Capítulo Veinticuatro

Começar do início
                                    

Dejó ir mis manos para rodear mi cintura con sus brazos y traerme más cerca de su cuerpo. No podía decir que no me gustaba cuando hacía eso. Especialmente cuando acariciaba mi rostro mientras me sostenía y besaba.

Se alejó poco a poco, dejando una serie de besos cortos en mi boca y alrededor de esta antes de poner distancia entre nosotros. Seguía sonriendo. Nunca me imaginé que haría sonreír a un chico de la forma que hacía con Jayden. Tampoco me imaginé devolverle la sonrisa como estaba haciendo ahora.

Con él era tan fácil.

—Bueno, bueno. Nadie le está pateando el trasero a nadie aquí.

—Cállate.

— ¿Con otro beso?

Rodé los ojos. Lo mejor era ignorarlo cuando se ponía así.

—Es hora de regresar.

******

Mamá ya estaba en casa para el momento que Jayden y yo volvimos. La idea de contarle que estábamos saliendo juntos me puso tensa y muy ansiosa. Había una razón —muy, muy estúpida— que me impedía decirle a mamá. Y era que eso de alguna forma me hacía sentir como si ella había logrado lo que quería —salir con un chico elegido por ella— y yo... yo me había traicionado a mí misma al estar saliendo con él.

Estúpido, ¿verdad? Siempre pensé que saldría con alguien diferente a quien mamá quería para mí. Lo peor de todo era que no me arrepentía en lo más mínimo estar saliendo con él.

Cuando le dijera probablemente comenzaría a tratarme como una mujer, ¿no? Me hablaría de sexo, embarazos no deseados, protección. Y cuando me viera distraída o decaída, pensaría que es debido a él por lo que tendría que hablar con ella para explicarle que no es así.

No sabía qué hacer.

Siempre hablaba con mamá y confiaba en ella, pero hasta este momento no me había dado cuenta que solamente le contaba cosas triviales y sin gran importancia. Quizás lo más grande que le había dicho era lo que había pasado con André y fue porque ella me vio lastimada y muy asustada. No recordaba haberle contado nada sobre Paul y nuestra extraña relación.

— ¿Qué haces ahí parada? — la voz de mamá me hizo dar un respingo.

Levanté la mirada para encontrarla asomándose por la puerta de la cocina. Llevaba el pelo en un moño alto y flojo y vestía un delantal de Superman que papá le había dado. Ella era una gran fan de Marvel comics pero papá le había dado algo de DC comics para molestarla. Era un delantal viejo, sin embargo, lucía como si lo acabara de comprar. Rara vez lo utilizaba.

— ¿Él está bien? — pregunté en respuesta. Un nudo se formó en mi garganta ante el pensamiento de que él hubiera empeorado.

Mamá me observó de una forma extraña antes de bajar la mirada al delantal y regresarla de nuevo a mi rostro. —Si. Sí, cariño. Tu papá está bien, no tienes que preocuparte por eso.

Ella lucía cansada, quizás hasta unos años mayor. Tenía ojeras bajo sus ojos verdes y se le veía demacrada.

— Si él se pusiera mal, me lo dirías, ¿verdad?

Ella regresó a la cocina, murmurando un—: Claro, por supuesto que te lo diría.

La seguí adentro, saludando a mis hermanos que estaban coloreando un libro en la sala de estar y me detuve detrás de ella frente al lavabo. La abracé por detrás, descansando mi barbilla en su hombro. Ella dio palmaditas en mi mano.

— ¿Tienes algo que decirme?

Ella me conocía tan bien. Al menos la mayor parte del tiempo.

— Hm.

— ¿Quieres decirme que tienes novio?

— ¿Qué te hace pensar eso?

Sonreí. Era mucho más fácil así.

— Llegadas más tarde de lo normal, estas menos a la defensiva, besos frente a la casa. Te dije que Jayden era bueno para ti.

Suspiré.

Por supuesto que lo sabía. La única razón por la que no había hecho ningún comentario al respecto era porque esperaba que yo hablara con ella primero. Me alegraba que lo supiera y estaba aún más feliz por el hecho de que no estaba haciendo un gran alboroto.

— Lo estás tomando demasiado tranquilo. Pensé que estarías mega emocionada.

— Lo estoy, cariño. No por el hecho de que tengas novio o porque sea Jayden, sino porque te veo más feliz..., más... como eras antes —. Dejó escapar un suspiro que me hizo abrazarla más fuerte. —Lamento no haber cuidado mejor de ti, Edie. Todo lo que hice, lo hice porque pensé que te ayudaría a volver a ser como antes. No tomé en cuenta cómo te sentirías, pero me alegra mucho saber que Jayden está cuidando de ti.

—Lo sé. No tienes que disculparte por nada.

Me alejé, dando unos pasos hacia atrás. Ella no se volteó y yo sabía que era porque sus ojos se habían llenado de lágrimas.

La dejé sola porque no sabía qué hacer para hacerla sentir mejor. Las emociones provenientes de otras personas me hacían sentir torpe e incómoda. Ni siquiera sabía qué hacer con mis propias emociones, peor para saber qué hacer con las de los demás. Aunque estaba trabajando en ello. Con Jayden.

******

Una vez en mi habitación le envié un mensaje a Jayden diciéndole que mamá ya sabía sobre lo nuestro. Él respondió unos minutos más tarde asegurándome que hubiera estado bien de cualquier forma, si le decía o no. Él no quería que sintiera como si me estaba presionando a hacer algo de lo que todavía no estaba lista.

Jayden: Si tú y yo fuéramos diferentes no lo dudaría ni un segundo y haría todo lo posible por tenerte en mi cama, Ed, porque eres preciosa. Pero créeme cuando te digo que ni aun así te forzaría a hacer nada. Me gusta tomarme mi tiempo. Todo se disfruta más cuando lo haces despacio.

Sentí mis mejillas enrojecer con su mensaje. Me lo imaginé diciéndome exactamente lo mismo frente a frente y eso no me ayudó mucho para refrescar mi rostro caliente.

Me sentía como una pervertida y lo culpaba a él por eso.

Yo: Eres un idiota.

Jayden: Jajá. ¿Quieres que te toque?

Yo: ¿Qué?

Jayden: Una canción.

Ah. Tenía que sacar ese tipo de pensamientos de mi mente.

Yo: Claro. Toca lo que quieras.

Mierda.

Jayden: Tentador. LOL. Ponte cómoda.

Decidí no contestar o seguiría enviándole mensajes coquetos y demasiado provocativos. En cambio me cambié la ropa, me cepillé los dientes y apagué las luces. No fue sino hasta que ya estaba en la cama, totalmente arropada con una sábana fina que la música comenzó a sonar.

Me dormí escuchando a Jayden tocar su guitarra con una pasión que no había visto antes en él.


Cybernetic Cupid© (BORRADOR)Onde as histórias ganham vida. Descobre agora