Inicio: vuelta a casa

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Tiro el celular en el asiento del copiloto y sacando el auto de donde estaba rumbo a casa.

Chace un año que no venia, me había instalado en la gran ciudad de Argentina para terminar la carrera de veterinaria. Creía que se me iba hacer difícil y demás pero cuando tuve la primera semana del primer año pues podía dar yo las clases, los profesores no entendía como era que yo no anotaba casi nada de lo que decían y como muchos de ellos siendo curiosos se aliaron en mi contra para tomarme un examen sorpresa solamente a mí, con la excusa de que cada cierta cantidad de años se lo hacían a un alumno.

Lo que no podían creer era luego cuando lo revisaron, me preguntaron como es que sabia tanto de tantos temas, les explique que mi familia tenia una veterinaria y que desde los quince yo trabajaba ahí como ayudante y recepcionista. Al siguiente año me había saltado dos años de universidad y los resultados del examen sorpresa era noventa y cinco sobre cien. Casi perfecto.

Tenia veintitrés y ya estaba por mi casi tercer año de residencia y eso que la carrera dura cuatro años solo me faltaba la tesis y listo podría ser algo mas que una simple veterinaria.

Encendí la radio y la canción del momento comenzó a sonar, Esperanza mía. Una canción que provenía de un programa de televisión, era pegadiza y te transmitía energía pero si la escuchabas por mucho tiempo y seguido te cansaba aunque te sorprendías estar cantándola de la nada.

Justo cuando veo el cartel de "BIENVENIDOS A ESPERANZA RICHTER" el coro comenzó.

Si tengo tu amor, tengo esperanza

Y gracias a ti voy a despertar

Confiando en tu luz olvide mis miedos

Te doy mi corazón ayúdame a soñar

Comencé a reírme como loca –que irónico- dice entre carcajadas.

Estaba cerca de casa y el tema del verano ya había terminado hace mucho, dejando sonar otras dos mas, sin duda el que escribió el taxi estaba necesitado en ese momento. estacione el auto en la entrada de casa, saque la mochila y algún que otro chiche del auto y me adentre en la casa.

-MAMA LLEGUE- grito dejando mis cosas cerca de la puerta tomo aire para captar el aroma de casa, pero lo que persigo no es solo el aroma a casa sino otro, uno muy dulce. -¿ma?- digo cuando me acerco a la cocina.

-hija te esperaba mas tarde- parece nerviosa controlando el patio.

-¿no te aviso Héctor?-

-si por eso-

-pues pise el acelerador a fondo y llegue mas rápido- la abrazo –te extrañe- le digo inspirando de nuevo encontrándome con ese aroma mas concentrado.

-yo también-

-que rico aroma- le digo buscando la procedencia –es mi aroma preferido- y vaya que lo era.

-así ¿cual?- me pregunta algo confusa y nerviosa.

-limones y romero- toco mi collar -¿no lo sientes?-

-perdón pero no- contesta-

-deben de ser imaginaciones mías- le resto importancia.

-¿Cómo estuvo el viaje?-

-largo, exhausto y quiero mi cama y el baño- suspiro.

-pues ya conoces el camino- me rio.-cuando estés te subiré un poco de café- abro bien los ojos

-oh néctar de los dioses- me doy vuelta.-gracias mama eres la mejor-

-lo se- se tira el cabello hacia atrás –tus valijas-

-las tiene Héctor, mas tarde la traerá- no se por que pero este aroma me recuerda algo.

-¿sucede algo?- me pregunta mama, mi mano inconscientemente voló hacia mi collar con el que empiezo a jugar.

-si...no ... tal vez-

-cuéntame-

-¿ahora?- levanto una ceja y suelo el collar.

-un leve resumen-

-okey- me apoyo contra la pared para luego cruzarme de brazos. No se si contarle todo o no, mejor le escondo un poco de información –hace dos diasque estoy sintiéndome rara-

-¿como?- se agarra de la mesada.

-no se, me siento perseguida, que me vigilan y me pone los pelos de punta- me abrazo mas, y era verdad los últimos días en una cuadra miraba sobre mi hombro como seis u ocho vez mas de las normal. Y eso que lo normal son tres por cuadra. Si lo se ¿Cómo es que esta chica tiene contados esas cosas? Pues así es, son muy detallistas, para algunas cosas. –no solo eso-

-hay mas- por alguna razón veo una mueca en mama que se asemeja a una sonrisa.

-si es complicado-

-cuéntamelo- ¿Cómo quieres que te lo cuente si ni yo me acuerdo de eso?

-he tenido sueños y en ellos siempre aparece un chico- por alguna razón sonrió y mama palidece -¿estas bien?-

-si... si no te preocupes- agita la mano –ve al cuarto y ponte cómoda. Mas tarde vendrá tu papa quien está ansioso por verte-

-¿eso crees?- pregunto saliendo de la cocina.

-si, ya le dijo a todo el mundo que tiene nueva asistente con titulo- se ríe –algunos ya no lo soportan por tanta felicidad-

-creo que deberé hablar con el mas tarde-

-gracias al cielo que lo harás- mira al techo –ahora ve a tu cuarto y descansa ya te llevare tu café-

-néctar. Es néctar de los dioses- la corrijo alejándome de ella

-si, si lo que sea-

-MAS RESPETO CON EL CAFE- grito mientras subo por las escaleras pero lo que no me imagine es que fuera a rodar por ellas luego.





LUNAWhere stories live. Discover now