Pa...¿papá?

5.8K 298 69
                                    

Fue así que una vez más llegue a mí tiempo, a mí amada y acogedora línea de tiempo con mi preciosa novia aguardando mi llegada. Irónico era pensar que para ella solo pasaron uno o dos minutos y en cambio para mí fueron 3,500 años (claro, en sentido figurado). Eso me daba mucho en que pensar. Ella se encontraba impaciente sentada en mí sofá.

- Al fin, fueron los dos minutos más largos de mí vida. ¿Lo lograste? ¿Cómo es? ¿Qué se siente? - Pregunto Kym, mientras se levantaba y corría a abrazarme.

- Lo logré, estuve justo en el día y el año al que tú me enviaste. - Dije mientras mis pulmones se adaptaban al nuevo cambio.

Me encontraba demasiado cansado y sudaba mucho, en cuanto Kym me dio algo de tregua me desplome en el sillón. Tenía mucho, demasiado sueño.

- ¿Estás bien Jonh?

- Sí, no te preocupes, solo estoy exhausto, como si acabara de correr un gran maratón.

- Perdón, no debí pedirte que viajarás tan atrás, sinceramente no creí que lo aceptarías tan rápido, pero dime ¿Cómo es Jonh? ¿Cómo es el pasado cuando se viaja tan atrás? - Pregunto.

- Es un oasis en el desierto, era hermoso, de verdad Kym que increíble es todo cuando la mano del hombre no toca la naturaleza. El proceso del viaje también fue más impactante de lo que te maginas.

Ya no quería seguir hablando, en realidad nunca había estado tan cansado como el día de hoy, le pedí a Kym que por favor me dejara dormir un par de horas, ya que literal, realmente necesitaba recargar mí energía.
Ella me preparo un poco de café y un rico plato de estofado con carne de res que me callo como anillo al dedo. Después de comer me sentía mucho mejor y con más vitalidad, le rogué que me dejara dormir, quería ver a mí padre esta misma noche.

Dormí plácidamente como un bebé, uno que puede viajar en el tiempo. Abrí los ojos como a eso de las 8:00 pm, estaba totalmente recuperado, es más, parecía que nunca había viajado tantísimos años atrás en el tiempo, mí energía estaba totalmente recargada.

Salí de mi habitación y ella se encontraba sentada viendo la televisión plácidamente. Amaba ese tipo de escenas con Kym yendo y viniendo por todo el departamento. Me agradaba pensarla así por siempre.

Por el momento había llegado la hora de visitar a mi padre. Las rodillas me comenzaron a temblar de emoción, yo, Jonh Gleen, tenía una virtud especial parecía contener dentro de mí ser, parte de los conocimientos del tiempo y espacio, y una especia de sabiduría especial sobre el universo.

- Jonh despertaste, ni si quiera te escuche, am yo encendí la televisión, espero no te moleste.

Me acerque me senté junto a ella y la bese.

- Nunca, ni si quiera ahora vuelvas a pedirme permiso para usar lo que está en este departamento. ¿Entendido? todo es tuyo.

- Sí, gracias amor.

Me hizo un lugar junto a ella, se acurrucó entre mis brazos y luego agrego:

- Lo harás Jonh, visitarás a tu padre.

- Así es, después de haber comprobado lo que hice ya no debería de haber mayor problema. – Respondí con confianza.

Me levanté del sofá, y comencé a arreglarme para visitar a mi padre y mientras me iba poniendo presentable para mí siguiente viaje a través del tiempo, Kym pregunto:

- ¿Cómo era él, cómo era tu padre?

- Mi padre era una persona muy singular, era una combinación entre niño y general. Tenía unos ojos ligeramente rasgados, su carácter era bonachón pero firme, recio pero comprensible, aquel hombre de rostro dulce y apacible me enseñó muchas cosas, me enseñó el valor de la amabilidad, me mostró como un simple acto humanitario podía decir mucho de una persona.
Dios Kym, estoy tan feliz de saber que lo veré una vez más.

El Maestro Del Tiempo. ¿Y si?...Donde viven las historias. Descúbrelo ahora