Mi amor siempre te perdona.
Me deja como gaviota perdida entre olas.
Me ahoga y me lanza al abismo de mis pensamientos.
Esos donde todo lo que amo, lo quiero y puedo.
Y así te encuentro, sentada en la arena esperando un amor casi muerto.
Hecho nada de tanta indiferencia y aun así no me cabe en el cuerpo.
Se remonta y eleva a cada suspiro que suelto.
Desde lo alto puedo rozar un beso en tu cuello.
Embriagándome de ese perfume que solo aflora en tu cuerpo.
La tortura que me marca ajeno a tu vida y tu credo.
Mi amor siempre te perdona.
Me deja vacío llenándome de victorias.
Las que gano con cada sonrisa que guardo en mi memoria.
Esperando algún día escuchar su canción al compás de la mía.
Y así te encuentro, donde se unen en sincronía el mar con el cielo.
Dando inicio a mi día con la melancolía.
La de no tenerte aquí, esperando que mi corazón decida regresar o me traiga el tuyo en su lugar.
YOU ARE READING
Chocolates de formol
שיריםNada es tan cierto, claro y preciso como la poesía, por eso es la mejor manera que tengo para hablar contigo de frente. Estos poemas son solo pensamientos que ya no caben en ninguna parte de mi alma y a veces de mi imaginación, pero casi en su total...
