CAPÍTULO 71: LA LLAMADA.

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*Narra Matt*

Desperté al sentir unas caricias en mi mejilla, Al abrir los ojos le sonreí a madre tomando su mano para besar su dorso. Me acomodé con cuidado sentándome en la camilla frunciendo mi ceño al ver el yeso en mi brazo con varios dibujos.

-Cierta personita se entretuvo dibujándote eso mientras te cuidaba. —dijo mi madre sentándose en la silla a mi lado. —te dejaron esto con una de las enfermeras.

-¿Alexa me dibujó eso? —negó moviendo su cabeza entregándome un sobre y lo abrí frunciendo mi ceño al sacar una hoja. — ¿no dijeron quién lo dejó? —volvió a negar y comencé a leer la nota en voz alta. —"Señor Carpenter si no quiere encontrar a su esposa muerta tiene que alejarse de ella, de lo contrario no tendré más remedio que hacerle daño, tómelo cómo una oportunidad de sacar a ese monstruo de su vida, no intentes advertirle o llamar a la policía porque lo estaré vigilando, ya comprenderá más adelante mis motivos, pero no lo olvide...aléjese o ella muere."

-Dios...hijo no importa lo que diga eso...tienes que decirle a Allison que está en peligro y decirle a la policía, deja que ellos se encarguen. —negué al escucharla y guardé la nota de inmediato al oír que abrían la puerta.

-Mamá ni una palabra de esto por favor, puedes dejarme solo para hablar con Sheila por favor. —ella asintió de mala gana y se levantó besando mi mejilla para después salir sin siquiera saludarla. —necesito que me ayudes a que mi esposa...Allison piense que vamos a tener una relación, te pagaré si eso es lo que quieres.

-Pero con una condición. —dijo parándose a mi lado y sujetó mi mano cosa que me desagrado. —cuando terminé todo este teatrito quiero una vida muy cómoda en los Ángeles, ya sabes que no tenga necesidad de trabajar.

-De acuerdo...pero yo también pondré condiciones y una de ellas es que no le puedes contar a nadie, ¿entiendes? —al escuchar la puerta miré de reojo y era Allison...sentí una opresión en mi pecho por lo que estaba a punto de hacer.

Jamás pensé que alejar a Allison de mi vida y lastimarla cómo lo he hecho me iba a doler tanto...pero no tenía otra opción, no por ahora, mi promesa de luchar por ella tendrá que esperar hasta que averigüe quién me mandó esa nota. Cuando ella se fue le pedí a Sheila que se fuera, no tenía ganas de ver ni hablar con nadie, aunque la única buena noticia es que salgo en unos minutos del hospital, ya era hora, me hubiera ido antes, pero mi mamá exageró con dejarme aquí más días y preferí no discutir además pensé que Allison vendría a verme aunque no la culpo, no debí mentirle así, en fin me levanté de la camilla cambiándome con algo de dificultad, en cuanto estuve listo tomé mis cosas saliendo de la habitación y sonriéndole levemente a Alexa cuando se acercó a mí quitándome la maleta.

-¿Estás seguro de tener un compromiso con esa chica? No tienes que hacerlo solo para lastimar a Allison, pero te apoyaré en lo que decidas. —pasé mi brazo por sus hombros caminando a la salida y mordí mi labio inferior.

-Sí, estoy seguro de eso, no te preocupes se lo que hago y gracias por eso. —ambos subimos al auto, aunque insistí en que me dejara conducir no lo hizo. Al llegar a la casa fui directo a mi despacho sentándome en mi silla, tengo que averiguar quién me mandó eso, pero no puedo decirle a Marcus porque puede decirle a Allison...tendré que buscar a alguien más que me ayude.

No me di cuenta de que me quede dormido hasta que escuche que tocaron la puerta, me acomode en la silla mirando a Alexa.

-Te trajeron esto y ve a dormir ya es muy tarde sino le diré a mamá para que te vuelva a llevar al hospital. —miré el sobre en sus manos y lo tomé rápido.

-Sí, solo veo esto y me iré a dormir, tú también hazlo. —cuando ella se fue abrí el sobre dejando el contenido en el escritorio. — ¿Qué mi*rda? Es Allison... —fruncí mi ceño tomando las fotos en donde aparecía Allison arriba de un ring, en un auto...no puede ser, mi celular comenzó a sonar así que contesté a pesar de que era un número privado. —¿Hola?

-Señor Carpenter...solo para demostrarle que su princesa es el monstruo aquí y si no me cree vaya a la dirección que está detrás de una de las fotos...verá quien es ella realmente. —me colgó y dejé el celular a un lado revisando las fotos hasta encontrar la dirección. Tomé las fotos saliendo de la casa, no sin antes tomar las llaves del auto y conduje apretando mi mano en el volante.

Media hora después me estacioné frunciendo mi ceño al ver demasiadas personas entrando y saliendo de una de las bodegas. Bajé del auto entrando al lugar encontrándome con los amigos y la familia de Allison, tuve que escabullirme entre la gente para que no me vieran hasta entrar por un pasillo, escuché unos gritos así que caminé más rápido hasta entrar a un lugar asqueroso, creo que son baños.

Me quedé inmóvil unos cuantos pasos de la puerta al ver Allison gritarle a un tipo que dejó tirado en el suelo, di unos cuantos pasos hacia atrás...mató a un hombre... ¿quién es ella realmente? Se lavó las manos cómo si nada y cuando me vio se quedó impactada dejando caer el cuchillo en su mano.

-Matt... ¿qué haces aquí? —me dijo asustada lo que me hizo enfadar...no puedo creer que me ocultara todo esto.

*Narra Allison*

Caminaba de un lado a otro sintiendo la mirada de algunas personas que aún estaban por las peleas además de las miradas de los chicos. Es que joder...cómo no me di cuenta antes, era muy obvio que nadie podría aguantar todo lo que yo la he hecho pasar...no puedo creer que me haya engañado tan fácil, pero la veía tan frágil que solo pensaba en protegerla, quien diría que sería yo quien se tenía que cuidar de ella. Pero esto no se quedará así...acabaré con esto de una buena vez. Quité la venda de mi cabeza entrando a la bodega y al acercarme a Tato le dije que sacara a todos de aquí lo antes posible ya que las cosa se pondrían feas.

-¿Qué piensas hacer, enana? —Frank me preguntó mientras caminaba a mi lado y lo miré de reojo haciendo una mueca. —no te voy a detener, quiero ayudarte.

-No lo sé, pero quiero a Jane para que me diga en la maldita cara porque mi*rda me engañó así. —caminamos por el pasillo hacia el camerino en el que estaba Alexey y lo vimos correr intentando escapar. —mi*rda...iré por él tu encárgate de ayudar a Tato a que se acabe la maldita pelea. —le quité el cuchillo a Frank de su cinturón y corrí detrás de él viendo que entraba a uno de los baños, al entrar me intentó golpear, pero logré esquivar el golpe. —Alexey no te conviene hacer esto, solo hablemos y te prometo que te irás. —me ignoró por completo y comenzamos a forcejear hasta que lo golpeé en su entrepierna. —bien...te lo buscaste... —tragué saliva al sentir un poco de nauseas, me irrita enfermarme, lo arrastré hasta uno de los inodoros. —dime en dónde mi*rda está Jane. —apoyé mi rodilla en su espalda haciendo presión, pero al no obtener respuesta sumergía su cabeza dentro del inodoro una y otra vez hasta que dejó de moverse. — ¡mi*rda...mi*rda...mi*rda! —le di una patada en la cabeza para después lavarme las manos y al darme la vuelta sentí que mi alma abandonó mi cuerpo...juro que hasta se me olvidó cómo respirar. —Matt... ¿qué haces aquí? —dejé caer el cuchillo y cuando lo vi darse la vuelta para irse me acerqué a él tomando del brazo. —por favor déjame explicarte...no te vayas, hablemos te lo ruego.

-¿Hablar? ¿De qué quieres hablar? ¿Del hombre que acabas de matar frente a mí o de este lugar? Ah ya sé, ¿hablemos de por qué me ocultaste que eres un jod*do monstruo? ... eres la persona más horrible que he conocido...y yo él más estúp*do por no darme cuenta, claro solo mírate... —me miró de pies a cabeza con desprecio y traté tomar su mano, pero se alejó aún más.

-No digas eso por favor...sé que lo dices porque estás enojado, pero déjame explicarte. Él no está muerto...está inconsciente. —soltó una carcajada caminando a la salida y caminé tras él.

-¿Crees que eso cambia las cosas? Eres una maldita mentirosa...pero que estúpido soy, toda tu maldita familia lo es...no me sorprendería que ni siquiera sea tu familia. —desvié la mirada hacia el suelo y sentí cómo me sujetó de los brazos estampándome contra la pared y sujetó mi mandíbula haciendo que lo mirara. —algo me dice que no me equivoco con eso...pero sabes...esta es la última vez que me ves la cara de id*ota...ahora soy yo quien no te quiere cerca de mí ni de mi familia, un ser tan asqueroso cómo tu no merece ni siquiera estar vivo...eres la peor basura del mundo, no te imaginas el odio y el asco que me provocas. —intenté contener mis lágrimas, pero no pude, sus palabras duelen demasiado.

-Suéltala si no quieres que te rompa el otro brazo. —le dijo mi papá, pero Matt solo apretó el agarré en mi rostro sin quitarme la vista de mis ojos. —suéltala, no lo repetiré otra vez.

-Porfavor...déjame explicarte, te juro que las cosas no son así. —me sonrió ladinobajando su mano a mi cuello y apretando un poco. —Matt...por favor, escúchame. 

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