Es bueno verte, Adin.

163 25 3
                                    

Cale empezó a pensar.

'Parece que ahora siempre estoy soñando cada vez que me desmayo. Sin embargo, tiene que ser este maldito sueño molesto...'

Sus ojos fríos miraron alrededor.

Actualmente estaba soñando.

Tenía que ser un sueño. ¿De qué otra manera podría si se encontraba en esta manera? ¿Justo en este momento?

Fue a principios de enero, justo después de unos meses que despertara su primera habilidad. La alimentaron a ella y a su distrito, luego, la separaron de sus amigos quedando en este infierno.

Podía ver el lugar a su alrededor todo destruido.

Cale, no, N°1981102131 estaba acurrucada dentro de la boca de un monstruo de baja clasificación.

Levantó la cabeza con cautela, miró entre los grandes y filosos dientes del cadáver en el que se hallaba. El olor a descomposición era cada vez más fuerte a forme pasaban los días. Fue tanto, que la hizo estornudar.

"...Mie*da."

Realmente fue un maldito sueño molesto.

Tres días.

N°1981102131 había sobrevivido acurrucada en la boca de este monstruo durante tres días bebiendo de la sangre de este mismo para no morir de hambre.

"Maldición."

Las gotas de sangre caían de sus ojos, pero N°1981102131 ni siquiera había pensado en girar la cabeza hacia un lado.

Sin embargo, Cale en el sueño maldijo mientras giraba la cabeza.

Miro todo el 'campo de entrenamiento' que estaba bastante desordenado. Habían muchos cadáveres por donde quiera que mirará.

Los cadáveres de humanos y monstruos llenaban el lugar.

Fue la primera vez, que N°1981102131 entró en este lugar, sin saber qué hacer. Como resultado, N°1981102131 imitó a las personas que luchaban contra esos monstruos.

'Realmente es ese día'

Cale, no, N°1981102131 fue la única sobreviviente de la zona norte.

En el primer día en el campo de entrenamiento, se lo pasó siguiendo a un grupo de personas que aparecían saber lo que hacían.

El segundo día, vio cómo todos ellos murieron. Se escondió entre uno de los cadáveres de los monstruos y se quedó allí, rogando que nadie la encontrará.

En el tercer día...

No tenía pensamientos en absoluto.

No se pudo evitar.

Todo lo que podía ver mientras estaba acurrucada era oscuridad y los escombros de la destrucción, mientras que lo único que podía oír eran los gritos y los gritos de los monstruos.

Sin embargo, todo esto terminó después de tres días.

"¡Ja!"

Unos pies aparecieron.

"Aquí hay alguien que sigue respirando."

Seguía con vida...

N°1981102131 se acurrucó aún más en la boca del monstruo. Aquí era tibio y aunque su piel era quemada por el último aliento del monstruo, era mejor que estar allí afuera. No quería exponerse al peligro de ser asesinada o devorada por esos monstruos.

En aquel entonces, tenía miedo de que la encontraran. Ni siquiera tuvo tiempo de llorar por lo asustada que estaba, tampoco pidió ayuda.

Sabía que nadie la ayudaría nunca.

The Trash Doll.Where stories live. Discover now