─ Y aunque hubiésemos querido hacer algo ante ello, no podríamos conseguirlo. Ella también está unida a los Cullen por un lazo más fuerte.

Sam resopló inconforme mirando a otro lado.

─ ¿De qué habláis? ¿Que lazo? ─ preguntó Jared confundido.

Miré entonces a Billy y a Harry negando con la cabeza, pidiéndoles que no lo dijeran. No quería más peleas.

Pero no caí en cuenta de la otra persona que lo sabía.

─ Gala es compañera del cabeza de familia. ─ dijo Sam entre dientes ─ Como si fuese la impronta de ese chupasangre ─ explicó molesto.

Sam me miró completamente enfadado, como si yo lo hubiera elegido. Jared me miró con las cejas alzadas sin creerselo y Paul me miró sin ningún gesto.

─ ¿Es verdad? ─ me preguntó Paul con rictus serio.

─ ¡Sí, es verdad! ─ alcé la voz mirando a Paul. ─ ¡Pero eso ya no importa! ¡Él se ha ido sin darle valor a nuestra unión! ─ miré a Sam ─ ¡A si que no sé porqué os jode tanto! ¡¡Yo no elegí eso!!

>> ¡¡Ellos no están!! ¡No volverán! ¡¡Y joder!! ¡Yo solo intento seguir hacia adelante! ¡Pasar página! ¡Pero todos a mi alrededor me repiten constantemente sobre esos malditos chupasangre! ¡Nadie entiende que ya no quiero saber nada de esa familia! ¡¡Se fueron pero vosotros les traéis de vuelta!!

Exploté.

Simplemente no aguanté que le dieran tanta importancia a mi lazo con ese vampiro.

El propio Carlisle no le tomó importancia, ¿por qué los demás sí lo hacían?

Yo solo quería ir hacia adelante.

Olvidarme de Carlisle y de su familia.

Pero Isabella me habla de ellos y la manada también lo hacía...

Vi que todos me miraban un poco arrepentidos, pero la molestia ya se había creado.

─ Llevo dos meses centrándome en mi misma para olvidarle...─ dije en voz baja mirando al suelo. Aunque por el silencio sabía que me escucharían ─ Pero siempre termino con su rostro en mi mente por cualquier cosa, siempre habrá gente que me lo recuerde...─ mi pelo calló hacia mi cara tapándome ─ Y ya no quiero pensar más en él...solo me miento a mí misma diciéndome que ya estaba olvidado...p-pero n-no lo está, y Carlisle me ha jodido bien.

Y después de tanto tiempo sin llorar por él...una lágrima bajó por mi mejilla.

La limpié rápidamente y alcé la cabeza con gesto serio.

De verdad que esa familia de fríos no merecían que yo llorase por ellos... entonces...¿Por qué seguía haciéndolo?

Todos en la sala me miraban, esta vez con el rostro compungido, sabían que lo habían hecho mal.

─ Será mejor que me vaya a casa...─ dije sin ganas ─ Si me necesitáis para cualquier cosa os escucharé.

Comencé a caminar hacia la salida, pero me agarraron del brazo.

─ Yo te llevo.─ Paul me miraba serio

Me deshice del agarre y negué con la cabeza.

─ No tienes forma de volver, nosotros te hemos traído ─ me replicó.

─ Iré andando.─ dije sin ganas.

─ Gala no me jodas. Es de noche, no te dejaré ir sola. ─ resopló molesto. Paul tenía muy poco aguante.

─ Haz lo que quieras ─ dije volviendo a caminar hacia la salida.

Escuché como resoplaba de nuevo y pasó por delante mía saliendo antes que yo de la casa. Cuando yo salí Paul ya era un gran lobo gris que me miraba incesante.

Se tumbó en el suelo para que me subiese. Esta vez fui yo la que resopló, chasqueé la lengua y me subí en su lomo.

Quería llegar rápido a casa, y sabía que si Paul corría llegaría en un santiamén, pero el lobo no tenía la misma idea, pues iba caminando a un paso normal.

─ ¿Puedes ir más rápido? Quiero llegar a casa ─ dije en un tono monótono.

Pero Paul me ignoró. Ni me contestó ni cambió el ritmo. Suspiré resignada.

Los minutos fueron pasando y podía decir que Paul hasta había bajado la velocidad. Pero aún así no dije nada.

Porque en realidad...este tranquilo paseo por el bosque nocturno me estaba haciendo bien. Mis sentimientos se estaban calmando, ya no había tristeza ni ganas de llorar, estaba...relajada.

Sempiterno || °Carlisle Cullen° Where stories live. Discover now