CAPITULO 36

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Alai

Ruth a llegado a casa a la hora de comer, después de cerrar la peluquería. Ha traído comida de una tienda de Valle. Estaba bastante bien.  Después de jugar con Noah un rato lo hemos mandado a su cuarto y nos hemos sentado en el sofá.
-A ver, tenemos que planear lo del cumpleaños de Alex. Has pensado algo?
-Primero, tiene que ser low cost. Tengo poco presupuesto.
-Bueno, pues aquí en tu casa.
-Si. Pero que hacemos para que no sepa nada? Es su cumpleaños, digo yo que querrá celebrarlo o con la familia o con los amigos.
-Por los amigos no te preocupes. Tenemos a Rafa de nuestra parte.
-Has hablado con él?
-Si. Cuando tengamos el plan hay que llamarlo para cuadrarlo con él.
-Ahora el otro problema. La familia.
-No tienes el número del padre?- niego con la cabeza- y de Nana?
-El de Nana si!
-Llámala y que te ponga con su padre.
-Voy.
Cojo el teléfono y marco el número de Nana. Contesta al segundo tono.
-Hola mi niña. Como estas?
-Hola Nana. Muy bien. Quería hablar contigo. Es sobre Alex.
-Ha pasado algo?- pregunta preocupada.
-No tranquila. Quiero prepararle una sorpresa para su cumpleaños, pero necesito hablar con su padre para estar segura de que no lo celebrara en casa.
-Lo dudo mucho. Para sus cumpleaños suele irse. No lo celebra aquí.
-Bueno, por si acaso…
-Un momento, voy a buscar al señor
Se escucha el sonido de una puerta y sus pasos. Oímos unas voces amortiguadas que no entendemos.
-Estará de acuerdo? -susurra Ruth
-Eso espero…
-Hola Alai- dice Fernando- en que puedo ayudarte?
-Hola Fernando. Mira, estoy preparando algo para el cumpleaños de Alex. Seria por la noche, y quería asegurarme que no tenía nada previsto con la familia.
-Mi mujer quería hacer algo… pero hare  que sea al medio día no te preocupes. Puedo saber de que se trata?
-No lo se ni yo- suelto una risita- lo estoy planeando.
-Le diré a Nana que te mande mi número por si necesitas cualquier cosa. Llámame si tienes alguna duda o si Noah y tu tenéis algún problema. De acuerdo?
-Gracias Fernando- sonrío a Ruth. Ella levanta los pulgares
-No hay de que. Te paso con Nana.
-Primer problema resuelto- dice orgullosa Ruth
-Mi niña. Todo aclarado?
-Si Nana, gracias.
-Si quieres que te ayude con algo para el cumpleaños del señorito, dímelo.
-Gracias Nana. Vamos hablando.
-Adiós Alai.
Cuelgo el teléfono y respiro aliviada. Problema amigos y familia fuera.
-Perfecto tía ahora lo difícil, que hacer.
-Lo suyo es que llegue aquí sin saber que viene aquí.
-Y que piense que te has olvidado de su cumpleaños.
-No será demasiado cruel? – digo con una mueca.
-Vas a darle el sorpresón de su vida Alai, que sufra un poco.
-Bueno… me pensare esa parte. Y como hacemos que venga aquí?
-Que Rafa lo traiga con los ojos vendados. Le das una llave, que lo meta en el piso y lo siente en la mesa.
-Vale. Me parece bien.
-Pero echa ambientador. Tu casa siempre huele igual. Sabrá que esta aquí sin abrir los ojos.
-Cierto… comprare un ambientador nuevo.
-Apunta lo que tienes que comprar.
Me levanto, voy al cuarto de Noah, cojo papel y un lápiz y vuelvo al salón.
-A ver- digo- Ambientador nuevo, velas. Que mas?
-Un conjunto de ropa interior nuevo.
-Vale. Ves buscando en internet a ver donde están los mejores.
-No, termina de apuntar y vamos a comprar.
-Que mas entonces?
-Que harás para cenar?
-Ni idea…
-Vamos mal Alai…
-Pollo al horno? Y luego un buen postre.
-El postre, querida, tienes que ser tu- me señala con el dedo.-Nata y  Nutella.
-Para que?- digo extrañada.
-Y fresas. Para que te lo unte por encima, claro.
-Estas fatal- niego con la cabeza pero lo apunto, no me parece mala idea…- pétalos…
-Vas a llenar la casa de pétalos?- asiento sonriente- que bonito…
-Crees que falta algo?
-El regalo?
-Eso ya lo he pensado.
-Y que ha maquinado tu cabeza?
-Sabes esas bolas navideñas con nieve?
-Si. Vas a regalarle eso?- arruga la nariz.
-No. Voy a crearle una. Con arena de la playa donde fuimos, un par de cochas que cogí esa día y pondré una de las fotos que nos hicieron.
-OSTIA! Me gusta- asiente varias veces con la cabeza.
-Tu te quedar con Noah ese día?
-Eso no hay ni que preguntarlo tonta.
-Pues venga, en marcha.
Se levanta del sofá y coge su bolso.
-Por cierto, luego llamamos a Rafa.
-Alex esta con él.
-Bueno, le mandare un mensaje para que se esconda y no lo oiga.
-Eso si responde, llevaban una borrachera…
-No jodas?
-Si. Iban finos los dos…
Salimos con Noah y nos vamos a comprar.
Entramos en una tienda de lencería y Ruth se vuelve completamente loca. Ha estado tirándome lencería de todos los colores. Al final he elegido uno blanco, prácticamente transparente sin aros ni relleno, y Ruth me a obligado a comprarme una liga.
En la tienda de ropa le ha pasado lo mismo. Al final nos hemos quedado con un vestido de seda blanco con  tirantes de brillantes, un escote muy exagerado y la espalda descubierta, total, que  el sujetador no voy a usarlo.
Hemos comprado velas para aburrir, las velas de cumpleaños de purpurina plateada y pétalos rojos como para decorar una casa entera. He aprovechado para comprar el pollo y algo de jamón,  del bueno, y queso. Al final hemos comprado la nata y la Nutella. Las fresas tendré que comprarlas el día de antes…
He comprado lo necesario para hacer su regalo y hemos pasado por la playa a por arena. Noah ha estado un rato jugando a encontrar conchas y rebozándose en la arena hasta casi hacerse de noche cuando hemos decidido volver a casa.
-Bueno, pues ya esta todo. Escóndelo bien, no vaya a verlo.
-Lo meteré en el cuarto de invitados que nunca entra.
Lo escondo todo en el armario y me siento con Ruth en el sofá.
-Voy a llamar a Rafa.
Coge el móvil y marca su número. Tarda un poco en contestar.
-Que se cuenta mi alcahueta favorita?
-Estas solo?
-No, espera.
Oímos unos pasos y una puerta cerrarse.
-Ahora si, dime.
-Ya lo hemos planeado todo.
-Cuenta monada.
-Alai habla.
-Hombre si esta mi amiga contigo!
-Hola Rafa. Ha ver, ya he hablado con  su padre, no van ha hacer nada.
-Me lo imaginaba. Cual es mi papel en tu plan?
-Tienes que traerla a mi casa sin que sepa que viene a mi casa.
-Vale… y como se supone que lo hago?
-Vendándole los ojos.
-Eso me va a costar, pero puedo conseguirlo.
-Te dará una llaves, lo metes su casa, lo sientas en la mesa y te largas- concluye Ruth
-Perfecto. Le diré que le han montado una sorpresa los colegas, le contare una trola, para que crea que es verdad y listo.
-Perfecto!- aplaude Ruth.
-Como lleváis la resaca? – pregunto
-Yo bien. Alex no tanto.  Se ha pasado la tarde potando como la niña del exorcista. Y encima se ha rallado.
-Por que?- pregunta Ruth
-Por que el muy imbécil monto un berrinche ayer.
-Se puso celoso de Rafa- pongo los ojos en blanco.
-Cree que estas enfadada- informa Rafa- y que hizo el ridículo. Que lo hizo. No se como se le ocurrió pensar que estábamos ligando…
-Por que estaba borracho- dice Ruth
-No, por su maldita inseguridad. Me va a costar que no intente hablar contigo antes de su cumpleaños, ya le he dicho que espere pero no se si me hará caso.
-Pues currártelo Rafita, que lo que Alai a organizado vale la pena.
-Hare todo lo que pueda. Ya puedes echarle un buen polvo ese día.
-Con lo que se a comprado dudo que llegue a cenar…
-Mientras no vuelvas a pegarle un mordisco como el que lleva…
-Ah! Otra cosa- dice Ruth- Alai no va a felicitarlo. Como si se le hubiera olvidado.
-Pues que apague el móvil. Por que la va a llamar sin cansancio para verla un rato, y que desaparezca de su casa por si se presenta.
-Joder… no creéis que eso es pasarse?
-No- contestan a la vez.
-Y llámalo. Parece un perro abandonado.
-Por que no los invitad a cenar?- susurra Ruth- Así hablas con él.
-No te importa?
-No. Rafa, tenéis planes para esta noche?
-Tal y como esta este? No salgo de fiesta con él ni de broma.
-Y si os venís aquí?
-Hay cena?
-Pizza. Los sábados siempre pizza.
-Yo llevo el alcohol. En un rato nos vemos. Voy a ver si este mueve el culo del sofá.
No me da tiempo a decir nada mas, cuelga el teléfono y me deja con la palabra en la boca.
-Que paso ayer?- pregunta Ruth
-Nos pusimos a bromear Rafa y yo. A Alex le cambió la cara de golpe, se pensó que estábamos tonteando. De echo llego a insinuar que si me gustaba él se apartaba- niego con la cabeza- y luego me dijo claro que pensaba que él no me gusta
-Tía sería la borrachera…
-Los borrachos y los niños siempre dicen la verdad.
-Tu crees?
-Es la inseguridad que te dije. Aunque después de lo del otro día no se como lo duda.
-A ver, razones no le faltan. No eres clara con él, Alai.
-Por eso planeo todo esto, para serlo.
-Esperemos que su paciencia no se agote por el camino. Y lo del mordisco que?
-Bueno tuvimos una sesión de sexo bastante intensita…
-Tanto?- abre mucho los ojos.
Me levando, me bajo el pantalón y le enseño el cachete.
-Si, si fue intensa. Se te ven todos los dedos…
-Y el mordisco en el hombro. Si supieras la rallada que se pego por marcarme los dedos- niego con la cabeza- que no le gustaba por que me había marcado como una vaca.
-Espero que después de su cumpleaños se le vaya esa inseguridad que tiene.
-Ojala.
-Intenta no tener sexo la semana de su cumpleaños, así lo pillas con mas ganas.
-Durante la semana eso es fácil, no te preocupes.
-Vamos a ir haciendo la cena. Tienes mas sillas.
-Si, voy a por ellas, ves calentando el horno.
Cojo un par de sillas de la despensa y pongo la mesa mientras Ruth hace las lo pizzas. Pongo un bol con patatas, los vasos y servilletas. Llaman al timbre mientras sacamos una pizza y metemos otra.
-Porque no abre con su llave?
-Tiene llave?
-Se la deje el otro día para que pudiera sacar el coche del garaje- me limpio las manos y voy hacia la puerta
-Y tiene dudas? Al final voy a pensar que es tonto.
Abro la puerta y me encuentro a un Rafa vestido multicolor y sonriente y a un Alex con la cara pálida y la cabeza agachada.
-Alai! – exclama Rafa- traigo alcohol!- levanta una bolsa y la mueve de lado a lado.
-Mas? No tuviste suficiente anoche o que?
Me da un beso en la mejilla y pasa por mi lado. Alex no entra, se queda en la puerta. Alargo la mano, cojo la suya y tiro de el hacia dentro. Cierro la puerta y me agacho para mirarlo a la cara.
-Estas echo mierda.
-Canija.. yo no…
-No empieces- lo corto. Pongo morritos y se le escapa una sonrisa.
Coge mi cara entre sus manos y aprieta sus labios contra los míos.
-Luego hablamos vale? Pero no estoy enfadada.
-Seguro?
-Seguro- sonrío- estoy mas bien preocupada. Estas fatal.
-Me sentó fatal el puñetero whisky que me dio Rafa.
-Y que tu te bebiste.-puntualizo- Noah! A cenar!
Arrastro a Alex hasta la mesa donde Rafa y Ruth charlan entre ellos y lo siento en una silla.
-No vomites encima de la mesa- lo señalo con el dedo- aguántate.
-Alex!- Noah se tira encima de él y temo que se caiga de la silla. Joder, le sentó como el culo.
-Hola colega.
-Estas enfermo como mami el otro día?
-No Noah. No es como tu madre. Es que aquí el niño no sabe beber- se mofa Rafa.
-Mami hace un té para la barriga. Quieres uno?- que inocente es..
-No, no me apetece- intenta sonreír, pero parece una mueca. Este vomita en la mesa esta noche.
Saco la última pizza del horno y la pongo en la mesa
-Tu agua no?- señalo a Alex
-Por favor.
Cojo una botella de agua de la nevera y la dejo delante de él. Me siento a su lado y veo que mira la cena con cara de asco.
-No vas a comer verdad?
-No creo…
Suspiro y nos ponemos ha cenar. Alex coge un trozo de pizza pero apenas le da dos bocado. Lo que si bebe es mucha agua. Menuda resaca lleva. Rafa no deja de meterse con él y Ruth lo ayuda, y el pobre no dice nada.
-De verdad te pusiste celoso? – le pregunta Ruth
-No se que me paso- se frota la mano con la cara- se me fue la olla.
-A ver, estoy bueno, no se puede negar. Pero no soy su tipo- me señala
-Y como sabes tu cual es mi tipo?
-Fácil- señala a Alex- no nos parecemos en nada.
-Ahí te tengo que dar la razón. No te acostumbres.
Noto la mano de Alex en mi rodilla y aprieta suavemente. Parece que le ha quedado claro.
-Tu tampoco eres el mío- levanto una ceja- no me malinterpretes. Estas muy buena  pero para mi como mujer no existes. No quiero morir tan joven.
-Muere joven y deja un bonito cadáver – canturrea Ruth
-Viéndolo así… Au!- se queja- esa a dolido tío.
-Te lo merecías. Llevas toda la tarde fastidiandome- dice Alex- la primera tenia gracia, la segunda aun, pero ya no, te estas pasando.
-Ya lo hemos hablado. Sabes que no.
-Solo por si acaso…
-Que os pasa?- pregunta Ruth
-Déjalos Ruth, parecen niños pequeños. Ayúdame a recoger esto.
Recogemos la mesa entre las dos y los llevamos a la cocina, oigo como Noah le pide a Alex que lo acueste y este acepta sin pensárselo. Volvemos a la mesa y nos sentamos con Rafa.
-Que pasa Rafa? Alex esta raro- le dice Ruth
-Me ha hecho jurarle que no me gusta Alai. Esta paranoico.
-Ya lo veo.
-Dile que se quede a dormir o habla con él antes de que nos vayamos si no va a entrar en bucle.
-Quedaros los dos. Ruth puede dormir en la cama de debajo de Noah y tu en la habitación de invitados.
-Por mi bien.
-Pues decidido- aplaude Ruth
-Tu échale un buen polvo y se le quita- susurra Rafa en mi oído.
-No lo veo yo muy en forma hoy- me río.- capaz que le da por vomitar.
-Buscamos una peli?- pregunta Ruth. Ella siempre en su mundo.
-Una porno!- dice Rafa
-No!- exclama Ruth- algo de risa, a ver si así se anima.
-Tu métele mano, nosotros nos hacemos los tontos.
-No voy a meterle mano delante vuestro- arrugo la nariz asqueada.
-Solo era una idea- levanta las manos en son de paz.
-Miedo me dan tus ideas… la última dejo a Alex echo un asco- lo acuso- y consiguiendo que pensara lo que no es.
-Eso no es culpa mía. Tu reza para que no se le vaya la pinza de aquí a su cumpleaños.
Alex sale del cuarto de Noah y se mete en el baño. Suspiro y me levanto para ir al sofá
-Dejarnos el cheslón a nosotros- les digo- queréis palomitas?
-Yo las hago, tu mira a ver si tu amor no se a muerto en el baño.
-Estará meando Ruth.
Me siento en el sofá y oigo la puerta del baño abrirse. Alex se acerca al sofá  y se sienta a mi lado.
-Ven aquí anda- tiro de él, hago que pase por detrás mío se ponga en el lado derecho, apoyo la espalda en el respaldo y levanto el brazo- apóyate aquí- palmeo mi pecho.
Apoya su cabeza en mi pecho y la mano en mi barriga. Hundo los dedos en su pelo y lo oigo suspirar.
-Comedia entonces?- pregunta Ruth dejando las palomitas en la mesa.
-Si, yo la busco. Tu trae unos cervecitas.
Ruth trae tres cervezas y agua para el resacoso y Rafa pone una comedia de Netflix.
-Estas bien?- le susurro a Alex.
-Me duele la cabeza. Te he quitado un ibuprofeno del baño.
-La próxima vez te lo piensas dos veces antes de  beber tío- le dice Rafa
-La culpa es tuya que brindabas hasta por tus calzoncillos de bob esponja.
-Tienes calzoncillos de bob esponja?!- exclama Ruth.
-Pues claro- dice orgulloso.
-Venga a callar. Que si no, no vemos la película.
Nos ponemos a ver la película entre palomitas, cerveza y risas. Cuando llevamos la mitad Alex se queda dormido en mi pecho.
-Parece un bebe- dice Ruth
-Esta reventado…
-Cuidado con lo que dices que el otro día nos escucho hablar. Se hizo el dormido el hijo de puta.
-Enserio?- digo sorprendida
-Me lo ha dicho esta mañana- Asiente.
-Yo también lo hubiera echo- dice Ruth- así uno se entera de mas cosas.
Terminamos de ver la película y nos quedamos un rato hablando.
-Me ha dicho que quieres vender el coche- señala a Alex- es el de al lado de donde a aparcado?
-Si. Puedes ayudarme a venderlo?
-Si. De echo me interesa. Cuando pides?
-Ni idea. En internet los he visto por 1500€
-Si, es lo que vale mas o menos.
-Lo quieres?
-Si me dejas revisar motor y eso si, me lo quedo. Por dentro esta nuevo.
-Apenas lo he usado desde que murió mi abuela. No puedo pagarle el seguro. Si lo quieres, es tuyo.
-El lunes vengo a por él y me lo llevo al taller.
-Mañana te doy la llave. Y si quieres te lo llevas ya.
-Genial- bosteza- yo creo que es hora de irse a la cama. Puedes con él?
-Ahora lo despierto.
Me dan las buenas noches y Ruth lo acompaña al cuarto de invitados.
-Alex, vamos va- lo meneo- vamos a la cama anda.
-Me quedo a dormir..?
-No quieres?
-Claro que quiero…
Se levanta medio dormido del sofá  y tira de mi mano. Vamos hasta la habitación,  cierro la puerta y lo empujo hasta sentarse en la cama.
-Levanta los brazos.
Los levanta y le quito la sudadera y el jersey. El se quita los pantalones y yo me cambio la ropa por un pijama de verano, con él no me hace falta uno de invierno, desprende demasiado calor. Nos tumbamos en la cama, el bocarriba y yo de lado hacia el con la cabeza apoyada en la mano.
-Alex, que te pasa?
-Perdón- se tapa la cara con las manos- ayer me porte como un imbécil.
-La borrachera no te dejo verlo con perspectiva. Si hubieras estado sobrio no te lo hubieras tomado así y lo sabes.
-Lo se- suspira- no se que me paso.
-Se llaman celos. Pero sabes que no me gusta Rafa, ni yo a él.
-Y yo?- sigue con las manos en la cara.
-A ver, cabezón,  tu crees de verdad que no me gustas?-Asiente con la cabeza. Es imposible-  Y que haces en calzoncillos metido en mi cama si no me gustas?
-Por que estoy bueno- suelta una risa y aparta las manos- lo siento- me mira a los ojos- siento el berrinche de anoche.
-Si no lo tuvieras no serias mi niño pijo- sonrío.
-Me das un beso? Pero no te pases que tengo el estómago del revés…
Me acerco a el y le doy un beso suave, sin lengua.
-No me dejes beber. La próxima vez mátame si lo intento.
-No estaba para pararte. Cuando te vi la cara supe que acabarías así.
-Que vergüenza en serio- cierra los ojos- los celos son un puto asco.
-No me digas?- le digo divertida.
-No te imaginas el mal cuerpo que se me puso. En mi vida había sentido eso.
-Si, si lo se- abre los ojos y me mira- a ver si te piensas que yo con la de la peluquería sentí amor puro.
-Te pusiste celosa?- Y sonríe el muy cretino
-Solo quise barrer el suelo con su pelo. Por lo demás todo perfecto.
-Te veo capaz.
-Lo soy-asiento- Vamos a dormir?
-Si. Puedo dormirme en tu pecho?
-Como si hubieras pedido permiso las otras veces- pongo los ojos en blanco.
Me da un beso y se apoya en mi pecho.
Se duerme mientras acaricio su pelo y entonces cierro mis ojos para que el sueño me invada, tranquila por que él ya se ha dormido.

Me despierto cuando noto una mano jugando alrededor de mi ombligo. Abro los ojos y veo que Alex sigue con la cabeza en mi pecho. No para de hacer formas en mi barriga. Distingo en símbolo infinito, corazones y círculos.
-Buenos días. Como amaneces hoy?
Gira la cabeza y sonríe. Tiene mucha mejor cara, ya no esta pálido.
-Buenos días canija,  bien.
-Como va tu estomago?
-Perfecto. Tengo hambre.
-Haberte levantado a desayunar. Quedan cereales de los tuyos. Noah no se los ha comido todos.
-Estaba a gusto aquí.
Mete la mano por debajo de mi camiseta y acaricia el borde de mi pecho.
-Nunca te había visto en pijama de verano…
-Por que no lo es. Pero contigo paso calor.
-Y sueles dormir sin ropa…
-Eso también.
-Sabes si se han levantado?
-Que va, es pronto, solo son las 7:30
-Joder Alex, que es domingo- me quejo.
-Ya, pero tengo que aprovechar antes de irme par pasar el rato contigo- levanta los hombros quitándole importancia.
Se mueve y se  tumba boca abajo con la cara hacia mi. Muevo la mano y le acaricio la espalda.
-Si haces eso me duermo otra vez.
-Alex, es pronto, puedes seguir durmiendo.
-No quiero.
Se acerca a mi y pega sus labios a los míos. Me besa despacio, con cariño. Sigo acariciándole la espalda mientras me besa hasta que suelta un gemido de dolor.
-Te has quejado.
-Me duele la espalda.
Me incorporo y miro su espalda. Joder, vaya moratón. Lo tiene en la parte baja de la espalda hacía un lado.
-Te has visto la espalda?- niega- tienes un moratón enorme.
-Me caí del sofá el sábado y me di con la mesa. debe ser eso.
-Pues es grande.
Se da la vuelta y tira de mi mano hasta dejarme tumbada encima de él
-Deja mi moratón anda.
Coge mi cara entre sus manos y me besa, primero despacio, solo labios, poco a poco va aumentando el ritmo y mete su lengua en mi boca. Baja las manos y me agarra por los muslos hasta que deja mis rodillas una a cada lado de su cuerpo.
-Así que por eso no querías dormirte ee
-Es un añadido si- coge mi culo y lo aprieta pegándome a su erección.
-Y si no quiero?
-Pues me jodo-acaricia mis muslos de arriba abajo
Atrapo sus labios con los míos y muevo la cadera contra él. Claro que quiero. Desde el mismo momento en el que el beso se ha vuelto mas intenso.
-Pero esta vez sin mordiscos-le digo
-Esta vez no tenia pensado algo como lo último que hicimos…
Tira de mi camiseta hacia arriba y me la quita. Atrapa mi pecho con su mano y me acaricia con suavidad. Beso su cuello, su pecho, su estomago y engancho el elástico de sus calzoncillos y tiro hacia debajo. Se lo quito y subo hasta tener su miembro delante. Lo envuelvo con mi mano y le doy un beso en la punta. Oigo un suspiro entre cortado, levanto la mirada pero tiene los  ojos cerrados. Lamo desde la base hasta la punta y lo introduzco poco a poco en mi boca sin dejar de mirarlo a la cara. Muevo la cabeza arriba y abajo acompañando el movimiento con mi mano y jugando con la lengua. Veo como jadea mordiéndose el labio y hunde los dedos en mi pelo. Aumento la velocidad y noto como aprieta mi pelo. Saco su miembro de mi boca y le doy un beso en la punta
-Alex, mírame.
-No- niega con la cabeza- si te miro me corro.
-Alex, mírame- le ordeno- disfruta mi niño pijo…
-Canija, me corro si veo tus ojos, va enserio.
-Mírame- digo con el tono mas serio que puedo.
Oigo como suelta el aire entre dientes y vuelvo a metérmelo en la boca. Muevo la cabeza y la mano sin dejar de mirarlo y veo como abre los ojos poco a poco y me mira.
-Joder, joder, canija…- intenta tirar de mi cabeza hacia atrás pero se lo impido- me co…
Succiono con los labios sin dejarle terminar la frase y noto como se corre.
-Canija…-jadea.
Saco su miembro de mi boca, trago y le lamo la punta sin que su mirada me pierda de vista. Trepo por su cuerpo hasta la altura de su cara y limpio mi comisura coqueta con el pulgar antes de sonreír.
-Te lo he dicho- dice entrecortado- si te miro no aguanto…
-Y que tiene de malo?
-Que no aguanto- recalca.
-Lo has disfrutado?
-Joder- agarra mi cara con sus manos- claro que lo he disfrutado. Tu sabes la boca que tienes?
-Pues no veo el problema- le doy un beso en los labios.
-Que quería alargarlo mas…
-Sigo sin  ver el problema.
-Joder canija…- traga saliva. Me acaricia el labio inferior con el pulgar mientras lo mira.- acabo de correrme en tu boca…
-No me había dado cuenta. Gracias por la información.
Me besa de nuevo con mas ganas. Con deseo mientras tira de mi pantalón y mi ropa hacia abajo. Me da la vuelta hasta quedar encima de mi y va repartiendo besos por todo mi cuerpo hasta llegas a mi entrepierna. Me levanta las piernas, las pone sobre sus hombros y empieza a lamer en círculos alrededor de mi clítoris. Jadeo cuando succiona ese punto y vuelve a lamer. Noto como uno de sus dedos tantea mi entrada y se introduce poco a poco. Separa mis labios y lame de abajo a arriba y empieza a mover su dedo de dentro hacia fuera y volviendo a introducirlo. Mi cadera se eleva buscando mas fricción contra su boca. Miro hacia abajo y veo que tiene los ojos levantados en mi dirección, saca el dedo y se lo lleva a la boca, chupándolo. Me muerdo el labio y noto como vuelve a meter, ahora dos dedos y suelto un jadeo cuando los curva hacía arriba y presiona un punto que manda descargas y hace que el nudo dentro de mi se apriete. Vuelve a acercar su boca sin dejar de mírame y lame una y otra vez, haciendo círculos y moviendo los dedos. Mi interior los aprieta, succiona mi clítoris con sus labios, presiona ese punto dentro de mi y mis dedos se arrugan. Un gemido demasiado alto sale de mis labios y el orgasmo me invade mientras sigue succionando alargando la sensación. Saca los dedos lentamente y empuja su cuerpo hasta tumbarse encima de mi. Se relame los labios y se chupa los dedos mirándome a los ojos. Abre mas mis piernas con las rodillas y noto como se introduce lentamente dentro de mi empujando con la cadera.
-Estas empapada…-sus labios están  húmedos y brillantes.
Mueve la cadera despacio y suelto un jadeo. Estoy mas sensible que nunca y el mínimo roce me hace ver las estrellas.
-Tienes mas hambre?- mi voz es apenas un susurro.
-No, ya no.
Me besa con pasión, sus labios sabes a mi pero no me molesta. Agarra mi pierna y nos da la vuelta hasta acabar conmigo encima sin salir de dentro de mi.
-Haz la magia esa que haces con tu culo- dice contra mis labios.
Llevo las manos a su pelo, enredo los dedos y empiezo a mover la cadera en círculos levantando un poco mientras me muevo para juntar dos movimientos en uno. Lento, muy lento. Alargando el placer infinito que siento. Beso sus labios, los muerdo, los lamo sin dejar de moverme un poco mas deprisa que antes. La presión en mi bajo vientre vuelve ha apretarse, sus manos agarran mis caderas acompañando mi movimiento y acelerándolo un poco. Mi interior aprieta, su miembro se sacude y mis dedos se arrugan haciendo que un segundo orgasmo llegue y un gemido muera en sus labios mientras Se deja ir en mi interior y un gruñido sale des su garganta. Apoyo mi frente en la suya y me desplomo es su pecho casi sin respiración. Acaricia mi espalda de arriba abajo mientras sus latidos se calman y su respiración se relaja.
-Sigues viva? – pregunta en un susurro.
-No estoy segura…
Agarra mi cadera y me mueve hasta que mi espalda toca el colchon y él  se pone de lado mirándome. Me da un beso en el hombro y apoya la cabeza en la almohada con una sonrisa.
-Me encanta el color que tienen tus mejillas después de correrte. Es adorable.
-Yo siento que me arden.
-Las tienes rojas- me acaricia- hoy no ha habido mordiscos
-No
-Pero seguro que el que haya dormido en la habitación de al lado nos ha escuchado. Tenlo en cuenta.
-Es posible.
-Canija… - se apoya en un brazo y me mira desde arriba- te ha molestado lo de antes…?- dice inseguro
-No se a que te refieres. Pero nada de lo que hemos hecho me ha molestado, te lo aseguro.
-Quería apartarte, pero no me has dejado…
-No quería apartarme. Quería verte disfrutar hasta el final.- suspiro- no lo entiendes?
-Pues lo has conseguido- sonríe de lado marcando el hoyuelo.
-Puedes explicarme por que no puedes mirarme?
-Son tus ojos. Veo tus ojos y no lo aguanto. No entiendo el porque. Verte ahí,  entre mis piernas, con tu boca… y tus ojos….No los se. Simplemente no puedo.
-Creo que lo entiendo. Es decir, si no miras, no hay problema.
-Exacto- asiente.
-Solución. Vendarte los ojos- sonrío con malicia.
-No me des ideas…
-Vamos a desayunar. Me muero de hambre.
Me levanto de la cama, me visto rápido le doy un beso y me meto en el baño. Me limpio, me lavo los dientes, por si acaso, y me miro en el espejo. Observo mis ojos y yo no veo nada especial. Marrones, sin mas.
Cuando salgo del baño y voy a la cocina Alex ya esta haciendo café. Abro el armario, saco unas galletas y me siento en la encimera a su lado.
-Quieres? – le tiendo el paquete de galletas.
-Si- abre la boca.
Saco una galleta, la acerco a su boca y él la coge chupándome la punta de los dedos.
Prepara dos café con leche. Al mío le pone chocolate en polvo. Se coloca entere mis piernas y me da la taza.
-Quería hablar contigo de algo.
Mierda. Mierda! A que me jode la sorpresa?
-Dime- digo nerviosa
-Sabes que en tres semanas es mi cumpleaños y quería…
-Hola parejita! Buenos días!
Bendito Rafa! Me acaba de salvar el culo.
-Buenos días Rafa!- uy demasiado efusiva- como has dormido?
-Muy bien. Ya se te ha pasado el berrinche?- pregunta mirando a Alex.
-Tienes que ser tan pesado desde primera hora de la mañana?
-Y yo que pensaba que después del polvete mañanero que has echado estarías de mejo humor…-niega con la cabeza sonriente- Venga, recoge todo y vámonos. Me llevo el coche de Alai al taller para revisarlo. Aprovechare hoy que mañana tengo faena.
Alex suspira me da un beso y me baja de la encimera.
-Voy a por una sudadera- y sale de la cocina
-De nada princesa-me giña el ojo- te he salvado el culo. Me la debes.
-Cállate. Te va a oír. Pero gracias.
-Tendrás que apañártelas para esquivar el tema. No lo va a dejar pasar.
-Lo se- suspiro- voy a buscar las llaves del coche.
Dejo la taza en el fregadero y voy a la habitación donde Alex se esta guardando el móvil en el bolsillo. Abro el cajón de la mesita y rebusco las llaves del coche. Hace tanto que no lo uso que están en el fondo del cajón. Noto como envuelve mi cintura y me levanto pegando mi espalda a su pecho.
-Hablamos luego- dice en mi oído.
-Te llamo cuando Noah se acueste vale?
Me giro entre sus brazos y me levanta del suelo.
-Sonríe un poco. Estas demasiado serio…
-Estoy cansado…- apoya su frente en la mía.
-Hasta mañana mi niño pijo
Se le escapa una sonrisa que no llega a ser una sonrisa completa.
-Hasta mañana canija
Me da un beso tierno, con regusto melancólico. No, definitivamente algo le pasa.
Me suelta y los acompaño a la puerta. Cuando cierro me apoyo en la puerta con la espalda y suspiro. Estas tres semanas van a ser eternas…

HASTA QUE LLEGASTE TÚDonde viven las historias. Descúbrelo ahora