Capítulo 13

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Siento demasiada luz en la cara y cuando me despierto me doy cuenta de que son los rayos del sol que entran por la ventana.

Me muevo un poco para que no me den en la cara y sin querer despierto a Ashton que tiene la cabeza en mi pecho.

–Buenos días –le digo en cuanto levanta la cabeza y me mira.

–Buenos días –me dice y me da un suave beso en la frente. Acto seguido se levanta de la cama dejándome ahí.

–No, no te levantes todavía –digo haciendo pucheros y tiro de su brazo llevándolo de nuevo a la cama.

–¿Por qué no? –me pregunta confundido –hay que ayudar a recoger y...

–Shh...–le digo poniendo el dedo índice en sus labios –deja que los demás lo hagan.

–Es que...

–Shh... –le vuelvo a poner el dedo en los labios y me lo muerde –Ay –me quejo aunque no me haya dolido y luego me lo besa –mejor.

Le empujo y se acuesta en la cama, a horcajadas me siento encima suya. Tiro del cuello de su camiseta y él pone sus manos en mis caderas, poco a poco lo acerco hacia mí.

Aún hay una gran distancia entre nuestras bocas y me acerco lentamente. Sé que se muere por besarme pero cuando voy a llegar, justo a un centímetro de distancia, me detengo y gruñe.

Me coge las mejillas con las manos y me atrae hacia él acortando ese centímetro que separaba nuestras bocas.

–Estás guapísimo por las mañanas –le digo entre beso y beso. Un beso que al principio era suave pero ahora es salvaje, lleno de pasión.

–Para –dice apartándose de mi –no me vuelvas a besar más así –me advierte –y menos por las mañanas o no me podré resistir.

–Es que estoy falta de cariño –saco el labio inferior.

Se ríe y se acerca a mi volviéndome a besar. Siento cosas extrañas cada vez que me besa así con tanta pasión, no sabría como explicarlo.

–¡Y ahora a desayunar! –dice levantándose de la cama rápidamente y dejándome ahí sola.

–Venga Ashton, no seas aguafiestas. Ahora que empezábamos a pasarlo bien... –le digo arqueando las cejas.

–Joder Lizzie, para por favor –dice pasándose la mano por el pelo  –¿no crees que ya es suficiente con esto? –señala a sus pantalones y puedo ver su erección.

Le hago caso y me levanto de la cama porque creo que si no lo hago acabaré haciendo el amor con Ashton.

–Vale –corro y me subo a su espalda para que me lleve a caballito.

–Si esto te sirve para que bajemos –me dice y me lleva hasta abajo enganchada a su espalda.

–¡Hola a todo el mundo! –grito y todos me echan una mirada asesina.

–¡Cállate o te juro que te mato! –me dice Juliana masajeándose las sienes y yo me río.

–Ay la resaca qué mala es... –le digo burlándome de ella y pone los ojos en blanco.

Ashton me baja y me siento en la silla del comedor. Él se acerca a la cocina y empieza a abrir los armarios.

–¿Qué tal la noche Juli? –le pregunto y se acerca.

–Bien o eso creo... –dice retirando la silla para sentarse.

–Toma –me dice Ashton trayéndome un donut de azúcar.

Aléjate de míDonde viven las historias. Descúbrelo ahora