27."¿Y no se te activó?"

1K 68 5
                                    

Ian

Sigo sin saber de qué manera hacer que Summer acceda a todo lo que deseo, de una buena vez. Es desgastante tener que estar buscando quien satisfaga cada uno de mis caprichos. Tengo a una de las mujeres más irresistibles del maldito campus, y sin embargo, no puedo tenerla debajo de mis colchas, gritando mi nombre, porque la muy santa, no cree que sea aún momento para dar ese paso en nuestra relación.

Terminaría con ella de no darme una imagen de triunfador ante todos, porque seamos realistas, ¿Summer que me ha dado para continuar con ella?. Podrá besarme y otorgarme el inútil título de novio, pero ¿eso de que me sirve?

Jason

seré un poco breve, y les contaré sobre mi fabuloso 14 de febrero. Mis padres tienen una casa en el lago, la cual según mi hermana, es un lugar demasiado romántico como para tener una cita, así que de ahí surgió una idea perfecta.

Llevaba toda la semana pensando acerca de todo lo que tendría que planear para ese día y dejar impresionada a Jade. Creí que perdería la cabeza al primer intento de hacer surgir una idea en mi cabeza, hasta que mi bella salvación llegó.

Summer se encargó de originar en plan, todas aquellas cosas cursis y románticas que le gustan a toda chica, mientras que de mi parte, me encargaba de cumplir las órdenes de mi mandona hermana.

El día llegó, y para mi absurda sorpresa, me encontraba demasiado nervioso desde que desperté por la mañana. <<¿Y si no le gusta?, ¿y si tiene otros planes?, ¿y si prefiere quedarse en casa?>>, en teoría ella no sabría adónde la llevaría, pero todas éstas dudas, amenazaban con hacerme trizas la cabeza.

Jade

Justo el día de san Valentín, fui prácticamente secuestrada por mi novio, luego de que me haya hecho subirme a su auto, sin decirme con exactitud adónde nos dirigíamos.

-Dime adónde vamos. Comienzas a asustarme.-salió de mi boca, en un hilo de voz. <<No seas tonta Jade, él no te haría daño>>.

-Descuida... si te preocupa que nadie sepa dónde te encuentras, puedes llamarle a tu padre y asegurarte que él sabe adónde te llevo.-Sin duda eso me tranquilizó.

Me quedé callada el resto del camino, el cual me parecía eterno, mientras Jason se encargaba de conducir con mucha precaución por la carretera. Después de casi una hora de viaje, se metió por un camino empedrado, lleno de árboles por ambos lados.

Espero recordar el camino por si esta es una de esas escenas de películas de terror y asesinatos,  en donde debo de salir huyendo y pedir ayuda. <<De acuerdo, me estoy mal viajando>>.

Jason sin seguir diciendo palabra alguna, se bajó del auto y abrió mi puerta como siempre solía hacer. Estamos en medio de la jodida nada, y no veo señales de vida. Ni siquiera de los pequeños animalillos del bosque. Pero cómo ver ardillas o pajarillos, si no llego ni a intento de blancanieves,  o esa chica pelirroja de la película de <<encantada>>.

Mi novio tomó mi mano, y comenzamos a caminar por el sendero que parecía interminable. Poco a poco, fui divisando una pequeña casa, a la cual parecíamos acercarnos más y más.

De un momento a otro, estábamos dentro, disfrutando de una maravillosa comida, música relajante, y de la mejor compañía, hasta que todo se fue al demonio cuando casi pasamos a más de simples besos.

*****

Summer

No le encuentro sentido a mi día, ni a mi vida, ni al drama que lleva armando Jason hace días. Sí, estoy en mis días, y es algo que cualquiera debería comprender. No, no es que esté peleada con la vida, pero simplemente, es desesperante querer amor y cariño, y tu novio esté demasiado ocupado haciendo no sé qué cosas, tu hermano esté de insoportable porque algo pasó con su novia, y tu mejor amigo no pueda visitarte, o su hermana se aventará de lo alto de su cama, para acabar con su sufrimiento.

Inexplicable Donde viven las historias. Descúbrelo ahora