CAPÍTULO 78: MARATÓN 3/3

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-Oh...que veo, ¿problemas en el paraíso? —rodé mis ojos irritada al ver a Troy recargado en el marco de la puerta con una enorme sonrisa en su rostro.

-Que te importa, mejor dime en dónde está Liam y el id*ota de Joel, tengo algo pendiente con ellos. —se acercó a mí levantando su mano para tocar mi rostro, pero puse el cuchillo en su pecho. —no me toques.

-De acuerdo, solo quería quitar la sangre de tu cara y esos están en la oficina de arriba, pero hay bastantes hombres cuidándolos. —dio unos pasos hacia atrás sacando un arma y entregándomela. —la vas a necesitar, Antonio está buscando a Maggie al parecer la tienen para presionarlo de que no los traicione, pero aprovechó que ustedes escaparon para tratar de huir con ella.

-Aja... ¿y tú por qué me ayudas? —agarré la pistola revisando el cargador para después dejarla detrás de mi espalda. —no creo que me ayudes sin algo a cambio.

-Recuerda nuestro trato, yo te ayudo y tú me ayudas a que no me arresten. —dijo quitándose el saco y la camisa dejándolas en el suelo. —no tardan en subir, deberías sentarte un momento, te ves mal...yo me encargo de estos y después veremos cómo subir sin que nos maten. —bufé caminando hasta unas cajas que estaban al otro extremo y al ver a dos tipo salir Troy se acercó comenzando a pelear con ellos, quería estar atenta a ellos, pero mi mente me traicionó y solo pienso si Matt estará bien, espero no se le ocurra pedir ayuda, tal vez exagero, pero estoy segura de que en esta zona no tienen por qué venir personas, a menos que trabajen con estos ineptos.

-¡Allison cuidado! —el grito de Troy me sacó de mis pensamientos y por poco un hombre bastante robusto casi me aplasta, pero me alcancé a levantar, saqué rápido la pistola dándole un par de tiros en la espalda. — ¿estás bien? —apoyé mi mano en el brazo de Troy inclinándome un poco para vomitar.

-Perdón...la sangre me está matando. —hice una mueca limpiando mi boca y al escuchar pasos Troy tomó una de las armas del suelo para apuntarme en la cabeza mientras me sujetaba de la cintura. — ¿en serio estar de mi lado duro tan poco?

-Tu solo sígueme la corriente. —fruncí mi ceño asintiendo despacio y al ver a todos los hombres salir me removí un poco. —no se preocupen ya la tengo, él se fue hacia el norte, muévanse si no quieren menos paga. —caminamos entrando al almacén y subimos las escaleras. — ¿estás lista o prefieres que ambos salgamos huyendo con vida de esto?

-Estoy lista...me deben la vida de Noah. —al caminar por el pasillo tres hombres estaban cuidando la puerta, pero nos dejaron pasar sin problema. Al entrar esos dos estaban sentados en el sofá y al vernos sonrieron.

-Oh pequeña, ¿tan pronto nos volvemos a ver? Pensé que saldrías huyendo cómo siempre. —dijo Joel poniéndose de pie, pero en cuanto Troy me soltó saque la pistola apuntándoles.

-Esta vez no...seré yo quien se aseguré de matarlos, pero antes vamos a jugar un rato. —mire de reojo a Troy. — ¿puedes despejar afuera para llevarlos a tu auto y buscar algunas sogas? Debemos de irnos antes de que los demás regresen. —él asintió saliendo de la habitación y unos segundos después se escucharon los disparos.

-Está despejado, iré por las sogas. —se escuchó el gritó Troy así que les hice una señal con mi arma para que avancen, fruncí mi ceño al sentir un leve mareo mientras caminaba detrás de ellos, Allison no se te ocurra desmayarte ahora o estás muerta.

-¿Qué le disté para que se pusiera de tu lado? —dijo Liam mientras bajaba las escaleras y al salir hice que se pusieran contra la pared.

-Inmunidad, lo de siempre. —me encogí de hombros y mordí mi labio mirándolos. —es una lástima que te dejaras convencer de trabajar para él... ¿valió la pena hacerlo? Ser cómo los tipos que te dedicabas a encerrar.

-Encerré a tantos y maté a muchos más...y ni así se acababan, me cansé de luchar contra ellos, ganaba más estando de su lado, son cosas de la vida. —negué despacio al escucharlo, sin duda ese niño que había conocido ya no estaba.

-Listo, no las encontraba, este lugar es un asco. —dijo Troy acercándose a esos dos, amarró primero las manos de Joel y suspiré tratando de tranquilizarme...por fin los tendré encerrados.

-Tu cara me dice que estás aliviada de tenernos, pero nunca cantes victoria antes de tiempo. —me tensé al escuchar a Liam y di un paso hacia ellos, pero fue más rápido que yo y tomó a Troy colocando una navaja en su cuello. —ahora harás lo que yo te diga o lo mataré...suelta esa pistola y aviéntala hacia mí.

-No te dejaré que te salgas con la tuya. —dejé la pistola en el suelo y le di una patada aventándola hacia él levantando mis manos. —déjalo ir, esto es entre tú y yo...ah ya sé es porque no puedes conmigo a pesar de que estoy lastimada, ¿verdad? —él se inclinó a tomarla y guardarla detrás de su espalda.

-Lo haré cuando subas al auto, no me arriesgaré a que escapes o vengan a intentar rescatarte, ahora camina hacia la izquierda, está mi auto. —mordí mi labio caminando por donde me indico hasta ver su auto unos metros más adelante. —toma abre la cajuela y entra. —me aventó las llaves las cuales atrapé y al ver a Troy guiñarme un ojo negué despacio sintiendo mi pulso acelerarse...no hagas una idiot*z, no lo hagas.

-Suéltalo y lo hago, te conozco, lo matarás en cuanto entre. —abrí la cajuela, pero no entré en ella. —hazlo, ya me tienes solo deja que se vaya. —dudo un poco, pero lo soltó, sin embargo, Troy le dio un golpe en el abdomen y comenzaron a forcejear. — ¡Troy basta, solo vete! —me acerqué a ellos, pero Joel se puso frente a mi impidiéndome el paso y sujetándome del brazo. —muévete, si le hace daño te mato.

-Desátame y podrás ayudarlo. —apreté mi mandíbula mirando hacia ellos los cuales estaban golpeándose. —solo recuerda que te encontraré a donde quiera que vayas. —desaté sus manos y se hizo a un lado. Corrí hasta ellos, pero Troy cayó de rodillas al suelo con la navaja justo en su corazón. —no mi*rda...no. —mis ojos se llenaron de lágrimas, pero al tratar de acercarme a él Liam me sujetó del brazo.

-Ya princesa, él se lo buscó. —dijo acariciando mi cabello, pero sentí mi estómago revolverse y apreté mis puños girando mi rostro mirando a Liam. —todo estará bien, nadie te va a tocar más que yo.

-Eres un maldito desgraciado. —le di un golpe con mi codo en el abdomen y después un puñetazo justo en la nariz.... — ¡mataste a Noah, era cómo tu hermano y a Troy! ¡eres un jodido loco! —metí mi pie entre los de él para así hacer que cayera al suelo y me subí encima de él comenzando a golpear su rostro. — ¡te odio, te odio, te odio! ¡Eres una basura! —sollocé hasta que sentí cómo me cargaban separándome de él y empecé a patalear tratando de soltarme.

-Tranquila...estoy aquí, ya pasó. —al escuchar la voz de Matt desvié mi mirada hacia él y me giré para abrazarlo con fuerza enterrando mi rostro en su pecho. —no sigas viendo esto. —giró su cuerpo dándole a espalda a Troy para que yo no mirará su cuerpo, me separé un poco para mirar a Matt y él acarició mi mejilla limpiando las lágrimas que resbalaban por está. —todo acabó...

-¡ARMA! —el grito de mi papá me hizo mirar hacia Liam, el cual estaba apuntando hacia Matt, giré nuestros cuerpos en un movimiento rápido y apreté mis ojos al sentir el dolor en mi espalda, lo último que escuché fueron otros disparos junto algunos gritos.   

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