la amo / 18 dias

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Capitulo 46 la amo.

YON

La sabana se mueve y sonrío aunque mantengo los ojos cerrados. Un suspiro llega a mis oídos y trato de no reírme, no quiero despertar todavía.

Una presión delicada y bastante caliente aparece en mi cuello haciendo que me remueva en la cama para luego escuchar una risa. Su risa. El calor que mi brazo sentía desapareció para encontrarme con un débil frio.

-vamos Yon- dice ella colocando su mano sobre mi pecho desnudo –tienes que levantarte-

-no quiero- le contesto sin abrir los ojos.

-si serás, vamos Yon abre los ojos- me pide.

-no, no me quiero levantar, vamos Sel no quiero salir de la cama-

-¿y crees que yo si?- dice deslizando su dedo índice por mi pecho yendo hacia el hombro derecho.

-entonces recuesta tu cabeza sobre mi pecho , cierra los ojos y vuelve a dormir- le pido

-aunque me encante esa idea ya es hora de levantarse, hay cosas importantes que hacer- murmura en mi oído.

-¿Qué cosas?- pregunto girándome en su dirección colocando mi mano sobre su cintura, la cual estaba recubierta con tela.

-tienes que verme- abro un ojo a medias, y la percibo borrosa

-te estoy viendo- le contesto con una sonrisa, ella mueve la cabeza en forma de negación.

-Yon, debes levantarte e ir a verme- pasa su mano por mi mejilla a lo que abro los ojos y la observo.-ahí están- comenta con una sonrisa

-SELENE- digo en voz alta. Observo el otro lado de la cama y se encuentra vacio. Fue un sueño. Un jodido y maravilloso sueño.

Busco en la mesa de luz el reloj percatándome de que eran las ocho y media de la mañana, refriego mi rostro con mi mano dándome cuenta de que es tiempo de afeitarme y sin fuerzas abandono la cama.

Dieciocho días. Dieciocho días fueron los que pasaron desde lo de que Igor. Hace dieciocho días Selene volvió a mí, viva. Hace dieciocho días que ella no despierta.

Algunos miembros de luna cristal aparecieron, luego de que todo termino, dándonos asistencia médica, y cosas que necesitábamos tanto como comida para reponernos o agua.

En todo ese momento sostuve contra mi pecho a Selene, observando como el sol se alzaba imponente en lo más alto del cielo, era ya mediodía. Irene se acerco con una médica que ella conocía, Daniela, creo que se llama, para asistir a Selene ya que estaba preocupada de que no despertaba tan rápido como lo hizo Ivy.

Fue en ese momento en el que me percate, aunque fuera de una manera inconsciente, de algo andaba mal. G no soltaba a Ivy por nada del mundo mientras que un medico junto a Diego trataban de llegar a ella.

No sé de donde salió pero allí estaba Freya corriendo hasta Héctor el cual la abrazo haciendo girarla en el aire dándole un largo beso. Beso que deseaba darle a Selene, mi mate, en ese preciso momento, pero no ocurrió.

-buenos días- digo al abrir la puerta del baño, Tiashe me contesta con un ladrido mientras mueve la cola estando sentado al lado de la puerta, desde que volvimos ha dormido a los pies de la cama. Hubo días en lo que lo encontraba durmiendo en la cama, debajo de las sabanas. Pero aunque parezca un lindo cachorrito de lobo tierno e indefenso, la realidad es que no lo es.

Aquel dia, en el que todo paso, la tal Daniela dijo que algo no estaba bien con Selene y trato de llevársela al hospital conocimos la verdadera naturaleza de Tiashe.

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