La flor más bella // Lord Tewkesbury

Capítulo 9 Temporada 2

Me acerqué un poco al muro de la pared, para escuchar lo que hablaban Tewkesbury y mi madre.

— ¿Sabes cuál es el problema de ______? — dijo mi madre, pero no era pregunta que esperaba que él las respondiera, sino que ella misma lo quería hacer

— Señora, con todo respeto, ______ no tiene ningún problema — defendió. Suspiró pesado, quedó callado unos segundos y volvió a hablar —. Nuestra hija... Su nieta — increpó a mi madre —, ha estado secuestrada hace seis meses y no tenemos noticias — recordó, se notaba que intentaba ocultar su molesta pero no podía —, ¿Usted no está preocupada? ¿Cómo quiere que estemos? ¿Tranquilos?

— Por supuesto que me preocupo — contradijo —, pero el problema de ella es que espera que todos sean como tú, que piensen igual a ti, que se preocupen como tú lo haces... Para hacer eso, tendría que despedir a todos y los de la cámara no se lo van a permitir.

Y es que sí, habían pasado ya seis meses, yo tenía ocho meses y medio de embarazo, pero no teníamos ninguna información de Maddy ni algo que nos diera esperanza de saber donde está.

Escuché los pasos de mi madre alejarse, los pude distinguir por el tipo de calzado. Así que me moví de detrás del muro, quedando por la otra entrada, viendo Tewkesbury, quien llevaba sus manos a su cabeza y daba un pesado suspiro de cansancio, todos estos meses había estado estresado con la búsqueda de Maddy.

Él volteó, encontrándome a mí, parada observándolo con tristeza notable, él quedó un poco sorprendido al verme ahí. Sonrío levemente, acercándose a mí, colocando sus manos sobre mis hombros y depositando un beso sobre mi cabeza.

— ¿Te revisó el medico? — preguntó con notable emoción, a lo que yo respondí asintiendo, antes de venir a la sala donde estaba mi madre y Tewkesbury los médicos habían estado viendo mi estado. Él solo quedó observándome cuando asentí a su pregunta —. ¿No te dijeron nada?

— No... Bueno, me dijeron que estaba todo bien — respondí con una leve sonrisa —. Más bien, estuve pensando en que tal vez tu madre podría venir aquí... A ayudarme estás últimas semanas... Como lo hizo cuando tenía a Maddy — bajé mi mirada

— ¿A mi madre? — preguntó con notable confusión — ¿Por qué?

— Escuché lo que decía mi madre — confesé aún con la mirada baja —, ella cree que porque estoy así no puedo hacer bien las cosas cuando sí puedo... Y eso me frustra mucho porque yo hago mi mayor esfuerzo, además que tener a Maddy lejos me pone muy mal — mi voz se fue cortando y mis lágrimas acumulándose en mis ojos de solo recordar que Maddy estaba lejos

Tewkesbury me abrazó, pegando mi cabeza sobre su pecho y acariciando mi espalda —. Mi princesa, tranquila, vamos a encontrar a Maddy.

Él intentaba consolarme, con sus palabras y sus caricias pero no podía estar peor después de todo lo que había pasado y lo que acababa de escuchar. Él me decía que la íbamos a encontrar, que estaba seguro que ella estaba bien, pero los únicos reportes que teníamos de los detectives contratados por la corona y de Enola es que estaban cerca pero no tenían el lugar o cómo estaba ella.

Mientras él seguía consolándome, abrieron la puerta de la sala, uno de los servidores.

— Correspondencia importante, su alteza real — dijo el servidor, dejando una pequeña bandeja con una carta para luego irse.

Acompañe a Tewkesbury a leer la carta que había llegado, ellos dijeron que era importante. Aunque no leí mucho, no me encontraba con mucho ánimos, me despertó de mi inconciencia el salto de asombro de Tewkesbury.

— Ya saben donde está Maddy — soltó inesperadamente con una gran sonrisa en su rostro.