HASTA QUE LLEGASTE TÚ

CAPITULO 30

Alai

Me despiertan unos golpes en la puerta.
Tengo a Alex con la cabeza en mi pecho, el brazo encima de mi estomago y su pierna enredada con las mías. Tengo la sabana hasta la cintura, pero Alex esta completamente destapado, a excepción de la pierna que tiene entre las mías. Tengo una vista  perfecta de su culo y tengo que decir que tiene un culazo. Mis dedos están enredados en su pelo y la respiración pausada de Alex me hace costillas en el pezón. Como hemos acabado así?
Aporrean la puerta de nuevo y se oye la voz de Rafa desde el otro lado. Esta intentando abrir pero esta cerrado con pestillo.
-Tortolitos! Despertar de una puta vez- aporrea de nuevo- todos hemos desayunado ya!
No me jodas? Que hora es? Alex se remueve y se abraza mas a mi cuerpo.
-Alex, despierta, es tarde.
-No- murmura con voz pastosa- estoy muy a gusto así…
-Abrir la puta puerta!- grita Rafa
-Lárgate pesado!- le grita Alex
-Alex, han desayunado todos ya. Es tarde
Escucho un ruido metálico detrás de la puerta y esta se abre de golpe. Alex se mueve rápido para tapar mi pecho y que Rafa no vea nada.
-Que coño haces tío? Como cojones has abierto?- le grita Alex
Rafa se tapa la cara con una mano con los dedos abiertos como un niño pequeño que dice no querer mirar pero mira y en la otra levanta unas tijeras y las mueve de un lado a otro.
-No hay puerta que se me resista ni pestillo que no sepa abrir.
-Joder Rafa. Ahora bajamos, no ves como estamos?- le digo
-Alex tiene un culo precioso
Me rio sin poder evitarlo por que la situación tiene gracia. Los dos desnudos y un tío enorme mirándonos como un niño pequeño.
-Pero no le rías las gracias- el tono molesto de Alex hace que me ría mas y Rafa se une a mis carcajadas-Quieres que me mueva y veras como se te corta la risa?
-No,no,no.-no puedo parar de reír, me ha dado un ataque de risa en toda regla
-Por mi vale- dice Rafa.
-Ni de coña- Alex levanta la cabeza y aunque no le veo la cara se que se ha enfadado y a Rafa se le corta la risa de golpe.
-Vale… voy a irme. Bajar rápido.- Se da la vuelta y sale de la habitación cerrando la puerta tras él.
-No te enfades- pongo la mano en su mejilla y le giro la cara hacia mi. Esta enfadado, nunca lo había visto enfadado, lo jodido es que me parece terriblemente sexy como se le arruga la nariz.
-No ves que es idiota? Si le ríes las gracias será peor.
-Ha tenido gracia
-Si le sigues la coña entrara así  en cualquier momento. Rafa no entiende los límites.
Acaricio su labio inferior con el pulgar, cierra los ojos y suspira.
-No me distraigas…- su tono a perdido el enfado y su nariz ya no se arruga.
-Vamos a levantarnos va.-le doy un beso corto y se aparta de encima de mi cuerpo.
Me levanto de la cama y suelto un gemido de dolor. Joder me duele todo.
Normal…
Lo de anoche fue… joder no hay ni palabras para describir lo que fue. Una puta pasada. En mi vida había tenido sexo de esa manera. Vale que solo había estado con una persona antes que con Alex, pero estuvimos mucho tiempo juntos por desgracia e hicimos de todo. Pero nunca había tenido la necesidad de tener que morder nada, ni de que fueran mas deprisa.
-Estas bien? -Oigo la voz de Alex hablándome desde el baño- te he oído quejarte.
-No te duele todo?- saco mi ropa de la mochila que me he traído y empiezo a vestirme.
-No- oigo como se ríe- tienes que hacer mas deporte canija, lo que tienes son agujetas.
Al ponerme el tirante del sujetador siento una punzada en mi hombro derecho. Me escuece. Alex sale del baño con los calzoncillos puestos.
-Vístete- me pongo la camiseta- nos están esperando.
-Que si…- dice con voz cansina.
Se viste con un pantalón gris y una camiseta negra mientras yo hago la cama. Se acerca a mi, me da un beso suave, coge mi mano y bajamos al salón.
Están todos sentados en los sofás viendo una película de dibujos. Noah y Martin están sentados juntos, Rafa en el mismo sillón de ayer, y Ruth y Daniel en el otro con ella sentada encima. Están todos embobados con la televisión, ni siquiera se dan cuenta como nos acercamos. Le doy un beso en la cabeza a Noah y a Martin, Alex me imita y nos sentamos los dos en el sofá. Ruth gira la cabeza hacia nosotros y sonríe.
-Hombre! Por fin bajáis tortolitos!
-Buenos días para ti también amiga
-No sabéis dejar dormir a la gente- gruñe Alex
-Si os durmierais cuando toca no estaríais cansado- nos acusa Rafa
-Envidioso- tose Alex
Le doy un codazo en las costillas para que se calle. No se dan cuenta que hay dos niños?
-Mami! Nana me ha preparado unos cereales con leche que estaban riquísimo
-Si?
-Si! Los podemos comprar? – me dice ilusionado.
-Luego le pregunto a nana que cereales son.
-Yo te lo digo. Son los míos- me dice Alex
-Comes cereales de colores?- se burla Daniel- que tienes, 5 años?
-Mentales si- le aclara Rafa.
-Están buenos. Que mas da que sean de colores?
-Que tienes en la mano?- dice Ruth entre sorprendida y preocupada- eso es un mordisco?!
Miro la mano de Alex y efectivamente, tiene un mordisco. Mi mordisco para ser mas exactos. Y menudo mordisco… esta morado y se ven a la perfección la marca de mis dientes. Joder…  Alex se mira la mano e intenta esconderla cruzando se de brazos.
-Joder Alai! Lo de que te lo comieras no era tan literal-Las carcajadas de Rafa son tan fuertes que hasta se agarra la tripa con la mano y yo solo puedo pedir que la tierra me trague. Joder que vergüenza.
-Me lo he hecho yo- miente Alex- me muerdo por las noches mientras duermo.
-Eso no es verdad amigo. Te he visto dormir un millones de veces.- Alex lo fulmina con la mirada.
-Cierra el pico
-Vaya humor…-murmura Ruth
-Es que no me gusta demasiado que mi querido amigo interrumpa en mi cuarto abriendo el pestillo con unas tijeras mientras estamos en la cama de…- le tapo la boca con la mano antes de que termine la frase
-Los niños- le susurro.
Cierra los ojos y coge aire lentamente.
-Lo siento. Me ha fastidiado la mañana…
-Alex, podemos ir a jugar?- pregunta Martin
-Si enano, ir ha jugar- los niños salen corriendo escaleras arriba.
-Por que estas tan enfadado?- le pregunto al oído y aliso las arrugas de su nariz con el dedo.
-Si no llego a estar encima de ti te ve en pelotas Alai- gira la cabeza y me mira. Eso es lo que le preocupa?
-Pero no lo a hecho, Relájate.
Suspira, pone su mano en mi mejilla y me da un beso.
-Pero que sepas que cuando estemos a solas lo voy a matar.
-Que bonito!- exclama Ruth
-Cállate-le susurra Daniel.
Alex se tumba apoyando su cabeza en mi regazo con los ojos cerrados y yo le acaricio el pelo.
-No has dormido o que?- le pregunta Daniel
-Si, si he dormido. Pero que mi amigo sea imbécil me cabrea.
-Tío no ha sido para tanto!- exclama Rafa
-No puedes entrar en mi habitación abriendo el pestillo con unas tijeras.
-Eso has hecho?- pregunta Ruth sorprendida
-Si. Y me he encontrado con una panorámica de su culo- señala a Alex con la cabeza.
-Imagínate que no es a mi a quien ves- le reprende Alex
-Ah- Rafa frunce el ceño- eso no lo había pensado... Perdón – me mira con cara de arrepentimiento- Mientras Alai este aquí juro no volver ha entrar así- levanta la mano en señal de juramento.
-Tienes que contarme por que le has mordido- me susurra Ruth. Ella a su rollo…
-Espérate sentada que de pie vas ha cansarte…
-Niños, que queréis para comer? – dice nana desde la puerta
-Nana, hoy tomate el día libre- le dice Alex sin levantar la cabeza de mi regazo- nosotros solos nos apañamos.
-Pero señorito…
-Ni señorito ni nada- la corta- sal, diviértete. Y no te preocupes, nadie va ha enterarse.
-Esta seguro?
-Si. Va, diviértete.
-Gracias señorito- se da la vuelta y sube las escaleras.
Decidimos pedir McDonald’s para comer. Esta vez he podido pagar la parte de Alex aprovechando que ha sido Ruth quien lo ha pedido. Se ha negado, pero no ha podido hacer nada para impedírmelo. Nana ha salido a comer con unas amigas después de dar las gracias mil veces.
Después de comer hemos estado jugando al UNO con los niños. Martin nos ha pegado una paliza a todos. La sonrisa en su cara era inmensa. Nunca he entendido por que la gente tiene tantos prejuicios con las personas como él. Martin es puto amor. Y ver como Alex lo trata me ha ablandado el corazón.  Es increíble como persona. Ni siquiera cuando se ha enfadado con Rafa ha sido mala  gente. No se ha puesto hecho un energúmeno como haría mucha gente. Es bueno, cariñoso, gracioso, buen hermano, un gran amigo, y aunque se ha criado entre algodones, no se cree superior a nadie, solo hay que ver como trata a su Nana para darse cuenta, y jodidamente guapo claro. Y aunque es un creído y en ocasiones un poco inseguro, me encanta y es un problema. Lo que me pasa con él no es solo físico y esto era lo que yo no quería, pero no he podido evitarlo, por que es perfectamente imperfecto.
-Se te va a caer la baba- me dice Ruth
Estoy mirando a Alex jugar con Martin y Noah en la alfombra mientras nosotros jugamos al Monopoli.
-Cállate
-Te estas pillando amiga- canturrea
-Estoy jodida-reconozco
En ese momento Alex gira la cabeza y sus ojos se encuentran con los míos. Sonríe marcando ese hoyuelo que me encanta y mi estomago se pone del revés. Lo que me hace sentir con solo mirarme es mas de lo que he sentido nunca. Y me asusta. Me asusta mucho. Porque eso significa que si quiere, puede hacerme mas daño que nadie, y en mi caso, es mucho decir.
Cuando me contó anoche lo de su ex me enfade, me enfade muchísimo. Como alguien pudo hacerle eso? Es que no se dio cuenta de que Alex es una persona increíble y no se merecía eso? Engañarlo así? Llegar hasta tal punto como para drogarlo? Aunque esa historia me suena. Se lo que es que alguien haga cualquier cosa. Incluso drogarte para conseguir lo que quiere.
-Te estas enamorando Alai?- dice en mi oído
-No lo se Ruth. No lo se.
Ruth me mira con ternura y aprieta mi rodilla.
-Alex no es él, lo sabes verdad?
-Si lo se. Pero eso no significa que yo este lista para esto.
-Yo creo que si. Y si miras su cara te darás cuenta.
Vuelvo a mirarlo y me encuentro en que estaba mirándonos con una sonrisa en la cara, no puedo evitar devolvérsela y él me giña un ojo coqcoqo.
-Lo ves?- me dice Ruth
-Lo veo.
Al acabar la partida del Monopoli vemos una película que Martin elige como ganador del UNO. Nana vuelve y se ofrece ha hacer la cena yo me levanto y voy ha ayudarla mientras los demás ven la película.
-No tienes que ayudarme Alai- me dice Nana
-No voy a dejar que lo hagas sola.
-Es mi trabajo
-Yo no entiendo de eso- le digo- para mi eres una persona mas. De hecho hoy cenaras con nosotros.
-Uy no. Si la señora se entera…
-La señora no esta Nana- le recuerdo- y Alex y Martin estarán muy contentos de que te sientes con nosotros, estoy segura
-Mis niños...
-Los adoras verdad?
-Si. Los he criado desde bebes. Aunque siento debilidad por el señorito Alex.
-Me he dado cuenta.
Pelamos patatas y cortamos cebolla para hacer una tortilla de patatas. Preparamos una ensalada y unas cuantas croquetas para acompañar. De postre Nana tenia preparada una tarta de chocolate.
-El señorito me dijo que te encanta el chocolate.
-Si- me rio- pero yo diría que es mas bien una obsesión.
-Tengo que darte las gracias por hacer que mi niño vuelva a sonreír así.
-Alex? Si el siempre tiene una sonrisa enorme en la cara, no se como no le duelen los cachetes.
-Después de todo lo que paso… dejo de sonreír. O mas bien sonreía sin ganas. Por fuera parecía feliz, pero realmente no lo era. La señora es muy complicada- niega con la cabeza- siempre lo controla. Le recuerda que no es digno de ser su hijo por no estudiar lo que se supone que tenía que estudiar.- ríe incrédula- y él siempre aguanta todo por Martin.
-Su madre no parece muy buena persona. Perdón, pero por lo que se, no nos llevaríamos bien.
-Te aseguro que no. Creería que no eres digna de un hijo suyo.
-Pero ella no puede meterse en eso. Es la vida de Alex.
-Si, pero ella se cree dueña de sus hijos. Pero Alex ya le dejo claro el otro día que no le importa su opinión.
-Su madre sabe de mi?- no puedo evitar sorprenderme.
-Si. No sabe quien eres, pero lo regaño el fin de semana pasado por no venir a dormir y le dijo cosas bastante feas.
-Lo regaño? Como ha un niño pequeño?
-Si. Como si fuera un niño pequeño…
-Y yo creía que con mi madre lo había visto todo…
-Niña- coge mis manos entre las suyas y me mira a los ojos- Alex es un gran chico, y aunque no lo parezca es muy sensible. Le duele como es su madre aunque no lo diga. Cuídamelo. – me pide
-Yo no…
-No digas nada- sonríe con cariño- se que no sois pareja, pero veo su cara cuando te mira y la tuya cuando lo miras a él y con eso me vale. Aunque él no me ha dicho nada se que has pasado por muchas cosas, se nota en tus ojos. Veo en ti una barrera que impide que la gente llegue a ti, pero si no me equivoco cierto señorito la esta derribando. Déjalo pasar. No te arrepentirás.
Los ojos empiezan a picarme, se lo que significa esta sensación.
-Estoy muy rota nana-digo a media voz- Alex se merece una persona que no lo este.
-Pero eres la persona que él quiere. Y él puede ayudar a que esos cachitos – pone un dedo encima de mi corazón- se recompongan. De echo creo que ya ha logrado pegar algunos
Una lágrima se desliza por mi mejilla sin poder evitarlo.
-Lo que me paso- cojo aire para intentar llenar mis pulmones- Alex no lo sabe… tengo miedo de que cuando se entere se aparte. Y no-no se si yo estoy lista para dejar que una persona entre a mi vida de esa manera.
-Lo estarás. Dale tiempo. Él lograra que ese miedo desaparezco.
-Es que- siento la necesidad de contárselo. Decirle por que creo que Alex se merece a alguien mejor- A mi…- trago saliva- el padre de Noah…- no puedo terminar la frase. Pero veo en sus ojos que lo ha entendido.
-Os estáis comiendo la cena vosotras solas o que?- interrumpe Alex en la cocina pero al vernos a las dos cogidas de la mano y los ojos llorosos le cambia la cara- que pasa?
-La cebolla. Que pica mucho- le dice Nana.
-Demasiado.
Alex se acerca a nosotras y me abraza por la espalda. Cuando noto su contacto cierro los ojos sin poder evitarlo. El aire que sentía que me faltaba entra de golpe en mis pulmones y el malestar que sentía en el cuerpo desaparece.
-Estas bien?- su tono denota que esta preocupado, no se ha tragado lo de la cebolla, claro.
Abro los ojos y me encuentro con los de Nana, tiene una leve sonrisa que me dice: ves? A eso me refería.
-Si, estoy bien.
Suelto las manos de Nana y le doy un golpecito a las manos de Alex que están en mi vientre.
-Vamos, lleva los platos a la mesa. Colabora.
-A sus órdenes- se lleva la mano a la frente como un militar, me da un beso en la cabeza y se va con los platos hacia el comedor.
-No le diré nada. No te preocupes.
-Gracias Nana.- la abrazo. Huele a especias y flores. A hogar.
Terminamos de poner la mesa entre los tres. Logramos que Nana se siente con nosotros después de mucho insistir. Rafa se sienta en la punta de la mesa por que dice que es quien manda, a su derecha se sienta Alex, conmigo al lado y Noah y Martin en las sillas siguientes. En el otro lado están Ruth, Daniel y Nana. La cena pasa entre risas y anécdotas graciosas, y aunque intento prestar atención estoy ausente. Sigo pensando en la conversación con Nana. Alex se ha pasado la cena mirándome de reojo e intentando que me integrara mas en la conversación. Pero no he sido capaz. Nana me mira desde el otro lado de la mesa y sonríe tímidamente. Me sorprende lo perspicaz que es esta mujer. Lo rápido que ha entendido todo sin decir una sola palabra. Sera bruja?
Que tonterías dices?
Ya he dicho que estoy en otro mundo. No me juzgues conciencia.
-Canija, de que has hablado con mi Nana para quedarte así, tan ausente.- me susurra Alex al oído.
-Cosas de mujeres- intento sonreírle pero parece mas una mueca que otra cosa.
-Esta tortilla esta buenísima Nana!- exclama Ruth. Como la quiero, acaba de salvarme de tener que decirle a Alex que no insistiera.
-La ha hecho Alai -Sonríe en mi dirección.
-Enserio?- dice Ruth sorprendida
-Tu sorpresa me ofende amiga.- la miro con mala cara.
-A ver, no me malinterpretes, no cocinas mal.
-No lo estas arreglando- se ríe Rafa.
-No vuelvo a cocinar para ti- le digo a Ruth- cuando te quedes en mi casa cocinas tu. Por graciosa.
-Nah. Para eso esta Daniel.
-A mi no me metas- dice este levantando las manos.
-Eres el que mejor cocina eso es verdad- digo con media sonrisa.
-Mientras no le pidáis a este que cocine- señala Rafa a Alex con la cabeza mientras pincha ensalada- estáis a salvo.
-No cocino tan mal- le tira un trozo de pan que le da en la frente.
-Dile eso a mi sartén quemada- no puedo evitar soltar una carcajada
-Que le hiciste a su sartén?- pregunto entre carcajadas.
-Intentábamos, los dos, hacer burritos y se nos quemo el relleno.
-Los dos? Si yo estaba poniendo la mesa!- exclama Rafa.
-Que te calles- le tira otro trozo de pan.
-No te culpo amigo, has tenido cocinera toda la vida.
-Nana, no lo malcríes tanto, que ya es mayorcito…
-El problema es que no le dejan cocinar – dice esta- el siempre esta conmigo en la cocina observando, pero a su madre no le gusta y lo echa.
-Pues ya va siendo hora- dice Ruth- o piensas vivir con tus padres el resto de tu vida?
-Créeme que no.
-Mami, podemos hacernos una foto?- pregunta Noah a mi lado.
-Eso eso!- grita Rafa- una foto. Mis fans reclaman actualizaciones.
-Fans? Quien te crees que eres? Kim Kardashian?- le dice Ruth.
-Soy mejor- saca su móvil bolsillo y pone la cámara frontal- venga, un selfish.
-No- dice Nana- yo os la hago.
Nana coge el teléfono que Rafa le tiende y se pone en la punta opuesta de la mesa para enfocarnos a todos.
Noah se pone de rodillas y abraza a Martin del cuello y pega su cabeza a la suya. Rafa se levanta y se pone entre Ruth y Daniel con los brazos encima de sus hombros y una gran sonrisa. Alex pasa un brazo por encima de los míos y apoya su barbilla en mi hombro.
-Sonreír niños!- dice Nana.
Todos sonreímos y se escucha el sonido de la cámara varias veces. En una de esas Alex me da un beso en la mejilla.
-Ahora una así- dice Martin sacando la legua- con caras feas.
Noah y Martin sacan la lengua.  Dani se pone bizco, Ruth se sube la nariz como si fuera un cerdito, Rafa hincha los mofletes y pone sus manos al lado de su cabeza con las palmas abiertas y los pulgares en la sien. Yo cojo a Alex de la barbilla y le planto un beso de vaca en la mejilla. Se vuelve a escuchar la cámara.
-Que asco!- grita Alex
-No te gustan mis babas?- le digo con vos traviesa
-Si, pero no así- se limpia con la palma de la mano.
-Babas son babas.
-Voy a colgarla en insta!-dice Rafa.
-Cual?- pregunta Ruth
-La última esta claro. mirar la cara de Alex
Gira el móvil para enseñárnosla y efectivamente, Alex tiene una mueca de asco muy graciosa.
-No me jodas tío, esa no!
-Pero si estas muy guapo- dice Rafa fanfarrón- Alai no tienes Instagram o que? Te busque el otro día y no encontré nada.
-Alai tiene su Instagram a prueba de la Nasa.
-Ahora os agrego- saco mi móvil del bolsillo y busco a Rafa.
-A mi también no?- pregunta Alex
-Si a ti también- le sonrío y después de darle a seguir a Rafa hago lo mismo con Alex que rápidamente me acepta.- pero Rafa. No puedes etiquetarme en la foto.
-Porque?- se extraña
-Sus normas…- suspira Ruth.
-Por que no. Pásame las fotos y ya colgare yo las que quiera.
-Eres rara… que pasa si te etiqueto? Es que estas en busca y captura o algo?
-Hazle caso y ya- lo corta Alex
Rafa niega con la cabeza y se pone a teclear en su móvil. Me llega un privado de Instagram con las fotos que nos hemos hecho y una notificación de que Rafa a colgado un Story.
Me descargo las fotos y entro en galería para verlas. Me detengo en la que Alex esta dándome un beso en la mejilla y me fijo en mi sonrisa. Nunca he tenido una foto así. Parezco…. Feliz.
-Salimos bien eeh
Giro la cabeza y veo que Alex esta mirando mi móvil por encima de mi hombro.
-No sales tan feo como de costumbre
-Estas insinuando que soy feo?- intenta parecer indignado pero se esta aguantando la risa- si soy un bellezón!
-No necesitas abuela tu no?
-No- sonríe orgulloso.
-Creído
-Canija
-Chicos, nosotros nos tenemos que ir. Mañana tenemos comida familiar- dice Dani terminando así el duelo de miradas con Alex.
-Me tengo que quedar con estos a solas?- dice Rafa señalándonos.
-Si. Te daré un mechero para que aguantes la vela- se mofa Ruth.
-Gracias.
Recogemos la mesa entre todos y Nana se empeña en recoger la cocina ella sola mientras nosotros despedimos a Rafa y a Ruth. Los niños se van a la habitación a ver una película y nosotros tres nos vamos al salón. Nana nos da las buenas noches y nosotros decidimos ver una comedia en Netflix. Alex se tumba como esta mañana, con la cabeza en mi regazo y Rafa se sienta en el sillón de siempre.
-Acaríciame el pelo- me pide Alex
-Te gusta?
-Me relaja mucho- afirma.
Así que le acaricio el pelo y presto atención a la pantalla. La película no esta mal, es de risa y Rafa se mea con según que escena y la comenta con una ilusión digna de un niño. La respiración de Alex cambia a una mas relajada y acompasada. Se ha dormido.
-Se ha quedado frito- le digo a Rafa
-No jodas?- se gira para mirarlo- vaya muermo.
-Si lo se no le hago caso y no le acaricio el pelo.
-Lo raro es que te deje- afirma- es un maniático con el pelo.
-A si?- digo sorprendida
-Si. Mucho. De hecho va poco a la peluquería por que odia que se lo toquen.
-No me había dicho nada…
-Contigo todo es diferente- susurra, pero lo he oído.
-Conmigo?
-Si. Contigo hace cosas que no hace con nadie.
-Como que?
-Dejarte dormir en su cama. Solo le deja a Martin, por razones obvias. Pero ni yo he  podido dormir ahí. Siempre me echa. Y según se, nunca se ha traído a nadie.
-Vaya…
-Le gustas. Mucho. Nunca lo había visto así de embobado con nadie. Ni siquiera con su ex, que fue su única novia.
-No me hables de esa arpía…
-Te lo ha contado eeh
-Si- le acaricio la nariz con la punta del dedo. Parece tan niño cuando duerme…- ya me cae mal y no la conozco.
-Si la conocieras. Te caería peor- asegura.
-Tu te llevabas bien con ella?
-Nunca me gusto. Ni un pelo. Pero no podía meterme. Siempre vi cosas en ella muy raras. Cuando él estaba era de una manera, pero cuando faltaba a clase por algún motivo era un demonio.
-Todo un encanto vamos.
-Lo manipulaba como le daba la gana- frunce el ceño- y aunque él nunca me ha contado nada, se la historia. Me la conto una amiga de ella.
-Nunca te ha dicho nada?
-Nunca. Y si saco el tema se cabrea. Así que no insisto- levanta los hombros  quitándole importancia.
-Y por que a mi si me lo ha contado?- frunzo el ceño desconcertada.
-Te lo he dicho. Eres diferente.
-Tanto como para hablar conmigo de algo que no le ha dicho ni a su mejor amigo?
-Quiere que lo sepas todo de él. El motivo, no lo se, pero es lo que quiere.
-Y yo no puedo hacer lo mismo con él…- susurro para mi misma.
-Confía en él.-levanto la cabeza para mirarlo. Me ha oído- Cuando estés lista, cuéntaselo todo. Se que le preocupa lo que sea que te pase. Yo no me meto, pero se que con el tiempo, si no se lo dices, ira a peor. Sentirá que no confías en él si no lo haces.
Y ahí esta la inseguridad de Alex. De la que he ido viendo pequeñas muestras en este tiempo. Cuando se quedo a milímetros de mi boca en la playa sin terminar de acortar la distancia. Cuando anoche me pregunto si seguía. Cuando no paraba de preguntarme la primera vez si estaba segura…
-Es inseguro- murmuro
-Se puede decir que si. Por eso no te beso aquella mañana en tu casa.
-Como sabes eso?
-Ruth y yo hablamos mucho- suelta una risita silenciosa.-y tu eres desconfiada.
-Vaya combinación mas buena eh- me rio sin ganas.
-Pero con él no lo eres tanto- levanta una ceja en mi dirección- conmigo o con Daniel mantienes las distancias pero con él no.
Enserio hago eso? No me había dado cuenta.
-Lo siento. No te lo tomes a mal, no es por ti ni por Daniel es solo…
-Oye que no te juzgo- me corta- solo digo que esas barreras con él no las tienes.
-Si las tenia- le aseguro- pero se las ha ido cargando poco a poco.
Los labios de Alex tiemblan levemente, como si contuviera una sonrisa. Esta despierto? No, su respiración no a cambiado ni se ha movido.
-Dame las gracias
-A ti?
- Quien te crees que lo animo a no rendirse contigo?
-Eres un gran amigo sabe?- le digo con cariño.
-Lo se. Hacerme padrino de vuestra boda, me lo merezco- se levanta y se despereza- me voy a dormir. Cuando quieras tenemos otra charlita- me giña un ojo con picardía- y que sepas que aquí me tienes para lo que quieras.
-Igualmente.
Rafa sale del salón hacia la habitación que ocupo anoche. Me toca despertar a Alex. Me quedo observándolo mientras resigo el contorno de su cara. Transmite tanta paz así…
-Alex- me acerco a el y le doy un pico en los labios- vamos a la cama va.- No se mueve, así que le doy unos golpecitos en la mejilla- Alex?
-Mmm…
-Vamos va.
Lo empujo para que se mueva y refunfuñando se sienta en el sofá.  Me levanto y le tiendo una mano. La coge y consigo arrastrarlo escaleras arriba. Cierro el pestillo de la puerta, por si acaso, aunque con Rafa no sirva de mucho y me giro para ver a Alex sentado en la cama mirándome.
-Te ha gustado la película?- me burlo acercándome a él.
-Muy interesante si- me coloco entre sus piernas de pie frente a el y envuelvo mis brazos en su cuello
-Si te has dormido a los 5 minutos- lo acuso.
Rodea mi cintura con sus brazos y levanta la cabeza buscando mis labios. Al principio es un beso dulce, tranquilo, pero poco a poco cambia a uno de mas necesidad. Mi respiración empieza a descontrolarse, mi pulso aumenta y siento un cosquilleo entre las piernas. Le agarro del pelo y meto la lengua en su boca, él baja las manos hasta mi culo y lo aprieta. Abandona mi boca para besar mi cuello. Joder, estoy ardiendo y ni  siquiera me ha tocado. Esto no es normal.
Tira de mi camiseta hacia arriba y me la quita.
-Joder. Tus sujetadores me vuelven loco.- traga salivo y acaricia mis costillas con los pulgares- no se si quitártelo o dejártelo puesto.
-Tu elijes- mi voz sale entre cortada, ronca.
Le quito la camiseta y ahora soy yo la que beso su cuello. Besos húmedos, mordiscos suaves que hacen que suspire. Sin darme tiempo a reaccionar, me agarra del culo y me da la vuelta hasta estar de espaldas en el colchón con las piernas colgando del borde. Reparte besos por todo mi cuerpo, lame el centro de mis pechos y los acaricia por encima del sujetador. Baja poco a poco por mi estomago y desabrocha el botón de mis pantalones. Tira de el hasta quitármelo y quedarme en ropa interior. Se relame mirándome desde el borde de la cama.
-Eres una puta obra de arte
Se tumba encima de mi y me besa con ganas, con necesidad. Noto su erección clavarse en mi pierna. Tira de mi labio inferior con los dientes y un gemido sale de mi boca sin poder evitarlo. Vuelve ha hacer el mismo camino hacia abajo y se detiene en el borde de mi ropa interior. Mete los dedos por la goma del tanga y me mira. Esta de rodillas en el suelo, entre mis piernas. Joder que imagen. Tengo la boca seca.
-Esto- dice moviendo la goma entre sus dedos- va ha ser mi perdición lo sabes no?- no puedo responder, he perdido mi voz. Trago saliva pero no sirve- pero ahora me estorba.
Tira de el lentamente hacia abajo hasta sacarlo por mis pies. Me coge las piernas por detrás de las rodillas hasta que mis pies están encima del colchón. Empieza a besar el interior de mis muslos, primero uno y después el otro, subiendo muy poco a poco. Me remuevo, esto es una tortura. Mi cuerpo entero tiembla de anticipación. Pasa los brazos por debajo de mis piernas hasta poner las manos en mi cadera. Muerde mi ingle y el gemido que se me escapa es hasta vergonzoso. Lo noto sonreír contra mi piel. Sera cabrón, lo esta disfrutando. Noto su aliento en mi centro y me apoyo en mis codos para mirarlo. Esta a milímetros de mi cuerpo, solo veo sus ojos, pero no me roza siquiera. Se que esta sonriendo, lo delatan sus pómulos. Cuando sus ojos conectan con los míos, tan verdes, tan brillantes, noto la punta de su lengua entre mis labios, sutil lenta pero que basta para que pierda la cabeza por completo. Cierro los ojos de placer y noto el mismo movimiento otra vez. Joder. Voy a deshacerme aquí mismo. Pero esta vez no se detiene. Hunde su cara entre mis piernas y mueve su lengua arriba, abajo, en círculos, succiona con los labios mi clítoris y mi cuerpo entero se arquea. MADRE MIA! Me habían echo esto antes pero no así. Me cago en la puta! Esto es el paraíso! De hecho no me gustaba tengo que reconocer, pero cada vez que Alex succiona o muerde mi clítoris con suavidad  es como si un rayo me diera de pleno y me atravesara de arriba abajo. Su mano derecha se mueve de mi cadera y noto como su dedo tienta mi entrada. Los lametazos no cesan, pasa la lengua por cada uno de los pliegues. Introduce un dedo en mi interior y veo las mismísimas estrellas. Una presión enorme se instala en mi bajo vientre. Su lengua y su dedo no paran. Estoy a punto lo se. Lo se por la presión, por que soy incapaz de mantener la espalda pegada al cochón, por que mis dedos de los pies empiezan a arrugarse. Estoy a punto, al limite y entonces, se detiene.
Por que para? Por que cojones para?
Sube lentamente hasta tumbarse de nuevo sobre mi.
-Por.. por que paras?- le pregunto sin voz
-No te creerías que iba a dejar que te corrieras así no?- se relame los labios mirándome a los ojos. Los tiene mojados, mojados y brillantes, de mi.-Estas tan dulce…- acaricia mis labios con el pulgar.
Estoy frustrada. Me ha dejado al borde del acantilado! Se va a enterar…
Lo empujo hasta quedar encima de el a horcajadas. Le paso la lengua por los labios y aprieto mi cadera contra su erección. Reparto besos recreándome en su cuello, bajando por su pecho, sus costillas. Sus músculos se tensan a mi paso. Bajo por su estomago hasta el borde de su pantalón. Noto que aguanta la respiración así que vuelvo a subir y repito el camino hacia arriba. Suelta el aire de golpe me acerco a su boca y cuando veo como levanta la cabeza para besarme vuelvo a bajar para abajo. Cuando llego al bode de su pantalón tiro de estos hacia abajo, pero le dejo los calzoncillos.  Al subir rozo con mi nariz su miembro que se sacude como respuesta, pero paso de largo y restriego mis pechos por el hasta volver a la altura de su boca. Su respiración esta descontrolada completamente. Me quito el sujetador y repito el camino hacia abajo.  Le doy un beso por encima de los calzoncillos y oigo un jadeo ahogado salir de su boca. Ahora soy yo la que sonríe.  Tiro del calzoncillo y se lo quito. Se lo que piensa que voy ha hacer, pero no. Va ha aprender a no jugar con mi placer. Subo lentamente resiguiendo su pierna con la punta de mi lengua. Cuando llego a la altura de su miembro levanto los ojos y veo que esta mirando. La boca entreabierta para poder respirar, las mejillas encendidas y el pelo resuelto. Sin dejar de mirarlo paso mi lengua desde la base de su miembro hasta la punta donde dejo un beso.
-Jodeeeeerr….- veo como traga saliva con fuerza.
Peros sigo mi camino por su estomago, restregando mis pechos contra él hasta acabar sentada encima, con las manos en su pecho y nuestros genitales pegados. Su corazón late descontroladamente, su pecho sube y baja con violencia, y yo me estoy divirtiendo mas que nunca viéndolo así. Esta completamente perdido. Muerto de deseo. Meneo mis caderas contra él y suelta un gemido ronco. Estoy tan mojada por la excitación que resbalo encima de el  sin problema.  Me muevo y coloco su miembro en mi entrada. Lo hundo en mi de un solo movimiento y los dos suspiramos de puro placer. Muevo mis caderas en círculos lentos, tortuosos. El placer que siento es infinito y se que el suyo también por como se muerde el labio aguantando los jadeos. Aumento la velocidad moviendo arriba y abajo y mezclándolo con círculos. Con un movimiento seco lo hundo en mi por completo. Repito el movimiento y mueve sus caderas profundizando la embestida. Muevo mi culo encima de él, cada vez mas rápido y profundo. Estoy al borde del orgasmo y noto como su miembro se sacude, se que esta cerca. Hunde sus dedos en mis caderas y esta vez soy yo la que se detiene cuando se que esta a punto. Abre los ojos de golpe y me mira.
-Por que paras?- apenas es un murmullo
-No pensarías que ibas a correrte no?- le digo con una sonrisa y la voz entrecortada.
Se levanta de golpe sentándose en el colchón,  me coge la nuca con una mano y  enreda el brazo en mi cadera pegándome mas a él.
-Donde coño has aprendido a mover el culo así? – me mira a los ojos directamente
-Bailando bachata recuerdas? Te enseñan a menar las caderas.  No te gusta?- le lamo los labios entreabiertos .
-Joder que si me gusta….
Afianza su agarre en mi cadera y sin dejar de mirarme mueve mi cuerpo marcando el él ritmo. Mueve la mano de mi cadera a mi nalga, la aprieta con fuerza y aumenta el ritmo empujando con su cadera para hacer mas profundo el encuentro. Jadeamos uno en la boca del otro sin dejar de mirarme. Estoy apunto. Mi bajo vientre se contrae, mi interior lo aprieta con fuerza mientras su miembro se sacude. Me mueve mas rápido, sin dejar de mírame y me dejo ir, sucumbiendo a un intenso orgasmo que hace que gima con fuerza, sigue moviéndose y un par de segundos  después noto como se corre dentro de mi con mi interior contrayéndose a su alrededor. Seguimos mirándonos fijamente, respirando el aire del otro. Sus ojos están mas verdes que nunca. Me atrae a su boca haciendo fuerza en mi nuca y me besa. Un beso tierno, húmedo, cargado de cariño e infinita dulzura que hace que me derrita entre sus brazos. Estoy jodida. Esto no es lo que debería sentir con alguien que solo debería ser sexo.
-Eres una descarada sabes?- su tono es suave, no es un reproche, mas bien le hace gracia.
-Por que?
-Por tortúrame como lo has hecho.
-Solo te la he devuelto.
-Y me encanta- sonríe y me da otro beso mas corto que el anterior.-Tenemos que levantarnos…
-Si.
Coge mis caderas con las dos manos y me levanta hasta que sale de mi interior. Noto como algo resbala por mi entrada hasta caer en sus piernas que estaban debajo de mi.
-Te has meado encima o algo?- dice con asco.
-No- lo miro con el ceño fruncido- eso- señalo sus piernas- es tu corrida guapo
-No jodas?- parece sorprendido- esto con los condones no pasa.
-No. Aunque tengo que reconocer que tampoco sabia que podía salir de esa manera…
-A no?- me mira extrañado.
-Por que te sorprendes?
-A ver, yo nunca lo había hecho sin condón así que en ese tema no tengo ni idea.
-Y yo si?- me esta mosqueando un poquito. Da por hecho que yo soy una experta o algo.
-Tienes un hijo…- me mira con duda, esperando mi reacción.
Lo miro fijamente. Mi cara debe de reflejar claramente que no me a gustado un pelo lo que acaba de decir.
-No tiene nada que ver- escupo- poco pude hacer yo ese día...
Me doy la vuelta y me meto en el baño cerrando la puerta. Me ha dolido. Se que no debería pero me ha dolido, mucho. Como si fuera toda una experta. Me meto en la ducha y me lavo el pelo. Lo necesito. De golpe me he sentido sucia, cualquier cosa que me recuerde ese maldito día me hace sentir así.  Cierro los ojos y me quedo debajo del chorro de agua respirando profundamente para calmarme.
No debo cabrearme con él por mi pasado.