67 - 'Promesa'

4 2 0
                                    


— Y dime Ty — dijo Yelena mirándome atentamente — Robert no para de presumirme que quieres ser doctor.


— Así es — asentí dando otro sorbo a mi copa de vino — Aunque justo ahora estoy dudando si continuar la carrera o no.


— La va a continuar — dijo Robert mientras me miraba seriamente, yo le miré algo frustrado al oírle — No me mires así, quedamos en que ibas a pensarlo, pero vas a continuarla, Taylor.


— Cálmate Boby, suenas como su padre — dijo Yelena coquetamente mientras daba un sorbo a su bebida — Lo entiendo, es decir, medicina es una carrera muy difícil, yo no la toleré, sentía que debía dejarla, no encajaba ahí.


— ¿Me estás ayudando o empeorando esto? — dijo Robert con seriedad, Yelena empezó a reír coquetamente.


— ¿Pretendes que mienta? — afirmó ella — Date cuenta Boby de que a diferencia mía, Ty sí parece apasionado por su carrera, o bueno, digo esto basándome solo en lo que tú me dijiste.


— La verdad sí me apasiona, pero me preocupa no ser bueno para esto — afirmé dando otro sorbo a mi bebida, empezaba a sentirme mareado por el alcohol también.


— Es entendible, pero también debes atreverte querido, es decir, ¿cómo sabrás si eres o no bueno en algo si no lo intentas?


— Lo sé, pero... igual quiero tomarme unos días, descansar un poco antes de empezar toda esa locura de nuevo.


— ¿Descansar? ¿con Robert? — dijo ella de forma incrédula entre sutiles risas — ¿Sabías que él me manda un corazón rojo cada vez que ustedes dos tienen sexo, Ty?


— ¡¿Qué?! — reclamé volteando a ver a mi novio con seriedad, él miró a otro lado sonriendo de forma cínica.


— Ese era un secreto, Yel — dijo Robert dando un sorbo a su whisky.


— Tiene que ser un chiste — dije mirándole sin saber de qué forma responder.


— Tú también le dices a Mónica cuando tenemos sexo.


— ¡No cada vez, Robert, por Dios santo!


— Relájate, Ty, agradece que al menos no te tomo fotos al hacerlo — mi sangre se heló al escucharle decir eso, rápidamente Robert se excusó — ¡No lo hago! ¡¿okey?!


— Dios, qué vergüenza.


— Cálmate cariño — dijo él mientras tomaba mi mejilla y acercaba su trago de whisky a mi boca, yo traté de zafarme, pero simplemente accedí, degustando del licor que entraba en mi boca, mucho más fuerte que el vino que bebía.


— Agh — tosí apartando la mano de Robert de mi rostro — Eso está muy fuerte.


Amor Y PrejuicioDonde viven las historias. Descúbrelo ahora