Capítulo 41

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Narra Murdoc

Subí las escaleras hacia el cuarto del cara de simio. Hoy sería un largo día. Mientras el Boogieman se encargaría del tamaño de Russel, vendría Damon y Jamie para ver el tema del videoclip. Y claro, el idiota tenía que comenzar a hacer la música.

-Hey, Face-ache – dije en voz baja – 2D, despierta – dije moviéndolo.

-Mmmm – musitó dormido - ¿Noodle?

-¡¿Qué?! – exclamé haciéndolo despertar de un salto - ¡¿Cómo que "Noodle"?

-¿D...dije Noodle? – dijo alejándose – C...creí que había venido a buscarme p...para tomar desayuno – rio nervioso.

-Aún es temprano –dije molesto - Está durmiendo en su cuarto.

-¿Y... y qué haces aquí? – dijo con su voz desafinada - ¿V...vienes a golpearme?

-¡No, idiota! – exclamé – Vine a despertarte porque hoy será un largo día. Después de almuerzo vendrán Damon y Jamie para ver lo de la música del videoclip.

-¡Cierto! – exclamó entrando en razón – Pero... ¿Hoy?

-Sí – respondí seco.

-¿Y por qué me despiertas tan temprano? – restregó sus ojos - ¿Qué hora es?

-Son casi las 9 de la mañana – dije indiferente - Vine a despertarte porque yo ahora me voy con Russel y el Boogieman. No sé a qué hora regresaremos, así que es para que te vayas haciendo la idea.

-G...gracias, Murdoc – dijo con asombro.

-No me agradezcas... Le prometí a Noodle que sería más amable contigo – suspiré resignado – Y después de todo esto es para el bien de la banda – dije volteándome.

-Bueno... - dijo algo desconcertado – Entonces comenzaré mi día para que la tarde sea productiva – lo miré y me estaba sonriendo.

-Sólo no hagas ninguna estupidez con Noodle – dije serio.

-¿Estupidez... con Noodle? – preguntó confundido – Murdoc...

-Escucha – interrumpí acercándome – No sabes cuánto me molesta dejarte solo con ella aquí en el departamento. Sé que es tu amiga y sé que la quieres... Pero si me entero de que te sobrepasaste con ella te parto la cara, ¿Entendiste? – amenacé cambiando de tono. Aunque sabía que no podía hacerle nada realmente.

-Jamás le haría daño a Noodle – dijo mirándome a los ojos – Ella lo es todo para mí...

-Haré como que no escuché lo último – dije molesto – Así evito imaginar cosas que no quiero que pasen... – dije marchándome.

El cara de simio quedó sentado en su cama con expresión de angustia. Odiaba ser consciente de algunas cosas, como de que el imbécil se muere por ella. En un principio intenté de todo para que se le quitara, pero al parecer eso sólo empeoró las cosas.


Flashback

-Hola, Murdoc – me miró extrañado luego de abrir la puerta de su habitación sin tocar.

Yo había conseguido escapar hace poco de la prisión en México, y había llegado a Kong Studios la noche anterior. Sólo que acababa de enterarme de que Noodle y el cara de simio estuvieron solos aquí por meses.

Noodle había salido con Russel, así que era mi oportunidad perfecta. Era hora de que ese maldito pervertido se arrepintiera. Y lo mejor de todo, nadie podría detenerme.

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