Maybe I am not ✧ Yoonmin

CAPÍTULO 26

POV PARK HYUN JIMIN

Mi cuerpo ya no respondía como debía. Mi vista estaba algo nublada pero todavía podía visualizar un poco lo que estaba sucediendo. Hoseok y sus amigos me tenían en el techo aún y yo todavía no me dignaba a hacer un pare a esto. 

–¡Gordo idiota!

–¡Pendejo de mierda!–seguían gritándome sus insultos que ya no daban efecto en mí. Lo que más me importaba era lo que Hoseok haría con el cheque. Abrí los ojos.

–Listo–dijo Hoseok haciendo que los golpes se detuvieran.–creo que sólo lo haré simple.

¿Qué hará?

Sus amigos se hicieron a un lado y Hoseok se acercó a mí. Esta vez ya no me tenían sujeto ya que ni podía moverme. Mi vista volvió a arreglarse y puse ver perfectamente lo que hizo.

El cheque se volvió en dos pedazos partidos, delante de mis ojos.

–¡H-hoseok..

–Shhh–me puso un dedo en su boca agachándose a mi altura. Todos empezaban a reírse. No lo podía asimilar. Me esparció los pedazos rotos delante de mi cara como si fuesen billetes y me dio otro golpe en el rostro. Estaba lo suficientemente hinchado como para burlarse de mí. Ya no sentía nada.–esto te pasa por ser un bocón.–musitó.

Después de mucho tiempo tenía ganas de hacer algo. Quería pararme y ponerme en frente de él y decirle todo. Todo lo que sentía en ese momento. Humillación. Burla. Impotencia. Injusticia. Yo no había abierto la boca y les comente a todos que Hoseok me amenazaba y golpeaba todos los días. No lo hice. Sólo cometí el error de confiarle por primera vez en mucho tiempo a alguien que sólo lo había conocido en un día. Nim, tenía la culpa. Por él recibo estos golpes. 

Hoseok nuevamente seguía golpeándome la cara. 

–¿No harás nada?–un golpe–¿dejarás que te hagamos esto?–me empujó y me pateo. No me defendí.–¿y esto y esto?–atrás sus amigos se reían. Mi cuerpo ya no hacía caso a lo que pedía y simplemente me quede sin moverme–eres un idiota. Un estúpido, Un marica, pendejo sin hogar. 

–Por eso nadie te quiere, imbécil...–se carcajeaban atrás.

–¿Qué pensará el Jimin de ese entonces, eh? ¿Qué eres un idiota al no defenderse? ¿Eh?–me tiro otra piedra en la cara–Qué pena nos das, Hyun Jimin. Das vergüenza. 

¿El Jimin de entonces?

–Oye, Hoseok.

–¿Qué?–volteó a mirarlo.

–Toma–le tiraron un celular.

–¿Para?

–Una foto, ¿no crees que sería genial tener que mirar su estúpida cara después de esto?

–Oh, tienes razón–me puso el teléfono en la cara y sonó el disparador de la cámara.–mírate, hermoso ¿no?–me mostró la foto.

Daba lástima. No podía reconocerme. No podía creer que mi rostro estaba tan hinchado, morado, derramando sangre y todavía poder abrir los ojos cuando en serio se veía crítico. Me daba rabia. 

Y tú, ¿por qué andas tan solo?

 ¿Qué?  

No hablabas con nadie