Capitulo 2

11.4K 661 69
                                    

Empecé a seguir a mi padre, sin pronunciar una palabra, para evitar un insulto. Siempre había querido poder participar en algo por mi misma, pero nunca me dejaban hacerlo, se supone que ya hace un tiempo mi hermano mayor tuvo que haber tomado el lugar de mi padre, pero él murió, tenia una enfermedad, no podían detectarla, hasta ya estar grave, aunque mi hermano siempre quiso huir de las responsabilidades que mi padre le imponía, pero murió.

Seguimos caminando hacia la gran puerta que nos llevaría nuevamente hacia el salón, hasta que escuche una pregunta por parte mi padre

— ¿Quién era el muchacho? — pregunto pero antes que yo respondiera el decidió añadir unas cuantas palabras más — Y ¿Por qué estabas con él?

— Yo quería salir a tomar un poco de aire, y estaba por ahí — fruncí mis labios 

— ¿Y qué es? ¿Se dedica a algo? No creo que sea un simple vendedor de periódicos — bufo 

— Oh, no, no — negué unas cuantas veces con la cabeza — es un marqués 

— Ah, por favor, un marqués — rodo sus ojos 

— Su clase tampoco están baja a la nuestra... ¿No es así? — con notable intriga salió esa pregunta de mi boca

— No quiero hacer un baldón a tu intelectualidad, pero es un marqués, un marqués de quien sabe que categoría, además, te recuerdo que tienes un ya compromiso pactado con Chad, te enviaremos a la escuela de señoritas y luego te prepararemos para que seas una buena esposa — sonrió orgulloso 

— Papá, yo sé que debo respetar tus palabras y tus ordenes, sin embargo te rectifico que yo no quiero casarme ni con Chad ni ahora, aún soy muy bisoña — y esa fue una corta queja ya que mi padre interrumpió 

— Tus interpelaciones hacia conmigo y tu compromiso son nefastas e inútiles, y si tanto me aprecias debes respetar mi decisión, ya te lo he dicho, te casarás con Chad gustes o no, y después de las nupcias espero no recibir quejas de Chad sobre ti y tu comportamiento, satisfacer a quien será tu esposo en pocos meses es lo más importante y lo que te marcara por el resto de tu vida, no quiero que luego digan que mi hija es una inservible — detuvo su paso 

— Solo necesita un grupo de personas, para que luego estén hablando cosas que son mentira, y se arruine la imagen de una mujer — fruncí mis labios 

— ¿Quieres dejar tu arribismo por un momento? Compórtate como lo que eres — me examino con la mirada — una señorita — enmarco cada sílaba 

Solo pude seguir acompañando su paso, hasta entrar al salón, todo tan perfectamente hecho y acomodado. Pero mi mente solo pasaba el hecho que en poco menos de un año me casaría con alguien que no amo, y con quien aún no soy capaz de entablar una conversación, que tal vez pase mi vida viviendo bajo un maltrato, viendo adulterios semanas por semanas, y esa no es la vida que yo quiero, y que mi hermano tampoco quería para mí. Solía decirme que siempre quería que comparta mi vida con alguien que amo y que ame a mí, que me de respeto y una vida feliz, hubiera preferido irme con mi hermano, pero él ya no está con nosotros. 

Hasta el momento del baile, simplemente piano y voz, preparándome para el momento que me toque cuando ya me llegue el momento de casarme. Hasta pasar a la siguiente pareja.

— Tú de nuevo — sonreí levemente.

La flor más bella // Lord TewkesburyTahanan ng mga kuwento. Tumuklas ngayon