C R Y B A B Y [36]

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Beatriz entró a la habitación mirando con sorpresa la posición de ambos chicos, donde uno de ellos supuestamente era su novio.

El cuerpo de Rubén se encontraba sobre Miguel enrollando sus piernas juntas. Beatriz sabia que algo extraño pasaba, no sólo por verle en este momentos tan juntos, si no, por el extraño comportamiento de Miguel en la escuela. Casi no hablaba y se mantenía pensativo. Ya no le dirigía miradas ni papelillos con palabras tiernas u otras cosas. Sintió su corazón latir de rabia, ese chico de cabello castaño había logrado separar de ella lo único que estaba bien en su vida, su Miguel.

Salió Encabronada de la habitación apretando la manija de la puerta en un intento de cerrarla con calma, lo cual no hizo, haciendo el fuerte sonido de la puerta cerrada despertará de una a Miguel y a Rubén.

Corrió por las escaleras bajando y salió de la gran mansión subiendo a su auto. Las pagaría caro, y eso era lo único que tenía en los pensamientos Beatriz.

***

— ¿Has escuchado eso? —Tallo sus ojos enfocando la vista a la puerta—. Alguien vino aquí. ¡Oh! ¡¿Que tal si fue tu mamá!? —Su rostro mostro preocupación, mientras a levantaba del cómodo cuerpo de Miguel.

—Seguro fue una chica de servicio. Mamá nos hubiera levantado y pedido explicaciones. —Murmuró adormilado agarrando entre sus brazos la almohada—. Ven a dormir, Rub.

—¿Estas seguro? —Miro la puerta mordiendo su labio nervioso.

—Que si, ya ven.

Se acostó a un lado de él, hundiendo la cabeza bajo la almohada. Miguel pasó sus brazos al rededor de su delgada cintura, pegando su cuerpo con el suyo.

***

Guillermo:

Tres días, han pasado tres putos días y sigo sin encontrar ninguna pista sobre Rubén.

Mi mente daba vueltas tratando de pensar donde demonios se había mi no tan amigo, Rubén. Había recorrido casi toda la inmensa ciudad de Madrid y aún no tenía ni una jodida pista de él. No podía quedarme aquí sin hacer nada.

Salí del departamento donde ahora me había cambiado, parece que colmillo a estado más tranquilo, me aterraba imaginar lo que le harían. Pero no había escapatoria. Siempre hablaba de lo mismo, convencido de su mismo que saldría en el momento indicado, y lo había logrado.

"—Tal vez tú no, pero juro que saldré de aquí algún día. —El humo gris salía de sus labios cada que lo expulsaba de su boca—. Algún día, el indicado Willy.

Me reí por el comentario tan fuera de lugar en el momento—. ¿Eso crees Rubén? Aquí nadie escapa si no te dejan ir ellos.

—siempre me he preguntado... ¿Quien es el verdadero dueño al que realmente tenemos que servirle? —Pregunto.

—No lo sé, pero seguro que nos destruiría si huimos."

El no lo conoce, el no sabe lo que podría hacerle al encontrarle. Salió como si no le importará nada. Me dejo sólo, y ahora tengo que rendir cuentas a Colmillo y a su pandilla. Sólo espero que no te hagan sufrir mucho Rubén. Prometimos estar juntos en ese infierno, tu saliste y tocaste el cielo con tus dedos, a mi me dejaste para podrirme en el infierno, en las catacumbas. Ahora volverás, donde los demonios te esperan, hambrientos de venganza, por qué tú amigo, tú mataste al mismísimo diablo, al líder de los demonios.

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cry baby ↮rubelangel™Donde viven las historias. Descúbrelo ahora