VEINTISÉIS
Brook
El gran día había llegado, y no pude dormir en toda la noche, tenía un nudo en mi estómago desde hace días, toda la semana estuve practicando el doble de las horas acordadas, me alimenté sanamente y llegaba a pasar entrenando hasta 8 horas diarias.
Me levanté muy temprano, antes de que el primer rayo de sol apareciera por la ventana. Una larga ducha caliente me ayudó a aclarar las ideas y me vestí, la cafetería estaba vacía pero solo pude comer una manzana.
Me senté frente al lago a respirar hondo antes de entrenar, el concurso comenzaría más tarde y ya me habían asignado mi kayac, tenía que familiarizarme con el. No sé cuánto tiempo estuve dentro del lago, pero fue lo suficientemente largo como para notar cómo comenzaban los preparativos del evento.
Cuando iba saliendo pude notar como André llegaba, listo para entrenar, con un traje similar al mío, se pegaba por completo en su tonificado cuerpo. Cerré los ojos un segundo y cuando los abrí Jonah estaba frente a mi.
—Hola...—murmuro despacio.
Respire hondo y sonreí—Hola.
—¿Nerviosa?
—Ni te imaginas.
Se puso a mi lado y comenzamos a caminar. A nuestro alrededor comenzaron a montar mesas y sombrillas grandes, muchas sillas y snacks.
—Debes saber que es una de las competencias más grandes de este lugar.
Observe a mi alrededor—Si, lo noté.
—Jamás han dejado concursar a mujeres...
—Eso acaba de cambiar.
—Si, creo que el fundador era machista, así que era una regla absurda, me complace ver que mi amiga es de las primeras en animarse a hacerlo.
Amiga...
—Pues gracias, tu amiga le va a patear el trasero a esos tontos.
Sonrió—Muero por verlo.
Caminanos hasta detrás de una carpa. Juré que ahí sería mi primer beso con Jonah, había pensado en eso más de lo que me gustaría admitir, realmente podría enamorarme de él.
Pero solo se inclinó y besó suavemente mi mejilla antes de marcharse.
Por un segundo mis piernas se volvieron gelatina, tuve que tomar mucho aire antes de que me desmayara.—Te vas a hacer pipí—murmuraron.
No necesitaba voltear para saber de quién se trataba.
—Perdedor—voltee para encararlo.
Y ahí estaba, con esa sonrisa ridícula, esa sonrisa que le borraría en unas horas.
—¿Acaso nunca un chico te había besado?
Incline mi cabeza—Jamás uno tan sexy como Jonah...
No quito la sonrisa, al contrario, volvió a sonreír descaradamente mientras me acorralaba entre la carpa y su cuerpo peligrosamente cerca de mis manos.
—Mientes...—susurro tan cerca.
Sus manos se colocaron a cada lado de mi cabeza. Se inclinó tanto que casi rozó sus labios con los míos, pero eso solo fue un trazo del camino que seguía hacia mi cuello, se prendió de el causando estragos en todo mi cuerpo. Temblé bajo su tacto.
Su lengua trazó una húmeda línea hacia el lóbulo de mi oreja, el cual chupo, casi se escapa un fuerte gemido de mis labios pero lo evité. Mientras su boca besaba descontrolada mente mi cuello, pude enfocar a una persona a lo lejos y sabía perfectamente de quién se trataba.
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Las reglas del amor (borrador)
Teen FictionUn internado en suiza no sonaba nada bien, pero era la petición de su madre fallecida. Brook tiene que olvidarse de su vida en Londres y comenzar una nueva, ella solo iba a estudiar, más no estaba en sus planes hacer en enemigos en su nueva escuela...