Un futuro que cambiar

Capítulo 16

Capitulo 16

A la mañana siguiente Severus se despertó cuando sintió cosquillas en la nariz. Al abrir los ojos, vio el cabello castaño de Harry que le rozaba la nariz.

Se apartó un poco y sonrió al ver que Harry seguía durmiendo abrazado a él.

Se sentía muy afortunado al tenerlo entre sus brazos. Anoche fue la mejor noche de su vida y esperaba pasar muchas más como esta.

Sin aguantarse mas las ganas lo besó. Harry se despertó ante la dulce sensación que sentía y sin más abrazó a Severus acercándolo a él.

Aprovechando la oportunidad, Severus se sentó a horcajadas sobre Harry para poder besarlo mejo. Harry gimió ante la sensación de su cuerpo contra el de Severus.

-Severus.

Severus decidió ir un poco más allá y continuar donde se quedaron la otra noche.

Con cuidado hizo un camino de besos hasta el cuello de Harry, mientras sus manos abrían su pijama.

Acarició el pecho de Harry, memorizando su tacto. Harry desesperado tiraba de la camiseta de Severus. Al final él mismo se sacó la camiseta y empezó a besar el pecho de Harry.

Harry volvió a gemir al sentir el contacto de sus cuerpos. Severus lo volvía loco. No pudo reprimirse más y empezó a frotar sus caderas con las de Severus aumentando el contacto y la fricción entre sus cuerpos.

-Severus, mi amor.

-Harry, mi Harry.

Los dos no pudieron aguantar mucho mas y acabaron por terminar casi a la vez. Los dos abrazados y satisfechos no podían moverse.

-Mi amor tenemos que levantarnos -dijo Harry.

-Lo se, tienes que desayunar.

-Siempre preocupándote por mi -se rio Harry-. Yo más bien pensaba que teníamos que ir a clase.

-Si, también está eso.

-Quien te viera así, no se creería que eres Severus Snape -dijo acariciándole el cabello.

-Nadie sabe realmente quien soy -dijo en voz queda.

-Eso va a cambiar -le aseguró Harry-. Con todo el tiempo que pienso estar a tu lado, no habrá nada que puedas ocultar de mi.

-Es curioso, pero eso no me molestaría nada.

-Bien, ya que tenemos las cosas claras, debemos levantarnos de esta cama.

A regaña dientes los dos se levantaron y se prepararon para las clases. Los dos estaban muy enamorados, pero aun así no mostraron nada de cara al publico. Su relación era de ellos dos y nadie tenía porque meterse.

Los dos estaban metidos en su propio mundo y no tenían ojos para nadie mas. Por eso no se dieron cuenta que dos pares de ojos los miraban con curiosidad.

La mañana pasó rápidamente y después de la comida se dirigieron a la clase de DCAO.

-Seguro que querrá hablar conmigo después de la clase -dijo Harry todo nervioso refiriéndose a su padrino.

-Es lo más probable.

-Tendrás que sobrevivir sin mi un par de horas.

-Aguantaré hasta tu regreso -dijo indiferente.

-Como puedes ser tan frio conmigo? -preguntó dolido.

-Es algo que te has ganado a pulso. Tu fuiste el que se volvió loco.