*¿Se cansó de mí?, ¿Estarán en citas dobles?*


La mente de Yixing no dejaba de formular preguntas, posibilidades, pero nada de lo que pensara apaciguarían sus preguntas.


– Sé que estas despierto – una suave voz interrumpió con el silencio y con las preguntas de Yixing, unos pasos se aproximaron a Yixing, luego sintió como la cama se hundía – Yixing, tenemos que hablar – soltó, Yixing apretó al peluche con más fuerza, conocía esas palabras, aquella misma frase que había utilizado miles de veces, y eso le angustiaba, porque eso significaba una sola cosa.


*Me va a dejar*


Yixing se incorporó velozmente, soltó al peluche, pero se arrepintió de inmediato al ver el rostro de Junmyeon serio.


– Tengo novio... Es HongBi – balbuceo lo primero que se le vino a la mente, Junmyeon se congeló por la noticia.


El silencio los rodeó a ambos, Yixing se mordió incomodo el labio, *¿Qué dije?*


– Me parece bien – susurró Junmyeon luego de varios segundos, Yixing apartó su mirada y la llevó a sus manos.


– ¿Q-qué querías decirme? – Preguntó carraspeando la garganta


– Solo... quería saber si quieres comer algo – Yixing negó – Bueno, debo irme, volveré luego así te llevo al instituto – Junmyeon se levantó de la cama, Yixing tenía un enorme impulso de detener a Junmyeon – Buenas noches – se despidió y luego salió, Yixing se quedó observando la puerta en silencio, y las lágrimas se acumulaban en su vista.


Los murmurios en la sala fue lo único que Yixing sintió luego de Junmyeon dejara la habitación, luego el ruido de la puerta principal cerrarse confirmo el miedo de Yixing.


*Tiene otra*


****



Si dijeran que se sentían bien, sería una estúpida respuesta, no se encontraban bien, en lo absoluto, ninguno tenía ánimos de nada, los donceles observaban sin ganas a las donas de chocolate que tenían en frente de sus rostro.


– Son las 7:45 a.m. – susurró Luhan con agobio.


– Ya es tarde, mejor vámonos – ordenó Minseok irritado, los donceles cogieron sus mochilas y salieron del departamento sin haber desayunado.


Saludaron al portero y se prendieron camino hacía fuera del edificio, estaban cansados, angustiados, fatigados, y los Seme no ayudaban en nada, los Wonders Boys no estaban ni de humor como para quejarse.


– ¡Hey! – un grito frenó a los donceles, no muy lejos venía corriendo N. – Chicos... – susurró agitado, se detuvo a unos pasos de Kyung y Tao. – Estuve llamándolos desde hace r-rato – dijo con dificultad.

Babysitters: Counterattack - EXOWhere stories live. Discover now