Querido diario:
Cada vez estoy más convencida de que la primera impresión es la que cuenta, y de que tengo muy buen ojo para las personas.
Aunque no se ha probado nada, me ha comentado Janine que por el pueblo corre el rumor de que el nuevo párroco, Don Luis, no es de fiar, que le gustan demasiado las jovencitas (y cuanto más jovencitas mejor).
No suelo hacer caso de rumores, y menos en un tema tan serio como éste, pero parece ser que ya hay padres que están retirando a sus hijos de catequesis, o prohibiéndoles que vayan a las reuniones en la iglesia; resulta que Don Luis ha montado una especie de "sala recreativa" en el sótano, con una mesa de ping-pong, un futbolín, y una colección de juegos de mesa, que está teniendo bastante éxito entre los chavales del pueblo.
Esperaremos novedades, ya te iré contando.
Un beso.
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Llamada desconocida
HorrorDesde que aquella maldita cabina fue instalada en las afueras de Miravalle de la Colina, algo cambió en el pueblo. Solo Mabel, la bibliotecaria, parece ser inmune a su influjo; la cabina es mucho más de lo que parece, porque los cables que la debía...
