Bajo la lluvia || Izana Kurokawa

Capitulo 29

|| 12 días ||

Helena

Habían pasado 4 dias desde que había hablado con Izana, nos habíamos estado viendo más seguido y obvio tuve oportunidad de contarle a Amber sobre nosotros, también me encargué de contactar a Chifuyu, porque quería que volviese nuestra amistad, y ademas tenia algo pendiente, así que quedamos de vernos este día.

Me estaba arreglando intentando ponerme ropa casual y un poco abrigada porque los aires eran muy fuertes y aunque me gusta mucho el frío, no significa que sea muy tolerante a él.

No tenía clases, habían vacaciones de dos semanas por el aniversario de mi escuela, teníamos que asistir a algunas actividades, pero no todas eran obligación.

—Helena.—Mireya toco mi puerta y fui a abrirle.—Te buscan abajo.—sonrió

—Ahora bajo.—le dije mientras le devolvía la sonrisa.

Era Chifuyu, así que solo tome mi bolsa que ya estaba lista y baje.

—Hellooo.—Salude mientras Chifuyu volteaba hacia las escaleras.

—Hola, Helena. ¿Como estas?

—Todo bien, muy bien. ¿Tu?

—Igual.—Se encogió de hombros.—Me alegra que nos hayamos encontrado otra vez.

—Igual a mi Fuyu...—Mi mueca se volvió algo triste.—Quiero pedirte un favor...no me lo tomes a mal, también quiero pasar tiempo contigo hoy, tenemos todo el día, pero...realmente me gustaría visitar la tumba de Keisuke...

—Mhm, entiendo Helena no te preocupes.—El sonrió.—Te propongo pasar a comprar unos yakisobas, luego te llevare al cementerio.

—A el le encantaban...

—Lo se.—Chifuyu bajó su cabeza.—Por eso siempre que lo visito llevo uno, y me como solamente la mitad.

—¿Eh? ¿Por que la mitad?—cuestione

—Cuando nos conocimos, el me invitó a su casa a comer Yakisoba, pero solo le quedaba uno así que lo acabamos compartiendo...—Fuyu sonrió tan dulce, siempre ha sido muy tierno.—Pero bueno, ¿te unes?

—Claro.

Le propuse ir en moto esta vez, la verdad no tenía ganas de sacar el auto y mi moto casi nunca salía de casa, así que... era un buen día.

—¿Manejas tu o yo?—le pregunté sacando las llaves.

—Mmm, yo. No se como estarán tus habilidades de conductora ahora.—Bromeó quitándome las llaves

—¡Oye!

Chifuyu comenzó a reír mientras se subía a la moto y yo negaba con mi cabeza yendo a abrir el portón para sacarla.

Una vez afuera, subí detrás suyo y el condujo hasta una tienda cercana, para bajarnos a comprar el Yakisoba y algo de beber.

Entramos a la tienda y no es tan grande así que no era difícil encontrar las cosas.