Levantarse en las mañanas con los minutos contados y siempre quedaría tiempo para robarte una sonrisa.
Una proeza que solo puedo cumplir hasta "los minutos contados".
Hasta cuando me dolerán el día y la noche.
Porque no es tanto que sigan pasando, si no que no estás en ellos.
Hasta el bus que tomo a diario me lleva a pensarte.
Y pensar si tu me pensarás.
Qué podría hacer sino quererte.
Tomo el café más amargo que he probado y no me despierta.
Solo el de tus ojos tiene el dulce exacto, y hasta ahora el único que me puede quitar el sueño.
He llegado a creer que este libro está mal hecho porque me preguntan por qué escribo tanto dolor.
No es un dolor cualquiera, es el dolor que causa la alegría.
Solo que la tristeza y la soledad están tan presentes que no han notado que las he vestido de pasión.
Que con ella las lágrimas son néctar de agua miel, y así la tristeza y la soledad no manchan mi amor, este les ayuda a controlarse.
Pero qué podría hacer sino amarte.
Quererte y amarte me dan las alas que me llevan a tierra.
La tierra donde te padezco.
Si, te padezco.
Porque ilusionarme solo me dejaría esperanzas, pero padecerte me permite superarte para luego recaer.
El vicio más saludable.
No sé que hacer contigo en realidad.
Si te olvido, te recuerdo.
Si te recuerdo, olvido que no estás.
Cuando olvido que no estás, te amo sin medida.
Y sin medida te llevo.
Derrochando sonrisas, poemas, y escuchando canciones.
Lo que sea para traerte un poquito aunque se en mi imaginación.
Ahora sé lo que quiero hacer contigo.
Lo que sea.
Así siempre será bueno todo lo que pase.
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Chocolates de formol
PoetryNada es tan cierto, claro y preciso como la poesía, por eso es la mejor manera que tengo para hablar contigo de frente. Estos poemas son solo pensamientos que ya no caben en ninguna parte de mi alma y a veces de mi imaginación, pero casi en su total...
