24-Shisui

767 139 39
                                    

Izuna subió hacía el poste en la esquina de la calle, la fuente se encontraba muchos metros sobre el suelo, nuestra ropa de técnicos era una coartada, había conseguido los trajes en linea.

—¿Hay algún problema con el cableado?

Me dijo una señora, su traje, ceño fruncido y actitud arrogante, me dijo que era una abogada del bufet que estaba cruzando la calle.

—Digame si piensan dejar está cuadra sin servicio, porque tengo mucho trabajo y necesito mí notebook.— Mis ojos se dirigieron al leve movimiento de su pie en el suelo.

Le di mí sonrisa conquistadora.
—No se preocupe señorita, solo estamos ajustando las líneas. No va a haber cortes, usted puede terminar su trabajo tranquila.

Sus labios formaron una mueca. Me miró y luego asintió.
Espere un segundo, dos... Luego abrió su boca. Ya sabía lo que iba a decir.

—Soy, abogada, tengo mucho trabajo, pero podría tomarme unos minutos a la hora del almuerzo. Ir a un café, o a comer algo...— Agitó las pestañas y se lamió los labios de forma descarada mientras sus ojos hacían un rápido recorrido por mí cuerpo.

Había desabrochado el mameluco y lo tenía colgando de la cintura, la camiseta blanca que llevaba debajo, se pegaba a mí cuerpo. Estaba orgulloso de no dejarme estar siempre frente a la computadora, el entrenamiento en el escuadrón era intenso y cuando nos dimos la baja, seguí entrenando con mis primos y hermanos.
Estaba en forma. Y está abogada lo sabía.

—Primo, deja de coquetear con la señorita y dame una mano.

Sonreí antes de mirar hacía arriba y ver a Izuna colgando.

La mujer miro hacia arriba también, pero el sol encandiló sus ojos y sabía que no habia podido ver a mí primo.
Solo su silueta.

—Señorita, quizá debería regresar a su oficina, esto no va a llevarnos mucho tiempo y tenemos más zonas que revisar y reparar. — Mentí.

—Oh, claro. Si. Por supuesto.

Podía sentir como me miraba mientras cruzaba la calle y entraba en el edificio.

Izuna termino de intervenir la red del laboratorio.

Cuando bajó, tenía una sonrisa arrogante en su rostro.

—¿Te dio su número al menos?— se burló.

—Creo que quería almorzarme.— Me estremecí y el maldito empezó a reír.

—Todo está listo. Vamos a revisar nuestras camaras.— Avanzo por la calle hasta la camioneta que teníamos esperando.

Nos largamos, ambos ansiosos por llegar y revisar las cámaras.
Teníamos acceso a los edificios de toda la cuadra y las calles al rededor del laboratorio.

Unas cuantas horas de revisar las cámaras y ya sabía los códigos para entrar en cualquier sitio de esa manzana.

Incluso pude ver a la hambrienta abogada, comerse al cadete de la cafetería, cuando el pobre chico le llevó su pedido a la hora del almuerzo.

—Pensar que pudiste ser tu, mira como trabaja esa boca. Uff...— se mofó Izuna, sentado a mí lado.

Solté una carcajada.

La puerta del garage se abrió y una bonita pelirosa, empujando un cochesito entró cantando.

"Sin miedo, lo malo se nos va volviendo bueno.
Las calles se confunden con el cielo, y nos hacemos aves, sobrevolando el suelo, así sin miedo, si quieres las estrellas vuelco el cielo.
No hay sueños imposibles ni tan lejos. Si somos como niños,
sin miedo a la locura, sin miedo a sonreir...
Sin miedo sientes que la suerte está contigo, jugando con los duendes abrigándote el camino. Haciendo a cada paso lo mejor de lo vivido
Mejor vivir sin miedo..."

Antes de mirar en nuestra dirección, saco a Sarada del coche, y la abrazo mientras bailaba y cantaba. Con la bebé dando chillidos emocionados, sonreía y soltaba balbuceos.

Izuna suspiro.
—Ella es increíble.— murmuró para que solo yo pudiera oírlo.

—¿Aunque cante tan feo?— me ligue un codazo en las costillas, pero estaba riendo bajo.

Sakura seguía destruyendo la canción de Rosana, mientras Sarada reía fuertemente.

—Joder... si canta bastante feo, pero es adorable.— Añadió mí primo.

Cuando la pelirosa nos descubrió, sentados detrás de los monitores. Se puso muy roja.

—Engendrito, ven con el tío Izuna. — dijo antes de levantarse y buscar a la pequeña.

—Lo siento, creí que estaban trabajando. Le escribí a Madara que llevaría a Sara a la plaza.

—Volvimos antes. No te preocupes, nuestros oídos se van a recuperar. — Solté.
Luego sonreí.

Saku me miró indignada. Aunque también sonrió.

—Bueno, me alegro, quizá deba ampliar mí repertorio músical. ¿Tú que dices muñeca?— La pequeña babeo y chilló feliz. — Si. Yo también lo creo.— le respondió, como si tuviera una conversación con la niña que solo ellas podían entender.

—¿Verdad que ya tuvimos más que suficiente de los dones musicales de Saku?— Pregunté suavizando mí propia voz.

Sarada negó. Literalmente negó con su cabecita.
Estábamos paralizados, mirando a una cría de apenas cuatro meses, que parecía entendernos demasiado bien.

—Oh, tesoro estoy segura que los chicos a van a amar a Xuxa. — Saku sonrió, pero podía jurar que había una nota de maldad y venganza en su voz.

Lo comprobamos segundos después, cuando empezó a cantar nuevamente.

"Inventé una danza nueva
Que puede hacerte electrizar
Quien querrá hacer la prueba
Sólo hay que saber saltar

Yo doy de repente un pasito hacia atrás
Quito de mi mente los males que hay
Esta danza de los niños
¡No me canso de bailar!

Xu xu xu, xa xa xa
Este ritmo nuevo voy a bailar
Xu xu xu, xa xa xa
Si bailamos juntos, ¿por qué parar?"

Maldita sea, el cabron de Izuna se sumó al bailecito que se armó entre los sillones, Sarada chillaba de la emoción desde su cochesito.

Estábamos tan jodidos, porque mí corazón latía más rápido que nunca, mí primo la miraba embobado y que me condenen si mí rostro no reflejaba esa misma mirada.

***************************************

Este capítulo me divierte muchísimo.
Las dos canciones que canta Saku me encantan.
Si. Cómo leyeron. ¡Me encantan! Mis gustos musicales son muy amplios jajaja. Aunque tengo mis límites muy marcados.
Algún día hablaremos de lo que no me gusta. Por ahora me gusta que sepan todo lo que si me agrada.

Imaginé a Saku, súper relajada, cantando con Sarada en brazos y bailando por el almacén, sin notar la presencia de los chicos junto a los ordenadores.
Y su venganza para Shisui, con Izuna sumándose a la coreografía. Bueno, de solo imaginarlo ya me estaba riendo.

Capitulo dedicado a lovess2004 que no aguanta hasta el sábado. 😁💕

Gracias por tanto apoyo.
Besitos Húmedos y mucho vómito de bebé unicornio que saltó demasiado con la coreo de Xuxa.🤭😜

👑Reina Arcoiris🌈

"Misión: Bebé" Sakuharen 🔞Where stories live. Discover now