CAPITULO 67

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Alex

Esto es un tortura.
40 días hace que nació Mini Canija y juro que han sido agotadores.
Las primeras dos semanas me hizo gracia tener que tenerla siempre encima, pero ahora ya se me hace pesado. Solo se calla conmigo. Si no la cojo, no se duerme. Con Alai llora, solo se calla si le mete la teta en la boca o le da de comer. Al final a acabado sacándose la leche con el sacaleches para que Jade no le destrozara los pezones. Literalmente, le sangraban. Por las noches si le da la teta para no tener que levantarse a calentar el biberón. Ese es el único momento en el que yo me relajo.
Encima odia el chupete. No hay manera de ponérselo, lo que hace mas difícil calmarla. Tiene un genio… uf! Cuando llora se te mete hasta los huesos y retumba toda la casa.
Encima tenemos el problema de los celos de Noah. Tenemos no, tengo. Dice que ya no le hago caso. Puede que tenga razón,  pero cuando logro que Jade se quede en su cuna caigo rendido. Me duermo por las esquinas. Tengo hasta ojeras. Mira que Alai me aviso… que no la mal acostumbrara  pero creo que esta niña ya nació así. Alai intenta quitármela de encima todo lo que puede pero Jade nos lo pone difícil. Nana se ha ofrecido a quedarse con ella  una noche pero me he negado. Se que Jade la va a liar parda como se la lleve, aunque no nos iría mal.
Alai tiene una pequeña depresión post parto. Dos semanas después la comadrona nos lo dijo. Llora por cualquier cosa, o se enfada, y odia su cuerpo, y da igual lo que le diga, no le gusta. Si, vale, le ha quedado una pequeña barriguita que poco a poco va desapareciendo, pero para haber parido hace 40 días, tiene un cuerpazo impresionante. Mi dolor de huevos lo confirma. Aunque se ofreció a relajarme, me negué, me parecía injusto. Incluso me dijo que lo hiciera yo solo, pero no.
Dejo de sangrar hará mas o menos una semana. Nunca había visto tanta sangre. No se como las mujeres aguantan eso. Entre eso y el dolor de pechos yo ya me hubiera tirado por la ventana. Si ya los tenia hinchados, ahora es mas exagerado. Enormes se queda corto, cuando la leche le subió aumentaron por lo menos dos tallas.
Cuando consigo que Jade se quede tranquilita en la cuna me dejo caer en la cama. Suelto un suspiro y me tapo la cara con un brazo. Cierro los ojos y respiro profundamente. Esto es gloria. Silencio, por fin.
Alai esta acostando a Noah y luego va a ducharse, o eso me ha dicho, creo. Poco a poco mi respiración se vuelve mas lenta y me quedo dormido. Noto como el colchón se hunde a mi lado y un beso en los labios que no soy capaz ni de devolverle. No puedo ni moverme.

Unos rayos de sol me despiertan a la mañana siguiente. Noto una mano acariciándome la espalda. Mi cabeza esta apoyada en el pecho de Alai, oigo su corazón en mi oído. No se ni como he acabado así. Es la primera noche que logro dormir del tirón. Me abrazo a su cintura y me acurruco contra su cuerpo.
-Buenos días- susurra- hoy no te has enterado de nada…
-Buenos días- dejo un beso en su pecho y acomodo mejor mi cabeza- no se ha despertado en toda la noche?
-Si, varias veces. Pero estabas tan cansado que ni te has enterado.
Suspiro y noto como cuela la mano bajo mi camiseta. Resigue mi columna con la yema de sus dedos y mi piel reacciona al segundo ante su caricia  y ni hablar de mi miembro. Hace tanto que no nos tocamos para no empeorar la situación que creo que no duraría ni dos segundos.
-Alex…- ese tono…
Trago saliva y levanto la cabeza para mirarla. Joder, conozco esa mirada… la he soñado tanto en estos últimos días que creo que podría correrme solo con mirarla.
-Canija estas…
-Por favor- me corta- ni se te ocurra empezar a dudar.
Me incorporo y me tumbo de lado con mi cabeza pegada a la suya. No me da tiempo ni a respirar cuando junta sus labios a los míos con un hambre voraz, con pura necesidad. La misma que tengo yo. Me pego a su cuerpo y tiro de su cintura para pegarla a mi. Meto una mano bajo su camiseta y noto como su respiración se corta al notar mis dedos en el borde de su pecho. Me empuja hasta que quedo bocarriba y se pone encima de mi frotándose contra mi mientras besa mi cuello. Cuando oigo como jadea ante el roce sujeto su cadera para frenarla.
-Voy a terminar antes de empezar-jadeo- tómatelo con calma Canija.
-Tengo de todo, menos calma-muerde mi oreja y un gemido escapa entre mis dientes-tenemos poco rato, ha comido hace una hora, así que nada de calma.
Mierda, la niña. Me tenso de golpe. Esta parte es la que menos me gusta. Con Jade aquí, se me corta todo el rollo. Alai lo nota y se separa de mi cuello para mirarme a los ojos.
-No empieces- me advierte- o te juro que no vuelvo a tocarte.
Joder, que agresividad, y como me pone. Muevo su cintura para frotarla contra mi y tiro de su labio inferior
-Prométeme que no haremos ruido. Por lo menos que no nos oiga…
-No se entera de nada-afirma.
Tira de su camiseta hacia arriba y deja al descubierto el sujetador de deporte que se pone para estar en casa. Apenas los contienen, sobresalen por encima. Ataco sus labios de nuevo y la tumbo de nuevo boca arriba. Bajo mi mano hasta el borde de su pantalón y meto la mano por debajo de su ropa inferior hasta llegar a su entrepierna.
-Dios…- muevo mis dedos entre sus labios y un gemido muere en mi boca al escapar de la suya- estas chorreando...
Buf! Podría acabar con solo tocarla, viendo como su espalda se arquea cuando rozo su clítoris y los jadeos escapan de sus labios.
-No te entretengas- dice con voz ahogada.
Tira de su ropa hacia abajo con una mano mientras con la otra tira de la mía. Saco mi mano de entre sus piernas y la ayudo ha deshacerse de nuestra ropa. Le quito el sujetador de deporte y paso mi lengua sobre sus pezones. Demasiado tiempo sin esto.
Me coloco entre sus piernas y la beso casi comiéndonos mutuamente mientras restriego la punta sobre su humedad. Bajo por su cuello y acuno uno de sus pechos con mi mano.
-Ya no me caben…-me meto un pezón en la boca.
-Yo no…- no la dejo terminar.
Succiono con mis labios y un liquido entre soso, insípido y dulce, levemente templado inunda mis papilas gustativas. No había pensado en esto… suelto el pezón y  miro hacia arriba.
-Estaba intentando avisarte. Si chupas, sale leche- suelta una risita- esta muy mala o que?
Sonrío de medio lado y me meto en otro pezón en la boca. Sin dejar de mirarla succiono otra vez y noto como enseguida sale leche. La verdad es que no esta tan mala.
-No te comas la comida de tu hija- tira de mi barbilla hacia arriba hasta dejarme a la altura de su cara- te traigo magdalenas o que?
Suelto una risa y atrapo sus labios con los míos, su lengua con la mía.  Pongo mi mano en su nuca y suelto sus labios. Conecto sus ojos con los míos y muevo la cadera hasta encontrar su entrada. Presiono y poco a poco la punta entra. Los dos soltamos un suspiro mientras la penetro del todo y sus uñas se clavan en mi espalda. Esta igual que siempre. Tuve mis miedos de que no fuera igual, que con el parto la cosa cambiara, pero no, sigue abrazándome como siempre. Y sin pararnos a pensar, empezamos un baile de caderas que dura mas bien poco por parte de los dos cuando pocos minutos después, bañados en sudor siento los dedos de sus pies clavarse en mi culo y un gemido alto muere atrapado en mi boca y mezclado con el mío en un orgasmo brutal que me arranca hasta la última célula del cuerpo. Nos quedamos así con la respiración acelerada y los latidos retumbando en los oídos hasta que oímos un fuerte llanto que retumba toda la habitación.
-Mierda- digo con la respiración aun acelerada.
Salgo de ella y me apresuro a limpiarme con una toallita para poder ponerme los pantalones. Oigo a Alai resoplar mientras me levanto de un salto y cojo a Jade de la cuna.
-por llorar un poco no va ha pasarle nada- refunfuña
Me siento en la cama y acuno a Jade para que deje de llorar. Miro a Alai y veo que tiene el ceño fruncido. Se levanta de la cama sin decir nada mas y se va al cuarto de baño. Un portazo me hace dar un salto en la cama y Jade llora todavía mas fuerte. Suspiro y me pongo a cambiarle al pañal mientras jugueteo con ella para que se calle. Voy a la cocina y le preparo un biberón con la leche que Alai se saco ayer. Vuelvo a la habitación y se lo doy. Alai aun no ha vuelto. Se que se ha enfadado  aunque no se por que exactamente. Tumbo a Jade en la cama y me pongo a su lado, coge mi dedo y le doy un beso en esos mofletes que cada vez tiene mas grandes.
-He enfadado a mama- le digo- no puedes ponerte a llorar así, nos has interrumpiendo.
Sigo jugueteando con ella esperando a que Alai vuelva. Lleva por lo menos media hora en el baño cuando oigo la puerta abrirse. Entra como un vendaval en la habitación envuelta con una toalla, coge ropa del armario sin ni siquiera mirarme y se vuelve hacia la puerta.
-Canija, espera. Ven aquí- pero me ignora.
Sale de la habitación y vuelve a encerrase en el baño. Suspiro y me siento en la cama con la espalda apoyada en el cabecero. Intento dormir a Jade para poder ir a ver que esta pasando pero no hay manera.
-Vamos mini canija. Ayúdame y duérmete para que pueda ver que pasa con mama…
Oigo la puerta del baño y veo pasar a Alai por delante de la puerta hacia el salón. No va ha venir.  Suspiro y me levanto con la niña en brazos. Salgo de la habitación y voy al salón, dejo a Jade en la mini cuna y rezo para que se quede tranquilita. Me giro y veo que Alai esta de espaldas a mi preparándose algo en la cocina. Voy hacia ella y la abrazo por la espalda apoyando mi barbilla en su hombro. Esta tensa como una cuerda de guitarra y se que si sigue al final petara.
-Canija, que pasa?- intento sonar lo mas dulce posible.
-Nada- dice cortante y sigue preparándose el desayuno.
-Que te ha molestado? Tienes que decírmelo.
Suspira con brusquedad y se suelta de mis brazos de un solo movimiento. Coge una taza, se sirve un zumo y se gira hacia la barra. La retengo por el codo y la giro hacia mi.
Ha estado llorando. Tiene  los ojos rojos e hinchados.
-Vamos Canija, habla- le suplico- si no, no puedo entenderte.
-Tienes que parar- dice muy seria- no pasa nada si llora. No puedes dejarlo todo deprisa y corriendo cuando la niña suelta el primer llanto- frunce el ceño-  no te das cuenta pero cuando estas con ella todo a tu alrededor desaparece. Por eso Noah esta tan celoso.
Y por lo que veo, no es el único. Ella también lo esta. Esto es normal? Sentir celos de tu propia hija digo. Si, vale, admito que me paso un poquito y que mi atención se centra en Jade mas de lo debido pero es que es un bebe.
-Esta muy bien que la cuides tanto, pero las vas malcriar, y luego será peor. Que harás cuando se haga mayor?  Correr detrás de ella cuando empiece a gatear? O cuando ande? No puedes seguir así Alex. No duermes, si Jade esta despierta vives pendiente de ella, hasta el punto de no comer siquiera por no dejarla. No pasas tiempo con Noah. Anoche se puso a llorar por que ya nunca lo acuestas. Vale que no es tu hijo pero antes lo hacías y…
-Para- la corto- que Noah no sea mi hijo no significa nada. Sabes que lo quiero como si lo fuera.
-Pues él cree que ya no lo quieres por que esta Jade.
Frunzo el ceño y la miro. No me esta mintiendo. Realmente Noah piensa eso. Tanto los he dejado de lado? No lo he hecho queriendo. Claro que quiero a Noah. No me importa la genética,  es tan hijo mío como Jade de hecho había pensado…
-Lo siento- agacho la cabeza- no lo hago queriendo. De verdad que no.  No se, como solo se calla conmigo…
-Por que la tienes mal acostumbrada. Si dejaras que yo lo intentara al final se calmaría- se cruza de brazos-  yo o cualquiera. Nos vendría bien que Nana se quedara con ella y tener un tiempo para nosotros.  Pasar una tarde solo con Noah. Salir tu y yo solos a cenar. Alex- descruza los brazos y agarra mis mejillas- te has levantado como si se estuviera atragantando y ni siquiera me has dado un beso. Es que no te has dado cuenta?
Sus ojos brillas mientras las lagrimas se amontonan en sus ojos y una cae lentamente por su mejilla. Joder, no, no me había dado cuenta. Siempre le doy un beso, nunca me quito sin hacerlo y esta vez ni me he acordado.
Niego con la cabeza y junto mi frente a la suya.
-No, no me había dado cuenta. Lo siento- le doy un beso suave y la agarro por la cintura- intentare no ser así. Pero si algún día ves algo que no te gusta dímelo, no te vayas al baño y te encierres. Y juro que le prestare mas atención a Noah. A partir de ahora yo lo acuesto vale? Y lo llevare al cole solo para pasar el rato con él. Podemos ir al parque o a la pista y juego con él a fútbol.
Jade empieza a llorar y mi primer impulso es salir corriendo, pero cojo aire, le doy un beso a Alai en los labios y la abrazo con fuerza mientras Jade berrea como una loca. Juro que me entran ganas hasta de vomitar cuando se pone así.
-Ves tu- le digo en el oído- yo voy a despertar a Noah.
Asiente y la suelto. Veo como camina con toda la calma y se acerca ala minicuna. Coge a Jade con suavidad y la saca de allí pegándola a su pecho. La mece con ternura y besa su cabecita. Veo como mueve sus labios pero no oigo lo que le dice. No se calma, sigue llorando, y mas ganas de vomitar sacuden mi estómago. Aprieto los diente y me voy a la habitación de Noah antes de que me de por quitarle a Jade de las manos para calmarla yo.
Abro la puerta y veo a Noah tumbado del revés en la cama. De verdad se ha sentido tan mal?
Me siento a su lado y lo muevo.
-Pequeño dinosaurio, despierta.-aprieta los ojos con fuerza- venga colega, arriba- se remueve pero no abre los ojos- tu lo has querido.
Empiezo ha hacerle cosquillas y empieza a reírse a carcajadas y a revolverse en la cama. Lo cojo y me lo siento encima sin dejar de hacerle cosquillas. Cuando veo que ya no puede respirar dejo de hacerle cosquillas y lo abrazo con fuerza contra mi. Sus bracitos me rodean el cuello y me aprietan con fuerza.
-Has venido a despertarme- dice ilusionado.
Se me rompe en el corazón al darme cuenta de que si, lo he dejado de lado sin darme cuenta.
-Claro- lo separo de mi para mirar el azul de sus ojos. Están llorosos- lo siento mucho Noah. No me había dado cuenta de que no te prestaba atención. Pero quiero que sepas que sigues siendo mi pequeño dinosaurio- me señalo el pecho donde esta el tatuaje que tanto le gusta- y te quiero. Eso no lo dudes. Mama me ha dicho que estabas un poco triste. Quieres hablar conmigo?
-Si- pone un puchero- ya no juegas conmigo. No vemos pelis. Y quieres mas a Jade que a mi por que yo no soy tu hijo. Mi papa es otro...- una lágrima escapa de sus ojos y la atrapo con un beso.
-Te quiero igual que a Jade- le aseguro- y yo soy tu papi, eso no va ha cambiar aunque este Jade vale? Solo es que Jade es un bebe y tu ya eres súper mayor. Pero prometo que a partir de ahora pasare mas tiempo contigo y saldremos los dos a jugar vale? Esta noche veremos una peli juntitos te parece?
-Si- susurra
-Y un día de estos dejaremos a Jade con Nana y saldremos los tres sin ella. Podemos ir al cine o a donde tu quieras.
Asiente formando una sonrisa en sus labios. Así me gusta verlo. De verdad que no me había dado cuenta de que se sentía así. Noah para mi es como un hijo, daría mi vida por él igual que por Jade. No me importa quien sea su padre biológico. De hecho he hablado con mi padre para poder adoptarlo como mío, aunque Alai no lo sabe. Aun no puedo. Tenemos que conseguir que el juez de la orden de que Dylan no pueda reclamar sus derechos como padre. Esta siendo complicado, mucho, su abogado esta luchando por reclamar los derechos y que Alai pague por ocultarle al niño durante mas de 5 años. Quiere incluso quitarle la custodia. Ella no sabe nada, papa no quiso preocuparla, pero la cosa esta siendo difícil. Por suerte el muy capullo cometió errores demasiado gordos como para que un juez lo tome en serio. De momento esta detenido hasta que salga el juicio. Tiene cargos por secuestro, intento de secuestro de un menor, agresión, acoso y mi padre esta intentando que por violación, pero esa esta mas difícil al no haber pruebas en su contra. Si alguien testificara contra él, todo estaría ganado y le caerían por lo menos 30 años de cárcel. 
Cuando salga el juicio y el juez falle a favor de Alai, le propondré el poder adoptar a Noah y que pueda llevar mi apellido al igual que Jade y que legalmente sean hermanos de padre y madre, como tiene que ser.
Y bueno, algo mas importante aún: es hora de empezar a plantearse como pedirle a la Canija que se case conmigo de un vez.

HASTA QUE LLEGASTE TÚWhere stories live. Discover now