Capítulo 19

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Brandon

Tenia el rostro oculto entre mis mano mientras me mantenía sentando en una de las sillas de la sala de espera, esperando noticias de algún doctor.

Aun intentaba procesar como había sucedido todo y en la manera que la noche había culminado.

Por tan solo unos segundos pensé que el corazón se terminaría saliendo de mi pecho. No existían palabras para explicar como me había sentido al verla sobre el suelo inconsciente con la que parecía ser su amiga, gritando por ayuda de manera desesperada.

Sentí una mano palmar mi espalda, brindandome apoyo.

-Ella estará bien.

Marcos me había acompañado a la clínica donde la habían ingresado hace más de dos horas. Incluso consoló a la amiga de Gisely que se mantenía sollozando a unos cuantos asientos lejos de mi.

No podía entender que había sucedido con ella, ella se veía tan bien, hermosa como siempre incluso estando enfadada. ¿Que demonios habia sucedido?

Estaba desesperado, las enfermeras no nos comunicaban nada y estaba a solo pasos de perder el control. El olor a desinfectante se instalaba en mis fosas nasales con descaro, causando que hiciera muecas de desagrado.

¿Porque tardan tanto maldición? -pienso con desespero.

De momento un hombre con bata se nos acerca y comienza a mirar a cada uno de nosotros.

-¿Familiares de la señorita Montell?

Su amiga se levanta rápidamente de la silla mientras intenta secar sus lágrimas.

-Yo soy su amiga más cercana, sus padres se encuentras lejos y no están al tanto de la situación-intento hablar de manera calmada.

El asintió.

-La señorita se encuentra bien en estos momentos, tuvimos que hacerle un lavado de estomago por la cantidad de veneno que había ingerido, si no la hubiéramos intervenido rápidamente en estos momentos es muy probable que no hubiera sobrevivido a semejante dosis-comenzo a explicar mientras analizaba unos papales que llevaba en una tableta.

Me levante abruptamente de la silla al escuchar sus palabras.

-¿Veneno?-pregunte de manera brusca.

El doctor asintió, dejando de analizar los papales y mirándome.

-Si, al parecer ingirió algo que contenía una gran cantidad de veneno. Hasta el momento su estomago se encontrara delicado pero con las recomendaciones que le daré se encontrara bien en un par de dias-explico, miro el reloj que colgaba de su muñeca para luego volver a mirarnos-Es la hora de visitas por si desean pasar a verla. Cualquier cosa soy el doctor Smith. Se encuentra en la habitación A53.

Su amiga no espero ni un segundo mas y salió con paso apresurado hacia donde el doctor había indicado.

-Ella fue envenenada-susurre incrédulo, sintiendo una rabia repentina hacia la persona que atento contra su vida.

Una mano se poso sobre mi hombro, captando mi atención.

-¿Quieres que llame a la policía para que comiencen a investigar?-pregunto Marcos, mirándome con expresión seria.

Negué rápidamente. Ya me encargaría yo personalmente de averiguar quien había sido el bastardo infeliz que había intentando asesinarla. Existían muchas posibilidades, podían ser enemigos de mi pasado intentando llegar a mi de una manera u otro, como también podia ser cualquier persona que odiaría a Gisely hasta tal punto de hacer algo como esto.

-Ve a descansar, yo te llamare cuando necesite algo-di un par de palmadas en su espalda.

El asintió sin decir nada.

Pase una mano por mi cabello, desordenandolo por completo.

Me sentía cansado y tenía unas enormes ganas de ir a verla pero sabía que en este instante su amiga debe de estar con ella.

Comence a caminar por el pasillo, buscando la habitación que el doctor había indicado.

Estaba a punto de abrir la puerta cuando la voz preocupada de su amiga llego hasta mis oídos.

-Esto puede ser muy peligroso Gisely-comento alterrada-Debió haber sido esa copa que te ofreció el mesero, fue extraño que hubiera sido especialmente dirigida hacia a ti.

Mi ceño se fruncio al escuchar sus palabras.

-Debio haber sido el, la persona anónima. Primero era la caja y luego un mensaje con una amenaza. Pero ahora todo esto se esta saliendo de control, ¡Intento matarme por Dios! Debo hablar con el oficial que nos atendió en la comisaria hace un par de días atrás, quedo en llamarme por si encontraba algo pero hasta este momentos no se ha comunicado conmigo -su voz se escuchaba afectada-Estoy empezando a tener miedo Jennifer, no se que será capaz de hacer la próxima vez. ¿Y si intenta hacerle daño a alguien cercano a mi? ¿Que clase de persona hace algo como esto?

-Debes mantenerte calmada, tan pronto te recuperes iremos juntas a la comisaria, te lo prometo-intento tranquilizarla.

Me aparte de la puerta intentando procesar toda la informacion que acababa de escuchar. Gisely estaba en problemas y al parecer en uno muy grave. La persona que la enveneno ya había estado en contacto con ella, lo cual significaba que esto no tenia que ver conmigo y que el asunto parecía personal.

Apreté los puños a mi costado. Yo no permitiría que le volvieran hacer daño, jamas. Haría lo que estuviera en mis manos para mantenerla a salvo, encontraría a esa persona y yo misma me encargaría de ella personalmente.

Ya todo había quedado mas que claro, había tomando una decisión y no había nada que me hiciera cambiar de pensamiento.

Palpe los bolsillos de mi pantalón, intentando encontrar mi teléfono.

Busque en mi lista de contactos y al encontrar el nombre que estaba buscando pulse el botón de llamar.

-Necesito que me hagas un favor-hable rápidamente al escuchar la otra voz.

AtracciónWhere stories live. Discover now