Ocho

6.9K 379 9
                                    

OCHO

Brook

Sorprendentemente las clases se fueron rápido. Cuando recordé ya era hora del almuerzo, Sam y yo bajamos a la cafetería. Había tanta comida, jamás había visto tanto, todo tipo de cereales, de frutas y bebidas.

—Es como un sueño...—murmuré al ver todo.

Sam sonrió—Un buen desayuno.

Esa mañana probé de todo, y al final la barriga me terminó doliendo mucho.

La última clase fue artes, no podía creer lo increíble que era el aula, cada quien tenía su espacio de expresión y el profesor Jones era un gran artista.

—Creo que esta será mi materia favorita...—murmure al salir.

—La mía igual—apoyo Sam.

Su teléfono vibra y de inmediato responde, comienza a hablar unos minutos y cuelga.

—Debo ir a mi habitación pero te veo esta noche.

—¿Qué habrá esta noche?

Sonrió—La novatada, es obligatorio asistir, más si eres nueva, ponte un vestido bonito y un bikini debajo.

—¿Bikini? ¿De qué hablas?

—Solo hazme caso.

Beso mi mejilla—Debo irme.

Desapareció de mi campo de visión.

Carajo...

Novatada.

Eso ya ni siquiera se usa.

Que pérdida de tiempo.

Al llegar a mi habitación, no estaba Lina, no me sorprendió, aún se escabullía con aquel idiota. Me senté en el escritorio y comencé a configurar mi nueva tableta.
Horas después pude hacer videollamada con papá.

Comía unos guisantes secos y desabridos pero se le veía feliz.

—¿Qué tal el primer día Brookie?

Rodee los ojos al escuchar ese apodo.

—Ya no tengo cinco años—le recordé.

—Para mi siempre serás mi niña.

Sonreí—Mi primer día ha marchado muy bien por cierto.

—¡Me alegra! ¿Has conseguido amigos?

—Solo una, se llama Sam y bueno mi compañera de habitación también es agradable.

—Me alegro hija, me emociona que te estés adaptando.

—Después de todo creo que no fue tan mala decisión.

—Tu mamá jamás se equivocaría, sus mejores años fueron ahí.

—Espero que los míos también...

—Vas a ver que si.

—Debo colgar papá, tengo que alistarme para una novatada.

—¡Tu primera novatada!, me llenas de orgullo.

—Papá...

—Bien, bien, te dejo linda, estamos en contacto.

—Te quiero—colgué.

Mientras me alistaba no dudé ni un segundo en llamarle a Ava. Habíamos estado mandándonos mensajes y algunas fotos del internado pero necesitaba escuchar su voz.

—¡Maldita sea! ¡Te extraño carajo!—murmuro al otro lado de la línea.

—¡Y yo sonsa! ¿Cómo sobrevives sin mi?

Las reglas del amor (borrador)Where stories live. Discover now