Primera cita

9.4K 565 236
                                    

Decir que me sentía como un inmaduro, estúpido y puberto se quedaba corto. La razón era demasiado simple y desde que lo habíamos acordado no había dejado de carcomerme la cabeza sobre este día. Ya era fin de semana, viernes para ser precisos, y hoy era un día especial ya que sería mi primera cita con Steve. Ambos lo decidimos desde el miércoles, donde habíamos acordado que sería en un parque de diversiones (si, bastante típico y cliché, pero Steve tenía ganas de ir así que no había más que decir) pensando que sería una buena idea el pasar más tiempo juntos después de clases. Pero ahí me encontraba yo, con la vista fija en la nada, sintiendo los nervios crisparme el cuerpo sin poder concentrarme de lo que pasaba a mi alrededor.

No tenía nada que temer, toda esta semana había pasado como los mejores días de mi existencia y nuestro noviazgo iba a flor de piel. Aunque era muy pronto para decir que lo nuestro iba a funcionar, yo en mi interior lo sentía, sentía que esto no iba a terminar como mis otras relaciones, esto que estaba creando con Steve era completamente diferente. Él era el único que hacia sacar todas mis emociones a flote, siendo plenamente sincero con él y más que nada conmigo mismo. No solo era eso, sino que también con los pocos días que llevábamos de novios me había dado cuenta de que Steve era el hombre más comprensivo y paciente del mundo, manteniendo sus ideales concretos sin dejar de darme todo su apoyo en cada instante, joder era simplemente perfecto y era por ello que quería que todo en este día saliera de maravilla, por él, por mí.

Estaba de más el decir que esta no era la primera vez que iba a salir con alguien, pero era tan curioso el cómo cuando se trataba de Steve, solamente experimentaba las cosas como si fueran mis primeras veces. Bueno la respuesta era muy fácil: cada día me enamoraba más y más de ese apuesto rubio con corazón de pollo.

—Tierra llamando a Tony, tierra llamando a Tony —lentamente la voz de Loki me fue sacando de mis pensamientos, cayendo en cuenta de que todo este tiempo me encontraba con compañía a la vez de que parpadeaba repetidamente. Bruce y Natasha estaban sentados a mi lado mientras que Loki se mantenía frente a mí, mirándome con mala cara al ver que en todo este tiempo no le había puesto atención a ninguno de ellos—. ¿Se podría saber qué es lo que te trae en las nubes? Oh no, espera espera, no me digas, ya lo sé. Steeeveeeeee —pronunció con burla y voz melosa el nombre de Steve junto con una mueca desagradable, no era raro siendo Loki después de todo, aunque la verdad sus bromas me veían valiendo un cacahuate.

—Cielos Tony..... Nunca creí verte así de inquieto por una simple cita, ya verás que todo sale bien —dijo Bruce con un tono reconfortador mientras me mandaba una sonrisa con el mismo efecto.

—Jajaja ¿acaso no es gracioso? El cómo Tony se burlaba de nosotros e incluso de Loki y Thor, diciendo que lo empalagábamos a mas no poder con nuestra actitud cariñosa cuando ha sido el mismo Tony el que nos ha superado en creces en tan solo una semana. Y mira que mortificarse por una simple cita, eso sí es de críos —comentó Natasha tratando de hacerme un poco la vida de cuadritos al igual que Loki, que había estallado en risas con la observación de Nat.

Lo peor de todo era que tenían razón, yo siempre disgustándome por sus gestos cursis cuando en realidad yo me la pasaba haciendo ese tipo de cosas con Steve. Pero es que mierda, era demasiado lindo y yo no podía contener mis ganas de abrazarlo, besarlo y hacerle mismo a cada segundo. Y volviendo a lo otro, también tenían razón, mis manos me sudaban y mi corazón retumbaba sin siquiera tener a Steve de frente, pero a la vez de que los minutos avanzaban, también lo hacían mis palpitares, acercándose así la hora para poder salir con Steve. De hecho prácticamente me encontraba ahí con ellos por la misma razón. Nos habían dejado salir mucho antes de la hora prevista por alguna junta de maestros, por lo que yo me había quedado de ver en aquel punto con Steve, los demás simplemente me estaban acompañando.

Finding true loveDonde viven las historias. Descúbrelo ahora