonzado. Se había burlado de mí.

–Oye, era una broma.

–N-no me dió risa.

–Vamos, no te molestes.

Me crucé de brazos y miré hacia el mar. Él se acercó y comenzó a acurrucarse en mi cuello.

–Ya, perdón..

Maybe I am not ✧ YoonminWhere stories live. Discover now