La ve reirse.
Sus palabras se lo dicen y no le queda más que creer.
La toma por instantes de sus manos pero son frias.
Sus lágrimas quiere secar pero solo consuelo puede brindarle.
Quiere ayudarla a soñar pero muy fuera de su alcance está.
A esa pobre criatura no le queda más que abrazarse a la distancia.
Distancia que no sabe la profundidad de lo que separa.
Si no existiera tal entre ellos puede que igual fueran distantes.
Pero solo eso necesita.
Una posibilidad que lo deje seguir creyendo.
En esas noches en que parece escucharla.
En cada abrazo que le regala con cualquier detalle.
En las caricias de sus letras cuando se inspira.
En la ternura que le impregna a su presencia.
Creer en él.
En la fuerza de seguir queriendo a solas sin esperar más.
Entregado al momento que es lo único que tiene.
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Chocolates de formol
PoesiNada es tan cierto, claro y preciso como la poesía, por eso es la mejor manera que tengo para hablar contigo de frente. Estos poemas son solo pensamientos que ya no caben en ninguna parte de mi alma y a veces de mi imaginación, pero casi en su total...