24 (parte dos)

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-Señorita.- Escuché que me hablaban.

-Mmm.

-Señorita.-Desperté un poco.- Ya vamos a aterrizar.

-Oh, gracias.- La azafata se alejó.-Camila.-Le hablé para despertarla.-Camz, amor.-La moví un poco.- ¡Karla!

-¿Qué? ¿Qué pasa?- Se despertó de repente.

-Ya casi aterrizamos.

-Okay.- Me besó.

-¿Y eso por qué?- Pregunté encantada.

-Tu beso de buenos días.- Sonrió traviesa.

Eran la 7 am cuando bajamos del avión y yo me sentía bien; creo que Camila prácticamente había aceptado mi propuesta (aunque no lo dijera directamente) ella estaba feliz y emocionada y me gustaba estar con ella cuando estaba así. Digo, también me encantaba estar con ella en malos momentos, esos nos unían más para disfrutar los buenos momentos.

-Tengo hambreeee.-Se quejó Camila.

-Ya te habías tardado en decir eso.-Estábamos fuera del aeropuerto esperando por un taxi.

-¿Podemos ir por algo de desayunar?

-Lo siento, Camz, ya tenemos que ir a la escuela, pero tal vez nos den comida ahí.- Acaricie su mano.

-Aaah, está bien.

-Mira, viene un taxi.- Tomamos nuestras cosas y le hice una señal.

El camino a la escuela era más largo de lo que había pensado. Fue algo más de media hora así que el taxi costó un poco más.

Cuando llegamos, nos dimos cuenta que ya había un pequeño grupo de personas, también postulantes para el colegio. Nos unimos a ellos, esperando a la persona del tour o lo que fuera.

Esperaba que alguno de ellos nos hablarán, pero parecían muy entrados en su plática. Tal vez si hubieramos llegado antes seríamos parte de su exclusivo grupo de plática. Pero no me importaba ser parte de eso, la verdad.

Noté a Camila muy callada de repente; estaba aferrada a mi brazo y mirando el suelo.

-Camz ¿qué pasa?- Le pregunté.

-Nada, sólo estoy pensando...

-¿En qué? Puedes decirme.

-¿Qué tal si no logró hacer amigos?- Me miró.- Recuerda cuando entré a la escuela.

-Nos hicimos amigas el primer día.-Le recordé, sonriendole al recuerdo.

-¿Pero y si eso no pasa aquí? No todos van a ser tan lindos como tú.

-Pero habrá alguien, Camila, tranquila.-Le dije.- Te aseguro que el primer día ya tendrás una amiga.

Antes de que Camila dijera algo más, una mujer de no más de 25 años se presentó con nosotros.

-Muy buenos días, muchachos...- Dejé de escuchar todo después de eso y en mi cerebro comenzó a reproducirse la película de 'Pitch Perfect'.

No solté la mano de Camila en todo el camino y podía notar que ella estaba emocionada por algo cuando me apretaba más la mano.

La verdad es que la escuela era muy increíble. Sus instalaciones eran muy bellas. Y tenía un buen programa educativo; esto era una increíble oportunidad para Camila. Me sentía feliz por ella ya que ella estaba feliz y emocionada por eso (y me gustaba ver que no lo ocultara) pero me sentía triste por mi. Digo, ella estaría aquí y yo estaría allá. Creo que, aunque esto suene egoísta, si tuviera un deseo, pediría que Camila se quedara a mi lado. Pero algunas cosas simplemente no se pueden y mejor sólo me alegraría por Camila.

Después de mostrarnos todo, responder las preguntas tontas (que claro no podían faltar) la mujer nos condujo a un buffet preparado especialmente para las personas que vendrían al tour. Después de eso, ya éramos libres de irnos.

-Te dije que nos darían comida.- Le susurre. Ya eran más de las 11 am y Camila y yo teníamos nuestros estómagos vacíos.

-Toma un plato.- Me susurró también.- Yo otro, tomamos cuanta comida nos quepa en ellos y luego nos vemos las bancas de afuera. ¡Ya!- Y salió disparada a la comida. Reí y fui directamente a donde los postres estaban.

-Entonces, te gusta la escuela.- Dije, en un simple intento para hacer conversación. Estábamos sentadas en el pasto frente a la cafetería con un montón de comida y estudiantes (o grupos de ellos) pasando dirigiéndose a sus clases o a donde sea que fueran y, no sé por qué, me pareció curioso ese sentimiento de, que de alguna manera, sus vidas estuvieran conectadas; unos con otros, todos entrelazados y no pude evitar pensar en Camila y que en unos meses, ella será parte de esto.

-Es muy genial.- Sonrió entusiasmada.- Y estoy muy emocionada, siendo honesta.

-Me alegra oír eso, bebé.- Le devolví la sonrisa.- Sabes algo, estoy orgullosa de ti.

-¿De mi?- Alejó la hamburguesa de su rostro.- ¿Por qué?

-Mira dónde estás.- Le dije.- Mira dónde estarás cumpliendo tus sueños de estudiar literatura en unos meses.

-Pero no sé si será "sueño cumplido" si no estás conmigo.- Tomo mi mano.

-¿De qué hablas, tonta? Yo no te dejaré, estaré en casa esperándote. El tiempo necesario para cumplir mi promesa de terminar ese nudo.- La abracé por los hombros.

-Sabes a lo que me refiero, Lo.

-La unión sentimental es más importante que la física. Y más fuerte.

-¡No me importa! Yo quiero besarte todos los días.- Se separó de mi.

-Camz...

-Todo el viaje has actuado como si estuvieras bien con esto.- Oh no, esto es malo.

-Estoy actuando así porque tú también lo haces.- Respondí.- No quiero estar triste por ahí, mientras tú estás feliz de la vida. Eso sólo te hará sentir culpable, Camila, lo sé.

-¿Feliz de la vida? Lauren, estoy aterrada por nuestra relación, pero tú simplemente pareces tan relajada con esto y yo no quiero parecer que me estoy derrumbando.

Siendo honesta, yo también estaba aterrada por todo. No sabía si mi "plan" iba funcionar. Es más: no sabía a dónde nos dirigíamos. Camila aun no le daba el sí a mi propuesta, así que se podría entender que no estamos en ningún lado. Y dada que esa es la situación, también se entiende por qué estamos ambas actuábamos como si estuviéramos bien. No podíamos hacer otra cosa, sin afectar a la otra.

-Lauren.- La voz de Camila me sacó de mis cavilaciones.- ¿Qué vamos hacer?

Suspiré pesadamente, pensando rápidamente en algo.

-Okay, tal vez esta sea una de las peores ideas del mundo, pero...no haremos nada.

-¿Qué?- La confusión apareció en su cara.

-No vamos a tomar ninguna decisión, vamos a dejar que la decisión nos tome. Así se lo dejaremos todo al destino y lo que sea que pase, será por que así lo quiso este y será lo correcto.- La volví a abrazar.

-¿Crees que sea lo correcto?- Me susurró.

-Eso espero.

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Bueno, bueno, sé que tal vez se sienten estafados porque les dije que este capítulo lo subiría cuando el anterior tuviera diez votos y en lugar de eso, lo están leyendo tres semanas después de mi falsa promesa.
Lo siento, lo siento. No tengo una buena excusa o razón por la cual no cumplí (quisiera, pero no la tengo) pero perdón. Para demostrarles mi perdón, en cuanto estén leyendo esto, ya habrá otro capítulo esperándolos:)
Otra cosa, la propuesta de las que le comente (si es que son lo suficiente educados como para leer estas notas hmm) es que, pienso hacer una precuela de este fic (o sea, lo que pasó antes, cuando Camila y Lauren se conocieron y se hicieron amigas y todo eso) porque siento que algo le falta a este, que está incompleto y que se necesita saber esa parte, no sé, realmente quiero hacerlo. Pero de verdad necesito su opinión así que
¿Qué les parece la idea? Comenten. Xx

No, we're not friends [Camren]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora