Blood Born

Mundos Colapsan

— Veras, esa chica tiene sangre de dioses. Por eso he vuelto. Solo que no podía matarla ni comerla si su sangre no había despertado. Su padre vino, así que una porción de su sangre de dioses ha despertado, es más que suficiente. –Blake respondió empujandome a un lado.

— Antes de tocarla a ella, tendrás que pasar por mi. –dije mientras agarraba el hombro de Blake y lo lanzaba a través de la puerta principal.

— Oh... Te haz vuelto fuerte... Zeus te entrenó bien... Quizás te devore a ti primero antes que a tu querida humana. –dijo Blake mientras sus ojos cambiaban a un verde azul y se lanzaba hacia mi.

Comenzamos a luchar, Blake me agarró por el suéter y me lanzó hacia la decoración de la sala, un cuerno de alce me perforó el pulmón pero gracias a mi regeneración, al sacármelo me curé rápidamente. Tomé el cuerno y corrí hacía Blake. Blake tomo posición para contraatacar. Al acercarme lo suficiente, me transporte detrás de él, bueno, más o menos, fui súper rápido y parece como si me hubiera transportado. Enteré el cuerno en el hombro izquierdo de Blake y mordí su hombro derecho. Él me agarró de nuevo y me rompió la espalda con su rodilla y me pateó en el suelo. Por el golpe caí cerca de la chimenea encendida. Blake sonrió y me levantó de el suelo, me espetó sus garras en mi cuello impidiendo que pueda respirar. Pensé que moriría, si muero de esta forma mi cuerpo tardará quince minutos en recuperarse, Ariel apareció detrás de Blake y le enteró un pedazo de roble afilado en el corazón. Un pedazo de roble no lo matará, a él no, pero si puede detenerlo por una o dos horas.

Salimos de la casa y nos dirigimos hacia los demás en la escuela. Les explicamos todo lo que había pasado y nos creyeron por primera vez, ahora debíamos de ocuparnos de Blake antes que llegue a Ariel.

Blake POV

— La chica es bastante buena, supo donde atacar... –dije mientras me levantaba del suelo.

— ¡La chica! ¡Debes comerla, devorarla, matarla ya!

— Todo a su tiempo, no es tan fácil. A penas despertó.

— Tu hermano... Te esta volviendo blando Blake.

— Nada de eso. No debes tocar a mi hermano.

— No le haré nada, pero si se pone en mi camino... Lo mataré, lo devoraré, deseará no haber nacido.

— Tenemos un acuerdo.

— Si no matas a la chica, el acuerdo no valdrá nada y yo tomaré el control.

Salí de la casa y me dirigí a la escuela. Conociendo a Drake estará reuniendo a el resto de los estudiantes... Debo de buscar mi propio ejercito... Debo buscarlo a él... Me dirigí a donde se encontraba Imhotep, se dice que se encuentra en Nylreg, así que iré allá.

Al llegar a Nylreg, el lugar mas temido de todo el mundo de los monstruos, pude ver el ejercito que tenía Imhotep, había dominado todos los monstruos en esta región, la temible alcaldesa Krystal, estaba atada frente a su pueblo, lastimada y a penas con vida encima de la alcaldía. Al entrar en la alcaldía, pude ver a Imhotep en su trono mientras su amada Anck Su Namun le daba uvas de comer. Imhotep era antes conocido como La Momia, hoy en día su nombre es un chiste ya que un humano logró vencerlo, pero lo que ha hecho este chiste es controlar a la región más temida de este mundo, incluso controla a una que otra bruja del calabozo.

— Dígame, Vampiro, ¿qué le ha traído aquí? –preguntó Imhotep mientras se levantaba de su trono.

— Estoy aquí para pedirle algo, necesito su ejercito para controlar a Lainat. Para destruir a todos y cada uno de los habitantes.

— Y... ¿Porqué me interesaría ese pueblo?

—Señor... Las únicas personas capaz de detenerlo están ahí y... hay una humana con sangre de los dioses.

— ¡¿Qué?!

— Su nombre es Ariel mi señor... Se encuentra en Lainat y porta la sangre del dios Zeus.

— Mm... Te acabas de conseguir un ejercito jovencito... ¿Cuántos necesitas?

— Todos.

Imhotep me sonrió malvadamente mientras levantaba sus manos y con ellas, las paredes y el techo se elevaban en el aire para dejar a luz el ejercito de Imhotep. Un ejercito de 7,000 soldados, controlados por una momia con los poderes de los dioses antiguos.

Esto apenas comienza.