Finding true love

Admiradora secreta

Llegué a la cafetería donde me encontraría con Bruce y vi que él ya se encontraba ahí esperándome, acompañado de Potts que lucía extrañamente entusiasmada, mientras que Bruce lucía muy nervioso y apenado. Rápidamente me apresure a hacerles compañía y enterarme de que era de lo que estaban hablando. Me senté en la misma banca que ellos, pero al parecer estaban demasiado concentrados en su conversación ya que ni siquiera me hacían caso.

—¡Bruce! ¡es una chica hermosa! No puedes dejar pasar esta oportunidad así nomas —decía Pepper con enorme ilusión.

—Ni siquiera le hablo Pepper, además de que no me quieres decir quien es.

—Es porque me dijo que no te dijera nada.

—Entonces ¿qué sentido tiene que me estés diciendo todo esto si ni siquiera se quién es?

—Porque ella quiere saber si estas disponible para una relación —dijo Pepper como si fuera lo más obvio del mundo. Aproveché para aclarar fuertemente la garganta y se percataran de que yo también estaba presente.

—¡Oh! Tony que bueno que llegas, quiero decirte que tú también tienes admiradoras secretas —decía a la vez que me guiñaba un ojo—. Hay como tres chicas de nuestro salón que me preguntaron si tenías novia y que si estabas disponible.

—No me interesa —dije con simpleza, ella simplemente dio un suspiro.

—¿Sabes? Por eso es que estas totalmente solo y nadie se te acerca, eres bastante popular entre las chicas Tony y con gran razón ya que eres muy apuesto, pero por tu personalidad tan irritante y esa linda costumbre que tienes de alejar a toda persona que se acerca a ti es por lo que nadie se arrima contigo, te tienen miedo Tony. Me da gusto que aunque sea te estés abriendo un poco con Steve.

—Ok, primero, no me importa en lo más mínimo lo que las demás personas piensen o sientan acerca de mí y segundo, yo no me he estado abriendo con Rogers.

—Hmmmm ¿seguro? —dijo con una sonrisa traviesa—. Ok como tú digas, ya sabía que lo de las chicas no te iba a interesar pero le estaba diciendo a Bruce que tengo una amiga bastante hermosa y linda que está muy interesada en él, pero no me hace caso —dijo a la vez que dirigía su mirada a Bruce con reproche.

—Si ni siquiera sé quién es —se defendía Bruce con pena.

—Deberías intentarlo galán, no está de más —dije a la vez que le daba un codazo y una mirada picara.

—¡Ves Bruce! Hasta Tony está de acuerdo.

—No lo se...

—¡Agh! Bueno yo le diré a mi amiga que estas totalmente disponible y que se acerque a ti —Bruce se sonrojo un poco pero no dio ninguna negativa hacia lo que iba a hacer Potts.

Después de eso me quedé un rato más con mis mejores amigos para después despedirme y dirigirme a mi casa. Todo transcurrió con normalidad y al final en la noche pude notar que tenía una llamada perdida de Steve. Sentí curiosidad al saber el motivo de esa llamada, pero no quería devolvérsela, si él me marcaba de nuevo inmediatamente contestaría, cosa que no sucedió, así que decidí mejor ignorar el insignificante asunto y dormir.

Al día siguiente pude medir mejor mi tiempo y afortunadamente llegué 10 minutos antes. Cuando entré al salón lo primero que escuché fue como Steve me llamaba a la vez que me saludaba con la enorme alegría de siempre. No comento nada acerca de la llamada de anoche y yo tampoco le cuestione así que quedo completamente olvidado ese tema. Nos quedamos de ver a la salida en donde siempre y el tiempo trascurrió hasta que terminó mi última clase y vi como él se encontraba afuera de mi salón, probablemente esperándome. Lo que me extrañaba es que viniera a recogerme ¿acaso seguía sin confiar en mí? Si no era el caso entonces ¿Por qué lo hacía? Me dirigí hacia él para poder comenzar a caminar hacia el patio. Una vez llegando a una banca fue que él empezó a hablar.

—Te tengo una sorpresa Tony —comentó con una enorme felicidad, si era una sorpresa para mi ¿Por qué le hacía tan feliz?—. Cierra los ojos —yo solo hice caso omiso y cerré mis ojos con desinterés ¿Qué rayos se traía entre manos?—, Ahora ábrelos.

Justo cuando los abrí fue que me encontré con una caja pequeña de krispy kreme. Traía cuatro donas en su interior, glaseadas por supuesto y yo no pude más que abrir los ojos como platos, después dirigí mi mirada a esos expresivos ojos azules que me miraban con entusiasmo esperando mi reacción.

—¿Y esto Steve? —¿desde cuándo le comencé a llamar Steve?

—Es un pequeño regalo, por no haber podido asistir ayer para el proyecto —dijo a la vez que desviaba la mirada con una sonrisa y se encogía de hombros.

—Wow no puedo creer que lleves muy poco de conocerme y ya sabes perfectamente cómo ganarme —dije a la vez que tomaba una dona de la caja.

Me sentía extrañamente feliz, hace mucho que nadie se tomaba un detalle conmigo y el que haya pensado en mí me hizo sentir un pequeño calor en mi pecho, hace tanto que no sentía esto

—Muchas gracias Steve —le dije con una enorme sonrisa, una sonrisa verdadera que hace siglos no expresaba, aunque talvez era un poco rara ya que Steve se me quedo mirando un buen tiempo con expresión un poco sorprendida y con un pequeño ¿rubor? En sus mejillas, la verdad no supe interpretar su mirada así que me concentre en el delicioso sabor de la dona.

—Me alegra que te haya gustado —dijo ya después de un tiempo, quitando ese estado en el que se había quedado hace unos instantes.

Pasó un tiempo entre conversaciones triviales e ideas para ir agregando a la introducción del trabajo. Los dos nos manteníamos conversando mientras yo escribía lo principal sobre la introducción.

—Por cierto, le caíste muy bien a Bucky y a Sharon.

—¿Enserio?

—¡Si! Hasta a Bucky le extraño el no verte con más personas, ya que dijo que eras alguien muy agradable.

—Jajaja se nota que no me conoce. ¿Cuánto llevas con Sharon?

—Apenas vamos a cumplir 3 meses, es una gran chica —decía con una pequeña sonrisa, talvez la estaba recordando.

—Ya lo creo, para ganar el corazón del perfecto señor Rogers no debe de ser cualquier chica.

—Es increíble, talvez puedan ser buenos amigos Tony —dijo a lo que yo solo pensé "lo dudo mucho"—. Y no soy perfecto —aclaró con una sonrisa apenada.

—Si claro, díselo a todo el maldito mundo aquí en la escuela.

El tiempo trascurrió muy rápido hasta que se hicieron las 8:00 y nos despedimos para cada quien partir a su casa, claro, yo tomé mi caja de donas no sin antes agradecerle una vez más.

Últimamente el tiempo con Steve se me pasaba muy rápido a la vez de que es agradable. Llegué y vi que tenía un mensaje de Steve que decía "buenas noches Tony que descanses", sonreí inconscientemente y le respondí para poder acostarme por fin y descansar.